Carlos Sobera abre 'First Dates Hotel' en Telecinco: “Cuesta mucho perder la audiencia, y cuesta recuperarla también”
Telecinco abre este martes 23 de julio las puertas de First Dates Hotel, un nuevo spin-off del dating show diario de Cuatro que Mediaset, como ocurriera con su especial de San Valentín, ha decidido llevar al prime time de su canal principal. Una apuesta que Carlos Sobera, su presentador, analiza de forma más que positiva: “La verdad es que eso significa que les gusta mucho el programa, que lo valoran y que probablemente les gustaría tenerlo en Cuatro, Telecinco y en Divinity”, comenta en palabras a verTele.
En esta nueva versión del formato, Mediaset llevará sus habituales citas a un acogedor 'hotel boutique' de la costa alicantina en el que, el principal atractivo, será ver qué ocurre con sus participantes más allá de sus ya televisadas cenas: “Aquí hay el 'antes de' y el 'después de' de cada cita, que siempre lo hemos tenido perdido”, celebra el vasco, que cree que el equipo de Warner Bros. ITVP España -productora a cargo del programa- volverá a sorprender a los espectadores con los perfiles e historia que han seleccionado.
Carlos Sobera contará con la ayuda de un nuevo staff que trae consigo un esperado regreso: el de Lidia Torrent, una de las camareras 'fundadoras' de First Dates en Cuatro y que hace dos años dejó el dating show para afrontar nuevos proyectos. “Ojalá vuelva para quedarse”, desea el presentador, que también estará acompañado de la hija de su pareja, la joven Arianna Aragón con la que ya coincidió en El Precio Justo.
El televisivo afronta así un nuevo reto profesional, eso sí, con todas las miradas -“la mía también”, reconoce- en la batalla que a partir de septiembre se desatará en el access prime time de la parrilla, con la llegada de Broncano a TVE y de Carlos Latre a Telecinco: “La tele da lo que da. Quiero decir que si la mesa es de seis y pasamos a ser ocho, pues comeremos menos todos. O uno se lo come todo y el resto pasamos hambre. Ya veremos lo que pasa”, empieza reflexionando, aunque confía en que First Dates pueda seguir erigiéndose como alternativa frente a sus rivales.
“Siempre es más fácil defenderte desde la diferencia, porque en la tele lo que tienes que conseguir es ser diferente para atrapar la atención del espectador”, sentencia Sobera, que se muestra también optimista con los cambios que se están desatando en Telecinco para intentar revertir la crisis en la que se ha visto envuelta en los últimos años: “La tele siempre tiene un funcionamiento cíclico, soy de los que piensa que cuesta mucho perder la audiencia y, por tanto, cuesta mucho recuperarla también”, apunta. “En algún momento aflorará con éxito de audiencia seguro, porque el público termina persiguiendo alegría, juventud, libertad y eso se agradece mucho”.
¿Cómo has afrontado esta nueva aventura al frente de First Dates Hotel?
Al principio con muchísima ilusión y, una vez que llegué al hotel, con placer y gozo absoluto porque es un lugar maravilloso. Es un hotel boutique fantástico, de grandes espacios, con una decoración estupenda, muy cálido, absolutamente acogedor. Y se creó allí una atmósfera enseguida y un clima estupendo. He gozado y ha sido fantástico. Luego, el equipo nuevo con el que he hecho el programa, el staff, también es maravilloso. La experiencia ha sido estupendísima e incluso se me ha hecho hasta corta.
¿Ha sido difícil trasladar la producción a ese complejo hotelero?
