La Universidad Centroeuropea (CEU) de Budapest, fundada por el magnate estadounidense George Soros, ha llegado a un principio de acuerdo para cumplir una de las condiciones de funcionamiento impuesta por una ley que amenazaba su permanencia en el país.
La CEU anunció de que ha firmado un memorando de entendimiento con el Bard College de Nueva York para poder desarrollar en este centro actividades educativas.
De esa forma, la CEU se adaptaría a la ley aprobada el pasado 4 abril, que exige que los institutos académicos financiados desde el extranjero tengan una sede y programas de estudio en el país de origen, Estados Unidos en este caso.
“Esperamos que este memorando de entendimiento, que no descarta futuros acuerdos con otras instituciones ubicadas en Nueva York, ayude a facilitar la base para una rápida conclusión de este asunto”, explica el centro en un comunicado en su página web.
La universidad indicó que espera ahora que el Gobierno y el Parlamento húngaro den su visto bueno a este acuerdo “para permitir a la CEU que continúe funcionando en Budapest” algo que, asegura, ha sido siempre su objetivo.
Este centro es el único que no cumplía los requisitos previstos en la nueva norma, por lo que desde el principio se le ha conocido como la “lex CEU”, al entender que estaba diseñada para afectar a esta universidad.
La ley, aprobada por el Parlamento el 4 de abril, daba medio año para que la institución cumpliera sus los requisitos, un plazo que se cumple hoy.
El Gobierno húngaro y el Estado de Nueva York han estado negociando posibles salidas a este asunto.
La Unión Europea ha criticado esta ley y la Comisión Europea abrió incluso un proceso de infracción contra Hungría.
Soros, de origen húngaro, ha sido elevado a la categoría de enemigo público número uno por el Gobierno populista húngaro, que ha lanzando varias campañas contra él, acusándole de tener un plan para inundar Europa de refugiados.