El rector de la Universidad Rey Juan Carlos, Javier Ramos, ha reconocido que, tras la investigación realizada, “no consta el acta” de la supuesta defensa del trabajo de fin de máster de Cifuentes, pese a que “su archivo” en el servicio de posgrado es obligatorio“. Ramos ha añadido en una comparecencia sin preguntas de periodistas que ”no se puede confirmar que la defensa de dicho trabajo haya tenido lugar“ y que ”tampoco ha sido remitida la memoria“ del mismo, ha dicho en la comparecencia para dar explicaciones sobre las irregularidades del caso después de haber elevado el caso a la Fiscalía al apreciar ”informaciones que pueden ser constitutivas de delito“. Esta misma mañana ha interpuesto la denuncia.
Por otro lado, ha desmentido las declaraciones del responsable de los estudios, Enrique Álvarez Conde, que le ha acusado de obligarle a “reconstruir” un acta que avalase la versión de la presidenta madrileña, como informó El Confidencial: “Es rotundamente falso que se haya pretendido interferir, modificar o manipular alguna de las actuaciones del proceso”.
“Entiendo que el profesor Álvarez Conde intente defenderse, pero comprenderán que revisaré las declaraciones y me reservo el derecho a iniciar las acciones judiciales oportunas”, ha afirmado. Según había relatado Enrique Álvarez horas antes en una entrevista en Onda Cero, Javier Ramos habría dado la orden de reconstruir el acta. Luego ha rectificado y ha hablado de “elaboración de un documento para el propio rector”–que habría llevado a cabo una de sus “discípulas”, la secretaria del tribunal que no existió, Cecilia Rosado.
El rector confirma a López de los Mozos
El rector ha confirmado también en su comparecencia las palabras de la docente Alicia López de los Mozos, que destruyó ayer la coartada de Cifuentes ante la inspección de la Universidad Rey Juan Carlos.
Tras la declaración de la docente en la comisión de investigación, ha explicado el rector, “la jefa de inspección de servicios me comunicó la apreciación de indicios de posible delito de falsedad en documento público” y ha confirmado que la doctora “afirmó no haber formado parte ni presidir ningún tribunal que examinase el TFM” y “no reconocer el contenido del acta; tercero, no reconocer la firma que aparece en dicha acta”. Tras ello, la URJC decidió elevar el caso a la Fiscalía, que ya está investigando.
El máximo responsable del rectorado ha asegurado que el día en el que eldiario.es desveló este caso intentó recabar toda la información. Para ello se reunió con Amalia Calonge, la funcionaria que modificó las notas de Cifuentes, y los docentes de las asignaturas afectadas. “Ambos me dejaron constancia escrita de que había superado las asignaturas y habían pedido el cambio”. Esos escritos forman ya parte de la denuncia a la Fiscalía.
El rector, sin embargo, ha dejado en evidencia que mintió en su primera comparencia. Entonces dijo que había hablado “personalmente” con las tres miembros del tribunal. Este viernes ha cambiado la versión: habló solo con la secretaria del presunto tribunal del máster, Cecilia Rosado, que es quien le confirmó que “la defensa tuvo lugar” tras supuestamente haber hablado con las otras dos docentes.
Con esa información recolectada compareció a las 13.30 horas ante los medios de comunicación para avalar a la presidenta madrileña acompañado del director del instituto de Derecho Público, Álvarez Conde, y el profesor Pablo Chico.
Esa misma tarde, ha asegurado, comenzó a dudar de la información que le facilitaron desde este departamento. “A las 17.29 se recibió por parte de Álvarez Conde la versión escaneada del acta del trabajo de fin de máster. Debido a las inconsistencias detectadas, a las 17.55 de ese mismo día ordené a la jefa de inspección de servicios de la Universidad, Pilar Trinidad, la apertura de un procedimiento de información reservada para aclarar lo sucedido”.
Fue ahí cuando la URJC decidió iniciar la comisión de investigación al haber detectado “diversas informaciones sobre presuntos errores o irregularidades en la calificación de asignaturas en el Máster Universitario en Derecho Público del Estado Autonómico”, afirmó el centro en un comunicado.
Las dudas sobre el máster de Cifuentes empezaron por el cambio de dos “no presentado” (entre ellos el trabajo) que hizo una funcionaria en 2014 con un procedimiento absolutamente irregular. La presidenta dijo en un primer momento a eldiario.es, a través de una portavoz, que efectivamente no se había presentado, pero cuando la información salió publicada, al día siguiente, afirmó que había sido un error administrativo y que lo había aprobado todo en 2012, en línea con el documento del acta que ahora se ha conocido que también fue falsificado.