Sí, sí, ha sido complicadísimo. El primer día que llegué, que fue una semana después de que el equipo técnico llegara al hotel, aluciné con todo lo que habían montado. Había más de 70 cámaras robotizadas en todas las instancias del hotel, incluido el jardín, a parte de las ENGs, las cámaras independientes y autónomas que tenían para cuando se salían del hotel o cuando se iban al mar. Yo flipé. Y luego, cuando bajé a un lugar que estaba al lado del comedor, que es donde pusieron el control de realización, yo que he visto el control de realización de Supervivientes y el de Gran Hermano en directo y me parecía flipante, me quedé absolutamente ojiplático. Eran pantallas gigantescas multicámara, con las 70 cámaras dando señal en directo y con cinco o seis ayudantes de realización que estaban captando y realizando el directo. Me pareció flipante. El esfuerzo que han hecho, técnicamente hablando, ha sido extraordinario.
¿Qué ofrecerá este First Dates Hotel que no vemos en la versión diaria del programa?
Yo creo que el principal atractivo respecto al diario que todos lo conocemos, es que aquí hay el 'antes de' y el 'después de' de cada cita, que siempre lo hemos tenido perdido. En First Dates llegan al bar, se conocen, cenan y luego deciden si se gustan o no. Aquí ellos están en el hotel un día antes de que lleguen a tener la cita en el restaurante, no saben quién es cita de quién, pero sí es verdad que coinciden, se cruzan, se conocen, y pueden ver quién les resulta atractivo o quién puede ser su pareja. Se crea entonces un clima de interés.
Y luego, lo más importante, aparte de que habrá un jacuzzi y una piscina, elementos permanentes que ayudan a la cena, es que aquí conoceremos el después. En el First Dates diario eso no lo podemos ver. Si se gustan, ¿qué hacen después? ¿Dónde van? ¿Duermen o no duermen juntos? ¿Cómo les va? Al día siguiente, ¿qué ha sido de su aventura? ¿Siguen satisfechos el uno del otro y van a continuar o haber pasado una noche juntos les ha decepcionado y van a romper? Es atender a más momentos de una relación y completar de alguna momento el círculo, esa es la diferencia esencial.
Mediaset valora mucho 'First Dates' y probablemente les gustaría tenerlo en Cuatro, Telecinco y en Divinity
Por el restaurante de First Dates han pasado miles de personas con historias de lo más variopintas y diversas. ¿Veremos algo en el hotel que no hayamos visto nunca antes?
Sí, ya te adelanto que sí. Este programa se caracteriza por el hecho de que el equipo de redacción es capaz de encontrar siempre a gente distinta, gente diferente. Y cuando crees que ya se han agotado todos los recursos del programa, se encuentra un recurso nuevo. En este First Dates Hotel también han aparecido personas superatractivas, supercuriosas y que van a causar interés en el espectador. Se van a quedar pegados a la pantalla cuando les vean. Algún caso hay incluso que ha permanecido días, por no decir semanas, por no decir meses, en el hotel, porque no había forma de encontrarle pareja [Risas]. Por tanto, sorpresas en ese sentido seguro que las va a haber.
First Dates volverá a saltar a Telecinco, como ya hizo de forma excepcional en el especial de San Valentín. ¿Cómo valoras esta apuesta de Mediaset hacia el formato, llevándolo a su canal principal?
La verdad es que eso significa que les gusta mucho el programa, que lo valoran y que probablemente les gustaría tenerlo en Cuatro, Telecinco y en Divinity [Risas]. Eso está muy bien, porque es muestra de que Mediaset está satisfecho con el resultado de First Dates. Yo lo valoro extraordinariamente bien, pero también te digo que yo soy de los que piensa que en Cuatro el programa ha encontrado un nicho extraordinario y se ha hecho con un pedazo de audiencia que cuando llega la temporada de máximo consumo, allá por los meses de octubre a marzo, ya está en el 1,3 o 1,5 millones de espectadores. Eso se dice pronto, pero es superdifícil de conseguir en cualquier canal, aunque sea uno principal. Pero, bueno, está bien.
Este es un programa que se quiere que sea diferente al First Dates de Cuatro. El diario se quiere mantener en ese espíritu de Cuatro, en un lugar de encuentro mágico en el que los espectadores y el programa viven cada noche una aventura en común, y este se quiere diferenciar. Y quizá por eso también en vez de colocarlo en la parrilla a renglón seguido de un First Dates normal pues se ha colocado en Telecinco para darle una dimensión distinta. Hasta en eso me parece que es un acierto. Luego ya se verá si el resultado de audiencias es satisfactorio o no, que ya sabemos que la tele es complicada y hay que esperar, pero está bien esa diferenciación.
