El presidente de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), Roberto Fernández, ha pedido hoy “prudencia” ante las informaciones que apuntan a un posible plagio en la tesis doctoral del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
“Hay que ser extraordinariamente prudente en este tema porque una tesis está dirigida por un director o una directora, está leída por un tribunal compuesto por profesionales del ramo (...) aparte de que siempre tiene sus dificultades demostrarlo, también estamos afectando al honor de personas que han participado”, ha sostenido el responsable de la CRUE en una entrevista en Antena 3.
Fernández ha defendido que como presidente de la CRUE “no puede pronunciarse sobre una cosa que es enormemente compleja desde el punto de vista científico y desde el punto de vista legal, que es la existencia o no del plagio en una tesis doctoral”.
Sobre el Instituto de Derecho Público, que dirigía Álvarez Conde, centro de la URJC en el que la expresidenta de la Comunidad de Madrid Cristina Cifuentes obtuvo su máster, Fernández ha asegurado que los rectores están “preocupados por velar por el honor” y por “el cumplimiento de la ley”.
Ha asegurado que la Universidad “nunca se negará” a que se aumenten los controles, aunque ya “hay una enorme cantidad” y “prueba de ello” es que no haya ningún rector ni decano ni gerente procesado.
“Que entre 200.000 trabajadores nos encontremos que en una universidad, y sólo en caso de un instituto que ya está disuelto, haya habido presuntas irregularidades graves creo que el sentido común dicta que la universidad española en su conjunto es absolutamente honorable, que tiene unos controles muy rigurosos y que funciona”, ha zanjado.
Asimismo, ha asegurado sobre la Universidad Rey Juan Carlos que “sus títulos no están afectados” y ha pedido “a la opinión pública” que distinga este “caso particular”. Destaca que el rector de la URJC “está haciendo todo lo posible por ver si hay más casos y si los encuentra los denunciará”.
El presidente de los rectores ha querido mandar un mensaje tranquilizador asegurando que, al margen de los escándalos, “tenemos el mejor sistema universitario de toda a historia de España”.