La web de letras de canciones Genius ha acusado a Google de haberle estado robando las letras de las canciones que alberga en su web desde el 2016. Lo saben porque los ingenieros de la compañía colocaron durante años apóstrofos rectos y rizados (“,”) en las letras, formando un patrón en código morse que da como resultado la frase red handed, que en castellano vendría a significar algo así como in fraganti. Genius apunta a la One Box de Google, esa cajita que aparece en los resultados de búsqueda con la letra completa cuando el usuario introduce una frase de la canción.
La compañía fue fundada en el 2009 por tres amigos amantes del hiphop y ni siquiera se llamaba como ahora. Le pusieron Rap Genius en lo que fue una declaración de intenciones de todo lo que iba a ser la web, con cientos de letras de canciones de las estrellas del momento con una pequeña leyenda al lado de cada verso que explicaba el significado. Dos años después del debut llegó a tener más de un millón de visitantes al mes, y hoy ya cuentan con más de 25 millones de letras de canciones de todos los estilos.
Genius comenzó a preocuparse por Google en el año 2016. Antes de eso, el gran buscador había contactado con la empresa preguntándoles si podían coger las letras de las canciones y volcarlas en una API, cosa a la que Genius se negó. Al poco tiempo comenzó el mal rollo, cuando la web de Brooklyn (Nueva York) pidió a Google por carta que dejaran de copiar sus letras. Como la multinacional no respondió, los ingenieros de Genius se pusieron a pensar en cómo pillarles, hasta que el ratón se ha comido el queso. Y no lo ha hecho una, sino cientos de veces.
La culpa siempre es de las terceras partes
The Wall Street Journal ha recibido de Genius más de 100 letras de canciones en las que aparece el código morse, dando validez al relato de la empresa neoyorkina. Google dijo este martes que ellos no tienen nada que ver y que habrá sido una de las muchas subcontratas que trabajan para ellos, echando la culpa a las famosas terceras partes que siempre aparecen en los términos de privacidad de toda app que se precie.
En declaraciones a Wired, la multinacional asegura que no utilizan ningún robot ni ninguna técnica de scrapping para sacar las letras, pero uno de sus proveedores, la canadiense LyricFind, ya ha entonado el mea culpa por el error. Consideran que el artículo del WSJ tiene “inexactitudes” a la vez que reconocen que una vez que Genius se quejó a Google de que dejasen de copiar sus letras, estos pararon. Sin embargo, dicen que existe la posibilidad “de que nuestro equipo, sin saberlo, haya obtenido letras de Genius de otra ubicación”.
Hasta aquí todo bien. Pero ocurre que el día después de la publicación del artículo del WSJ, Genius se dio cuenta que en la One Box de Google ya no aparecían los apóstrofos, lo que deja abierta la teoría de quién los eliminó: si la multinacional temiendo ser pillada o LyricFind en un esfuerzo de honestidad. “Ahora que el tema es público, aparentemente están eliminando las pruebas de su comportamiento sin abordar el problema subyacente. Google sigue mostrando letras copiadas de Genius”, explica Ben Gross, director de Estrategia de Genius, a Wired.
Quién roba a un ladrón...
El refranero español dice que “Quien roba a un ladrón tiene 100 años de perdón”, pero la cuestión aquí es quién robó a quién. Genius no posee derechos sobre las letras de las canciones, ya que pertenecen en última instancia a los creadores. Google tampoco, ni Bing (el buscador de Microsoft) ni Amazon Music, otros dos lugares en los que Genius ha descubierto que están usando sus letras.
Quizá a Genius se le olvide que allá por 2014 entabló una cruzada contra los editores de la industria musical cuando estos le reclamaron tener una licencia para publicar las letras. Hasta entonces venía haciéndolo sin darle una sola regalía a los autores, así que técnicamente les estaban robando. Pero ya han pasado cinco años en los que Genius ha aprendido a jugar al juego: “Garantizamos que los compositores ganen dinero cuando Genius gana dinero”, dice uno de sus portavoces.
Al ser una web fundada a partir de crowdfunding, la comunidad de Genius es bastante grande. Normalmente son sus usuarios los que suben las letras, que la empresa publica porque cuenta con la licencia para hacerlo, exactamente igual que Google. Es discutible si la multinacional está entrando en un negocio que no es el suyo, las transcripciones de canciones, pero desde un punto de vista legal no han cometido ningún delito.
Han sido varias las compañías que han demandado a Google en el pasado por mostrar resultados de billetes de avión o de hoteles directamente en los resultados de búsqueda. Es lo mismo por lo que la Unión Europea les multó en marzo: prácticas anticompetitivas, aprovecharse de su posición dominante en el mercado para influir sobre otros. Aunque Genius dice que la One Box les quita tráfico y que los usuarios ya no van a su web a consultar letras de canciones, esta vez Google se salva por los pelos.