- La Guardia Civil ha alertado de los riesgos de poner en peligro la privacidad a través de este tipo de acciones. Sin embargo, el juego ha sido tendencia viral durante varios días, ¿cuáles son las razones de que haya triunfado?
Las redes sociales se parecen mucho a los parques infantiles: un espacio de socialización un tanto descontrolado donde se suceden de forma desordenada, caótica y descentralizada los juegos que marcan tendencia. Entre juegos, hay quienes se pelean o quienes se abrazan, hay quienes se despiden y hay quienes se reencuentran. ¿Por qué de repente un juego capta la atención y se convierte en el tema del día? ¿Durante cuántos días una distracción es capaz de capturar la atención de una masa crítica suficiente como para que primero la sostenga y luego la viralice? Esto es, a grandes rasgos, lo que ha pasado con (el denominado por los medios constantemente último reto viral) 'Tu vecino de número'.
Las reglas de juego han sido sencillas:
- Partir de nuestro propio número de teléfono.
- Crear un contacto en la agenda cuyo teléfono sea igual al número propio salvo el último número, que debe ser uno superior o inferior.
- Escribirle a esa persona por Whatsapp.
- Documentarlo.
- Publicarlo en redes sociales.
La web que documenta memes y virales Knowyourmeme data su origen en 2008 y lo llama “Text Door Neighbor”. El escritor Antonio Agredano recordaba que hace años existió una campaña de Amena que ofertaba a amigos, parejas o familiares adherirse a una oferta que permitía tener dos números de teléfono consecutivos y añadía en broma que “con menos ha hecho pelis Dani Rovira”. De hecho, como sucede con todo fenómeno que se viraliza, el juego ha dado pie a todo tipo de bromas.
Si tratamos de obviar que esto es una distracción de verano disponible solo para quienes tienen la suerte de contar con algo de tiempo libre para ello y nos centramos en intentar entender qué elementos constituyen al ‘último reto viral’, podemos mencionar los siguientes:
1. Aquí hemos venido a jugar
1. Aquí hemos venido a jugarComo pasó con Sco Pa tu Manaa y como sucede con muchos memes y virales: nos gusta jugar. No hace falta invitación para participar en una fiesta que está sucediendo en una red social. El único requisito es querer jugar y fijarse cuáles son las reglas del juego para seguirlas o subvertirlas. Las redes sociales siempre han conseguido esto mismo: multiplican la capacidad de agregación. A veces es a un juego sin importancia, otras veces es a revoluciones sociales...
2. Nos gusta el azar
2. Nos gusta el azarNos gusta lo aleatorio, nos gusta experimentar y sobre todo probar a que suceda que se salga de la norma. “Mi vecino de número” tiene un componente de azar que, sumado a la lógica del juego, seduce a quién está dispuesto a participar de algo que se salga de su rutina habitual. A diferencia de la lotería o de las más que cuestionables casas de apuestas que ahora proliferan por nuestras ciudades, en este juego de azar no hay dinero involucrado: tan solo se trata de una cuestión de carácter social: ¿a quién me encontraré? ¿cómo será? ¿sabrá de qué va el juego o me mandará al carajo?
3. Todo por las risas
3. Todo por las risasDoing something for the LOLs significa hacer algo por las risas (LOL es la abreviatura de Laughing Out Loud, que a su vez significa Reírse Muy Fuerte). Forma parte de la cultura básica de Internet: en busca del humor y de reírse con otras personas. Obviamente hay ocasiones en que es un arma de doble filo: allá donde hay una risa podría puede haber inclusión, pero también exclusión. En este caso “Mi vecino de número” suele toparse con un límite claro: aquellas personas que no están alfabetizadas digitalmente o que aún estándolo no le ven la gracia a este tipo de juegos. Afortunadamente hay ocasiones donde parece que las risas fluyen a ambos lados como en este intercambio que presuntamente sucedió en Argentina.
4. ¿Qué importa si son inventados?
4. ¿Qué importa si son inventados?Ya lo dijo Pablo Cantó en su crónica del viral hace unos días: los mejores “Los mejores vecinos de número son los inventados”. En la misma era en la que surgen como setas los mecanismos para detectar los bulos, luchar contra la desinformación y evitar las noticias falsas, estamos viviendo la época dorada de la creatividad para generar memes, virales y dispositivos humorísticos que se producen y consumen a la velocidad de la luz. Es lo que Manuel Bartual llamara la posficción: el sueño húmedo de todo amante del falso documental, solo que sucede de forma colectiva y completamente descentralizada. Total, todos entrando a la Casa de Inventadellas.
5. Queremos formar parte de algo
5. Queremos formar parte de algoEl deseo de pertenencia se manifiesta a veces de formas extrañas. Donde muchos ven un juego estúpido y superficial, en el fondo lo que hay es un montón de gente tejiendo un sentimiento de pertenencia. Obviamente un juego viral que a la semana ya habrá sido sustituido por otro no va a ser constitutivo de un cambio social. Pero no hay que desdeñar que en el fondo son ensayos donde parte de la ciudadanía declara indirectamente: quiero jugar, no quiero estar a solas, quiero formar parte de algo.