'La casa del dragón' 1x09: El “¡Dracarys!” que todos gritamos a la tele
Tras un octavo episodio cargado de emociones y escenas memorables, el noveno capítulo de La casa del dragón pisó tierra en HBO Max para volver a coger impulso. La Fortaleza Roja fue el principal lugar donde transcurrió la acción. Y es que, más que roja, la fortaleza se tiñó de gris en su interior a modo simbólico tras la muerte del rey Viserys con la que se inicia la entrega.
(Aviso: Spoilers)
Con una oscuridad densa dentro de palacio, entre sus rincones, comenzó a gestarse la traición contra Rhaenyra Targaryen para hacer rey a Aegon. Toda la maniobra comandada por Alicent y Otto Hightower reunió al consejo para tomar medidas. El levantamiento en contra de los planes usurpadores de la reina regente se saldó con la muerte de uno de los miembros a mano de Ser Criston, y la renuncia de Harrold Westerling como Lord Comandante de la Guardia Real. La idea de asesinar a la princesa Targaryen se puso sobre la mesa por parte de La Mano. No obstante, su hija renegó de la estratagema por el cariño que guarda a su difunto esposo.
El tiempo apremia, y había que llevar a cabo la coronación de Aegon lo antes posible. ¿El principal problema? La actitud de un joven que no parece tomarse con seriedad su lugar en la Corte, y que prefiere venderse a las obscenidades poco moralistas de la ciudad. Es por ello por lo que Otto ordena su búsqueda en un enfrentamiento indirecto contra su hija, que le pide a Ser Criston que lo encuentre primero antes de que lo haga su padre. Quería ser ella la que le explicase cómo tendría lugar su coronación y reinado, y no quería ver la conciencia de su hijo mancillada por los planes de su padre.
Mientras tanto, padre e hija tratan de ganarse el beneplácito de las familias allí presentes para asegurarse la coronación de Aegon como el nuevo monarca de los Siete Reinos. Sin embargo, hay un hueso duro de roer, Rhaenys, que es encerrada a manos de Alicent en una alcoba para que medite sobre su postura sobre el inminente reinado.
La coronación desleal de Aegon Targaryen
Por su lado, la reina regente se vende a Lord Larys en una escena fetichista que demuestra una relación entre el deseo sexual a cambio de poder y el tener ojos en todas partes. Lo necesario para consolidar el reinado de su hijo, quien tras ser hallado, es llevado a una inminente coronación a la que el pueblo está obligado a asistir. Todos los allí presentes clamaron en favor del nuevo monarca con vítores y aplausos. Todos menos Rhaenys, que tras intentar ser ayudada por Harrold Westerling para escapar de Desembarco del Rey vestida como una plebeya para confundirse en las calles, fue arrastrada por la multitud para asistir a la coronación de Aegon.
Esto tuvo como resultado una escena llamativa, y es que mientras el primogénito era coronado bajo la atenta mirada de un Aemond receloso, Rhaenys se escabulló hacia las profundidades del lugar en busca de algo valioso, un dragón. Fue así como, mientras el nuevo monarca elevaba la espada brillante, y el pueblo gritaba al son de sus levantamientos, un inmenso dragón rompía la superficie del sitio, matando a varios plebeyos allí presentes, y provocando la huida del resto. El polvo nubló la visión del lugar, que no dejaba distinguir al jinete del dragón.
Era Rhaenys, que subida a los lomos de Meelys fijó el objetivo en los Hightowers. Una escena que cortó la respiración a los espectadores que gritaban a favor de un “¡Dracarys!”, para acabar directamente con la familia de usurpadores. Sin embargo, no fue fuego lo que salió de la boca del dragón, sino un agudo chillido para después alzar el vuelo y escapar de Desembarco del Rey. Es así como Rhaenys toma partido, y se declara en contra del nuevo monarca y supuestamente a favor de Rhaenyra, a la que en un inicio aseguró que no reinaría, porque el pueblo, al igual que ocurrió con ella, no la aceptaría.
Vídeo: El adelanto del final de temporada
El próximo lunes la primera temporada de La casa del dragón llegará a su final. En el avance del nuevo episodio ofrecido por HBO Max veremos cómo Rhaenys vuela a Rocadragón para alertar a Rhaenyra de la traición de los Hightowers. Mientras tanto, Desembarco del Rey se blinda frente a una inminente amenaza desatada por la furia de la sangre Targaryen. Por lo que parece podremos ver una gran cantidad de dragones en el décimo episodio de la ficción que suponemos que dejará la 'Danza de Dragones' a punto de fuego para una segunda temporada.