La tasa de incidencia a nivel nacional ha experimentado un ascenso desde la semana pasada e incluso ha vuelto a superar la barrera de los 100 casos por cada 100.000 habitantes. Este indicador se ubica este martes en los 106, pero con claras diferencias si se amplía el foco por edades. Entre los jóvenes de 20 a 29 años, la incidencia marca una media de 251 puntos y entre los de 12 a 19, de 243,42.
El Ministerio de Sanidad ha empezado a publicar este martes los datos de incidencia separados por edades y comunidades, apenas unos días después de los macrobrotes asociados a los viajes de estudios en Mallorca. Estos valores muestran una tendencia de la curva de la tasa a 14 días muy desigual entre los grupos de edades y también entre algunas comunidades: Cantabria, Catalunya, Asturias y Baleares tienen una tasa entre los jóvenes que dobla la media nacional.
En concreto, Cantabria, que experimenta una disparada de su incidencia global, con 179,96 casos, registra datos especialmente elevados entre los jóvenes menores de 30 años. El grupo de 20 a 29 se ubica en los 637,576 contagios y el de 12 a 19 en los 539,09. Catalunya también vive una situación complicada entre sus jóvenes. El rango etario de 20 a 29 registra una incidencia de 404,32, mientras que el de 12 a 19 se sitúa en los 351,44. Todo ello, mientras la media de la comunidad está en los 147 casos.
Más llamativo es el caso de Baleares, precisamente la región que ha sido el origen de los brotes masivos de la última semana. Aunque su incidencia sigue siendo baja, ha experimentado un incremento importante en las últimas semanas. Hace diez días, por ejemplo, tenía una incidencia de 41 casos, por los cerca de 80 de este martes. Sin embargo, entre sus jóvenes de 12 a 19 la tasa llega a los 246, más del triple que la media de la región. En el grupo de los 20 a los 29 llega a los 176.
Es un ejemplo similar al de Asturias, que también ronda los 76 casos de media, cuando la tasa entre sus jóvenes supera los 200: 203 de los 12 a los 19 y 270 en los de 20 a 29.
Andalucía también mantiene tasas altas entre sus jóvenes, si bien es cierto que es la región que muestra peores datos desde hace varias semanas. Con una incidencia media de 163, sube a 346,30 entre los jóvenes de 20 a 29 y a 286,76 entre los de 12 a 19.
Los grupos más vacunados tienen incidencias por debajo de los 50 casos
La contracara la exhiben los grupos etarios más vacunados. Ningún grupo por encima de los 60 años supera los 50 casos de incidencia a nivel nacional. Sólo en algunas comunidades, como Andalucía, Catalunya, Canarias o Cantabria, la tasa en el grupo de los de 60 a 69 rebasa esa barrera. Mientras tanto, un 44,8% de ese grupo tiene la pauta completa y casi el 100% de los mayores de 70 años está completamente vacunado, es decir, tiene dos dosis de Pfizer, Moderna o AstraZeneca o bien una de Janssen.
El grupo de 50 a 59 años tiene ahora mismo una incidencia nacional que apenas supera los 50 casos (51,88). Este grupo es el que tiene un ritmo de vacunación más rápido, con un 87,3% con la primera dosis de vacuna y un 71,7% completamente inmunizado. De este modo, se puede ver cómo desde que se alcanzan altas cotas de vacunación la curva de este grupo empieza a caer con fuerza.
La evolución de la vacunación y su efecto en la incidencia ha provocado de este modo que, por primera vez, los casos de los jóvenes y adolescentes suponen casi la mitad de todos los que se detectan. En concreto, un 47%.
Otro dato que alumbra la división por grupos de edad y comunidades es la mayor dispersión de la incidencia entre comunidades a medida que baja la edad de la población.
Así, la disparidad entre las regiones entre las regiones en los mayores de 80, por ejemplo, oscila de los 10 casos por cada 100.000 habitantes de Murcia hasta los 38 de Cantabria. Sin embargo, entre los jóvenes de 20 a 29 la diferencia va de los 83 de Castilla-La Mancha hasta los 637,56 de Cantabria.
La vacunación también afecta a las hospitalizaciones
España es uno de los países europeos que más rápido ha vacunado a sus más mayores. Desde hace más de un mes, todos los mayores de 80 años están completamente inmunizados y así como casi todos los del siguiente grupo etario. Se trata del grupo más susceptible de sufrir cuadros graves por la enfermedad, y por tanto, de ingresar en el hospital.
La curva de hospitalizaciones muestra por tanto la efectividad de esta vacunación por edades, de más mayores a más jóvenes, con una bajada sustancia a partir de finales de abril e inicios de mayo. Como las hospitalizaciones no son tan frecuentes en los grupos más jóvenes, se ve como las curvas convergen a estas alturas en datos muy bajos.
No obstante, hay que tener en cuenta que los datos de hospitalizaciones vienen con un doble retraso. Por un lado, las comunidades tardan en actualizar sus valores y, por otro, el efecto de un brote de contagios siempre tarda unas semanas en verse reflejado en los ingresos.