Prueban con éxito en animales una vacuna contra un virus asociado a varios cánceres y a la esclerosis múltiple
Una vacuna experimental contra el virus de Epstein-Barr ha inducido respuestas inmunitarias en animales de gran tamaño y desencadenado la producción de anticuerpos que protegen de la infección, según un nuevo estudio elaborado investigadores de la farmacéutica Sanofi y publicado este miércoles en la revista Science Translational Medicine.
El diseño del fármaco sugiere que podría resolver la falta total de vacunas para las infecciones por el virus de Epstein-Barr y podría ayudar a prevenir trastornos asociados que van desde el cáncer a la esclerosis múltiple.
El virus de Epstein-Barr infecta a más del 95% de los adultos de todo el mundo y puede provocar una gran cantidad de trastornos y complicaciones de salud. Además de ser la principal causa de la mononucleosis, el virus está asociado a cánceres como el linfoma y el cáncer gástrico y provoca más de 200.000 casos de cáncer al año en todo el mundo.
Asimismo, investigaciones recientes también han relacionado el virus de Epstein-Barr con la esclerosis múltiple, un trastorno progresivo del sistema nervioso que no tiene cura. A pesar de esta amplia repercusión en la salud pública, aún no existe una vacuna que pueda prevenir las infecciones por el virus de Epstein-Barr, y una vacuna viable podría salvar muchas vidas.
Nanopartículas autoensambladas
Ahora, el equipo de investigadores presenta la vacuna experimental que contiene nanopartículas autoensambladas. Tras construir la vacuna, los investigadores la administraron a ratones, hurones y primates no humanos. El fármaco indujo anticuerpos neutralizantes en los animales, y los anticuerpos aislados impidieron que el virus de Epstein-Barr entrara en las células B y en las células epiteliales.
Además, las transferencias de anticuerpos de los ratones vacunados suprimieron los niveles virales en los ratones expuestos al virus, y ninguno de los roedores desarrolló linfomas ligados al virus.
“En conjunto, estos datos sugieren que la vacuna [...] es una candidata eficiente y escalable que probablemente limite la presencia del virus en sangre después de la infección por Epstein-Barr, reduciendo así la mononucleosis infecciosa y posiblemente los cánceres asociados al virus”. señalan desde el equipo en una nota de prensa.
1