First Dates Hotel ha traído el regreso de Lidia Torrent. ¿Qué ha significado para ti este reencuentro?
Para mí ha sido emotivo, porque Lidia es una persona que se hace mucho de querer. Fue siempre una excelente compañera y luego con Lidia, lo mismo que con algunas otras personas que han ido desapareciendo del equipo, compartíamos la aventura, la adrenalina, la ilusión de los principios. Los principios siempre son muy importantes y ella estuvo desde el principio conmigo. Cuando se marcha y pasa tanto tiempo como ha pasado, casi dos años, al regreso a casa solo le faltó traerme una tableta de turrón para hacer el anuncio. Es muy emotivo. Es un reencuentro que nos ha dado mucha satisfacción, a los dos y a todo el equipo, porque Lidia es parte de la familia de First Dates desde el principio y ha sido muy bonito poder contar con ella.
¿Ha vuelto para quedarse, también en la versión diaria, o ha sido algo puntual?
Ojalá vuelva para quedarse. Si tenemos que hacer First Dates diario y First Dates Hotel, ojalá hagamos cuarenta programas al año y pueda estar Lidia en uno, en otro, o en los dos. Esto va a depender de ella y lógicamente de la cadena, pero el equipo de First Dates siempre está con los brazos abiertos.
También vuelves a trabajar con Arianna Aragón, con la que ya coincidiste en El Precio Justo. ¿Qué tal la has visto en este nuevo formato? ¿La ves haciendo carrera como presentadora?
Si se lo propone lo puede conseguir, porque tiene talento y tiene cualidades como la frescura, la espontaneidad e incluso una cierta dosis de inocencia que le acompaña a sus 25 años y la hace muy divertida en determinados momentos. Yo la he visto muy bien, muy humilde, con ganas de aprender. Y ha tenido la fortuna de que se ha integrado, o ha sabido integrarse, perfectamente con el equipo de dirección, de redacción y técnico, y con los compañeros de staff con los que tenía que compartir el día a día. Ha formado ahí un equipo magnífico. Cuando terminó la grabación acabó llorando de la tristeza que le dio. Así que imagina hasta qué punto se integró.
La tele es un misterio, así que toca trabajar más y mejor que nunca para seguir conservando la atención del público
La próxima temporada, todas las miradas van a estar puestas en el access prime time, con la llegada de Broncano y Latre a TVE y Telecinco. ¿Hay temor a la competencia?
La mía también, la mía también [Risas]. Yo lo vivo con tranquilidad. La tele da lo que da. Quiero decir, si la mesa es de seis y pasamos a ser ocho, pues comeremos menos todos. O uno se lo come todo y el resto pasamos hambre. Ya veremos lo que pasa. Nosotros tenemos una ventaja y es que ofrecemos un producto diferente. No somos una competencia directa, ni de El Hormiguero, ni de nuestro compañero Carlos Latre cuando llegue, ni de Broncano. Ellos hacen un producto distinto, con un contenido diferente y dirigido también a un público diferente. Nosotros somos una oferta distinta como puede ser en laSexta El Intermedio, que tiene un corte muy político. Nosotros tenemos un corte de reality, pero de reality blanco de amor. Siempre es más fácil defenderte desde la diferencia, porque en la tele lo que tienes que conseguir es ser diferente para atrapar la atención del espectador.
Nosotros tenemos un público muy fiel que nos sigue desde hace ocho años. Pero, claro, la competencia va a ser aún mayor de lo que ya era hace unos meses y es posible que se note. Hasta ahora, nosotros donde más notamos la competencia es cuando hay Supervivientes o La isla de las tentaciones y coinciden en la misma franja, porque ahí si compartimos público. Es una oferta que lógicamente nos hace más daño y se nota cuando están ambos realities, que de 22:00 a 23:00 horas, coincidiendo con el programa principal de First Dates, siempre hay un impacto. Mayor o menor, pero hay un impacto. Aquí teóricamente el impacto debería ser menor, porque es un producto distinto, pero la tele es un misterio, así que habrá que estar preparados y trabajar más y mejor que nunca para seguir conservando la atención del público.
