Julia Reda (eurodiputada): “La nueva ley de la UE sobre copyright no debe permitir tarifas como la de Google News”
- La eurodiputada ha presentado el primer borrador con las recomendaciones para una nueva Directiva europea de protección de derechos de autor que deberá ser aprobado el 20 de mayo por el Parlamento europeo. La Comisión Europea será, después, la encargada de elaborar la reforma
Hace 14 años, la Unión Europea aprobó la directiva 2001/29/EC, llamada Infosoc, para proteger los derechos de la propiedad intelectual. Fue mucho antes de la explosión de páginas como Facebook, Twitter, YouTube o el buscador Google, un tiempo que en términos de tecnología es casi prehistórico. De ahí que en la UE ya se esté trabajando en una nueva directiva para adaptar la protección del copyright al nuevo entorno digital.
La eurodiputada alemana del Partido Pirata, Julia Reda, de 28 años y una de las parlamentarias más jóvenes, ha sido la encargada de la elaboración de las recomendaciones en un primer borrador, presentado ayer, y que durante los próximos meses será discutido dentro de la Comisión de Asuntos Jurídicos para su aprobación en el Parlamento europeo el 20 de mayo. Eso sí, después será la Comisión Europea, que es la que tiene la competencia, la encargada de elaborar la reforma de esta directiva.
Leído este primer informe hay dos líneas esenciales que son, además, una dura bofetada a la reciente Ley de Propiedad Intelectual aprobada por el Parlamento español: la libertad para enlazar contenidos sin realizar pago alguno y el establecimiento de un mercado digital común para todos los estados miembros que evite situaciones como las actuales en las que hay contenidos permitidos en algunos países –por ejemplo, los vídeos que se suben a YouTube- mientras que en otros, no. Es a su vez, un borrador mediante el cual se ponen trabas a los monopolios lucrativos.
“La nueva directiva de la UE sobre copyright no debe permitir a ningún Estado introducir tarifas como la de Google News. Yo pido que la normativa sobre derechos de propiedad intelectual de la UE apoye el derecho al enlace de los contenidos abiertos (incluidos los enlaces embebidos)”, afirma Reda a eldiario.es.
Por tanto, si llegara a aprobarse tal y como está el borrador, es posible que afecte a la LPI. Para Reda, la ley española actual va “en contra del objetivo del mercado digital único europeo”, y añade que “no se puede obligar a una empresa a pagar por contenidos que no quiere usar. Por eso, que Google haya cerrado su servicio de Google News [en España] es una consecuencia lógica”. En este sentido, en la presentación del borrador también da un toque de atención a Alemania, ya que aunque en la ley alemana el pago a Google News no es obligatorio, también es restrictiva con respecto a los enlaces.
Según ella, la UE, más que preocuparse por casos como el de Google News y resto de agregadores, lo que debería hacer es “cerrar los lugares donde estas empresas pagan sus impuestos, tal y como LuxLeaks ha demostrado, para que empresas como Google paguen realmente los impuestos que se precisan”. Al fin y al cabo, como insiste la eurodiputada alemana, “los enlaces de una página web son uno de los componentes esenciales de Internet y no se puede permitir que, mediante el copyright, sean restringidos”.
Un borrador de 25 puntos
Un borrador de 25 puntosEl borrador establece 25 puntos que se ocupan de actualizar la protección del copyright. No es tampoco una declaración de principios de barra libre, sino que desde 2001 a 2015, los derechos de autor han quedado obsoletos. A ello se suma, además, una reglamentación fragmentada –cada país ha establecido sus propias leyes– que “ponen una carga irracional para las actividades on line de todos los días”, reconoce Reda, por lo que se hace más necesario que nunca un marco legal común que evite, a su vez, la inseguridad jurídica que existe en la actualidad o, por ejemplo, la poca claridad para especificar cuando una obra ha pasado a dominio público. En definitiva, el copyright tiene que estar protegido, sí, pero acorde al nuevo universo digital, por lo que se tienen que establecer cambios en el terreno de los derechos de autor.
Entre las nuevas medidas, para la eurodiputada es muy importante que prevalezca, por ejemplo, la libertad del titular de derechos para colgar su contenido en dominio público, si así lo desea. Es decir, si alguien quiere subir su propia canción para que sea compartida, que no haya ninguna traba legal que se lo impida.
El punto 15 es uno de los que más afectaría a la ley española, puesto que en él se indica que el enlace no tiene que estar sometido a la protección del copyright. De acuerdo con la LPI podría haber interpretaciones –aunque el Gobierno, impulsor de la ley, lo haya negado- acerca de los links en Menéame, Twitter o Facebook, por ejemplo. Con este borrador, estas interpretaciones quedarían desestimadas.
El informe también recomienda mejorar la negociación sobre la posición de autores e intérpretes en relación con otros titulares de derechos y los intermediarios. Lo que propone Reda es una mayor autonomía a los creadores con respecto a sus derechos, ya que con el desarrollo tecnológico actual, “ha habido un incremento de la producción creativa, pero también ha aumentado la dependencia de los creadores con respecto a los proveedores de servicios digitales u otros intermediarios, por lo que se hace necesario desarrollar un contexto legal que mejore la posición negociadora de los autores. Para ello son básicas medidas para una mayor neutralidad en la red y el fomento de formatos abiertos con el fin de evitar monopolios”, según reza el borrador.
Sin protección para las fotos de edificios públicos
Sin protección para las fotos de edificios públicosEn relación al uso que se pueda hacer de material audiovisual y cómo ha cambiado el contexto con el desarrollo digital, la eurodiputada pone como ejemplo las fotografías de edificios o esculturas públicas. En la actualidad, cualquiera puede hacer una fotografía de la Torre Eiffel y subirla a Internet para ser compartida. Por tanto, según el informe, “la representación de edificios públicos debe estar exenta de la protección del copyright, porque no tiene ningún sentido”. En estos momentos, no todos los países tienen esta “libertad de panorama”, por lo que se hace necesaria una ley paneuropea que otorgue a los usuarios el derecho a comunicar las fotografías y demás trabajos de lugares públicos.
Otra referencia interesante del informe tiene que ver con el préstamo de libros electrónicos. Según la actual normativa, las bibliotecas sólo pueden prestar ebooks dentro de sus instalaciones, es decir, en los dispositivos que posean. Sin embargo, el préstamo de estos libros ha cambiado abrumadoramente en los últimos meses con las nuevas infraestructuras y plataformas digitales, por lo que también hay que modificar este punto de la directiva. “El préstamo de ebooks contribuye a un aumento de las ventas comerciales y de la cultura lectora”, argumenta Reda en el borrador. Asimismo, la eurodiputada entiende que todos las obras cuyos titulares sean instituciones públicas deben estar en dominio público.
La conclusión fundamental del informe alude a la necesidad de adaptar las nuevas formas de expresión cultural y su libertad, tan nombrada por los políticos europeos en los últimos días. Una mayor flexibilidad que debe ser conseguida con una normativa más abierta que permita estas nuevas excepciones y limitaciones, y que debe ser de práctica común en todos los Estados Miembros, para impedir la amalgama de leyes de propiedad intelectual que existen hoy en los diferentes estados.
Al fin y al cabo, como insiste la eurodiputada, “la directiva sobre los derechos de propiedad intelectuales de 2001 sólo armoniza los derechos de los titulares de derechos, pero no establece ningún estándar común que apoye a los usuarios”. En eso consisten los cambios introducidos. Veremos qué ocurre en mayo, qué hace la Comisión Europea y las consecuencias para la normativa española.
Foto: Mike Herbst (Flickr)