Uno de los inmigrantes internados en la futura cárcel de Archidona (Málaga), un hombre de 36 años y nacionalidad argelina, se ha suicidado hoy en la celda que ocupaba, han informado a Efe fuentes policiales.
Estas fuentes han explicado que el hombre ha sido encontrado ahorcado en la celda con una sábana por los funcionarios encargados de su custodia.
La Policía ha informado en un comunicado de que, pese a las prácticas de reanimación de los agentes, que además dieron aviso a los servicios sanitarios, nada se ha podido hacer por su vida.
El interno llegó a la futura cárcel de Archidona, habilitada provisionalmente como centro de internamiento de extranjeros (CIE), después de que un juzgado de Lorca (Murcia) dictara un auto el pasado 20 de noviembre en el que autorizaba su internamiento hasta el próximo 18 de enero.
La Policía Nacional ha abierto una investigación para esclarecer la muerte del interno y está a la espera de los resultados forenses.
La asociación Málaga Acoge tiene previsto solicitar a la Fiscalía que se inicie una investigación para que “se depuren responsabilidades” sobre la muerte del interno y se paralicen las devoluciones de internos, porque “son posibles testigos de lo que ha podido ocurrir”, ha dicho a Efe su presidenta, la abogada Arantxa Triguero.
El internamiento de los inmigrantes llegados a la Península el pasado noviembre en el centro penitenciario de Archidona es “un despropósito desde el principio”, tanto por el lugar elegido como por la existencia de menores y los problemas que han sufrido los solicitantes de asilo, ha subrayado.
“Nos quieren vender que está muy bien y es un horror”, ha insistido Triguero, quien ha añadido que en la futura cárcel de Archidona “se están reproduciendo” situaciones del CIE de Capuchinos, en Málaga capital, que fue cerrado en 2012.
Por su parte, uno de los portavoces de la Plataforma ciudadana contra el CIE de Archidona, Daniel Machuca, ha manifestado a Efe que desde el interior del centro les habían alertado ayer de que la situación estaba “tensa”, pero les ha “sorprendido” la noticia del suicidio.
La cárcel de Archidona fue habilitada como CIE a raíz de la oleada de inmigrantes argelinos que llegó a las costas murcianas a finales de noviembre.
Más de quinientas de esas personas fueron internadas en la cárcel, cuyo funcionamiento como centro penitenciario está previsto que comience a finales de enero, e Interior comenzó desde ese momento los procedimientos de expulsión.
Los inmigrantes han protagonizado varias protestas desde entonces por las malas condiciones del centro, al tiempo que el Defensor del Pueblo detectó “numerosas carencias” en la cárcel y puso en duda su idoneidad para ser utilizada como centro de internamiento de extranjeros.