“La homosexualidad es una deficiente sexualidad” y otras perlas de la Iglesia
“La homosexualidad es una deficiente sexualidad”. Así la definía el elegido por el Papa Francisco para convertirse en el nuevo cardenal español, Fernando Sebastián, en una entrevista concedida al diario Sur el pasado fin de semana. En ella, añadía también que el problema “se puede normalizar con tratamiento”.
El nuevo hombre del Papa ya protagonizó una sonada polémica en 2007, en su época de arzobispo de Pamplona, por pedir el voto para partidos como Falange o Alianza Nacional para las elecciones de 2007. Y aunque con estas declaraciones sobre la homosexualidad se ha granjeado críticas desde diversos sectores y ha incendiado las redes sociales, estos argumentos homófobos no son algo nuevo en el seno de la Iglesia. Sacerdotes, obispos y hasta el propio Papa son los responsables de 'perlas' como estas:
1. “Os aseguro que encuentran el infierno”. Viernes Santo del año 2012. La 2 de TVE retransmitía en directo la liturgia especial de ese día, celebrada por el obispo de Alcalá de Henares, Juan Antonio Reig Pla. La homilía, donde normalmente se recuerda la muerte de Jesús de Nazaret, ese día, en esa parroquia y difundida a toda España gracias a la televisión pública, acabó dedicándose a quienes “llevados por tantas ideologías, acaban por no orientar bien lo que es la sexualidad humana; piensan ya desde niños que tienen atracción hacia personas de su mismo sexo y, a veces, por comprobarlo, se corrompen y se prostituyen”, dijo Reig Pla.
“Os aseguro que encuentran el infierno”, sentenció, no sin antes asegurar que, con ayuda, los homosexuales pueden “vivir en castidad”. Ante la polémica suscitada, y lejos de rectificar, el obispo concedió una entrevista en la que afirmaba: “No quiero ofender a nadie, pero no renuncio a anunciar la verdad”.
2. “Que se aparten de los demás, no sea que contagien a otros”. Homófobo y discriminatorio. Así podría definirse el mensaje del cura de El Burgo Ranero (León), Jesús Calvo, que aprovechó su intervención en el programa Las Mañanas de Cuatro para cargar también contra el matrimonio homosexual. “Déjales a su ritmo, allá ellos. Que arreglen su anomalía psíquica”. Sus declaraciones han ido más allá y recientemente afirmó que no le “extrañaría” que el cáncer del activista gay y político socialista Pedro Zerolo sea un “castigo de Dios”.
3. “Hijos con graves perturbaciones de su personalidad”. Los feligreses de Segorbe-Castellón pudieron leer en la última Hoja Parroquial de 2013 las consecuencias del matrimonio homosexual. Eso sí, según su obispo, Casimiro López. Para el jefe de los curas castellonenses, las parejas de personas del mismo sexo provocan “el notable aumento de hijos con graves perturbaciones de su personalidad”, ya que se desarrollan en “un clima que termina con frecuencia en la violencia”.
Además del “debilitamiento del amor duradero entre los esposos”, permitir que los homosexuales se casen sienta “las bases para la destrucción del matrimonio y de la familia, negándoles su valor insustituible para la acogida, la formación y desarrollo de la persona humana y para la vertebración básica de la sociedad”.
4. “Una movida del diablo”. “Si una persona es gay y tiene buena voluntad, ¿quién soy yo para criticarlo?”. Así de tolerante se mostró el Papa Francisco en un viaje con periodistas el pasado verano. No debía de pensar lo mismo antes de convertirse en el heredero de San Pedro, cuando el todavía conocido como Bergoglio calificó el proyecto de ley entre personas del mismo sexo en Argentina como “una movida del diablo” y consideraba la posibilidad de que se hiciera efectivo como “una guerra de Dios”.
5. “¿Vives en la fornicación, eres homosexual?”. “¿Vives en la fornicación, eres homosexual?”.El cura de Beniarrés (Alicante), Andreu Susarte, ha comenzado el año difundiendo entre sus feligreses un cuestionario para ayudarles a confesarse. El sexo y la homosexualidad son faltas en las que reinciden muchos pecadores. “¿Veo películas pornográficas?”; “¿Me masturbo?”; “¿Vivo en la fornicación?”; “¿Soy homosexual?”; “¿He tenido alguna relación sexual con un animal?”, son algunas de las preguntas.
6. “Su conducta es desordenada”. Algo más comedidas parecen las declaraciones del que fuera durante diez años –de 2003 a 2013– secretario general de la Conferencia Episcopal Española, Juan Antonio Martínez Camino, quien aseguró que “todas las personas, con independencia de su conducta, son dignas de un respeto absoluto”, para acabar diciendo, no obstante, que la de los homosexuales es “desordenada”.
7. “No se debería hablar de pedofilia, sino de homosexuales atraídos por adolescentes”. Con esta frase intentó zanjar en 2009 los casos de abusos sexuales dentro de la Iglesia el arzobispo y observador permanente del Vaticano en la ONU, Silvano Tomasi. “Dentro del clero católico, sólo entre el 1,5 y el 5% de los religiosos han cometido actos de este tipo”, justificó para acabar criminalizando a los homosexuales: “No son pedófilos, sino efebófilos”.