Desde hace muchos años eres uno de los rostros fijos de Supervivientes. ¿Te ha dado pena no estar en el All Stars?
Sí, hombre no podía estar en todo porque voy a parecer al final el obispo de Roma [Risas]. Me coincidió con el First Dates Hotel y el First Dates diario, que he seguido grabando hasta principios de julio, por lo que a todo no llegaba. Pero sí que me ha dado pena, porque al 90% de los concursantes del All Stars los he conocido en vivo y en directo, ya que los he tenido en algunas de las entregas de los últimos años. Me hacía ilusión estar con ellos y compartir su aventura. No he podido estar como presentador pero lo estoy viendo como espectador.
¿Cómo lo estás viendo? ¿Quién crees que está aprovechando mejor esta segunda oportunidad?
A mí me está gustando mucho. Es verdad que algunos se me han caído demasiado pronto, pero Adara pensaba que iba a aguantar prácticamente hasta el final y me sorprendió mucho que se cayera de primeras. Además, a la pobrecita le pasó de todo... Fue terrible. En general, yo creo que todos están aprovechando la segunda oportunidad. Lo que más me ha llamado la atención de todos es que, conociendo lo que se esperaba, lejos de servirles esto para estar mejor preparados o para resistir mentalmente más, se han venido más fácilmente abajo. Es como: “Lo estoy pasando mal, pero es que sé que lo voy a pasar todavía peor” [Risas]. Han empezado a poner la venda antes que la herida. Eso me ha llamado poderosamente la atención en todos ellos. Pero me lo estoy pasando bien y me estoy divirtiendo.
Telecinco sigue apostando por ti como uno de sus rostros principales. ¿Te han tentado desde otras cadenas? ¿Te sientes valorado en Mediaset?
No me han tentado, ni creo que lo vayan a intentar tampoco. Porque yo creo que el que me vea, me tiene que ver muy feliz en Mediaset. Yo no sé si voy a durar un año, diez o cien todavía, pero yo creo que en Mediaset estoy en el lugar adecuado, con la gente adecuada, y no tengo ninguna necesidad de moverme. Tengo además ese privilegio, que le ocurre a otros muchos más compañeros en la cadena, de poder hacer varias cosas a la vez. Con lo cual, varías de registro. Eso te permite crecer, te diviertes más, no terminas nunca de fatigarte mentalmente porque estás haciendo siempre lo mismo... Estoy muy muy a gusto. En formatos como First Dates, Supervivientes, Volverte a ver... me lo paso muy bien. He estado haciendo también el Mental Masters y me ha encantado, El musical de tu vida me pareció un superformatazo... En fin, no se puede estar mejor que yo y creo que eso se me nota en la cara, con lo cual, la gente pensará: “Cómo vamos a sacar a este de ahí si está más pancho que nada...”.
¿Crees que Telecinco logrará dar con la tecla para empezar a remontar en sus audiencias?
Yo creo que lo terminarán consiguiendo. La tele siempre tiene un funcionamiento cíclico, soy de los que piensa que cuesta mucho perder la audiencia y, por tanto, cuesta mucho recuperarla también. Lo que sí que creo es que están en este momento haciendo lo adecuado, que es abrirse a todo el talento que hay en el territorio, en España, permitir que todo el mundo se acerque a Mediaset a presentar sus iniciativas, elegir y probar. Ese es el único camino para saber si las cosas pueden funcionar o no, o si damos o no con la tecla. Pero el espíritu por lo menos de Telecinco, ese espíritu de televisión fresca, de televisión espontánea, de televisión en directo y comprometida y libre, creo que ese espíritu que está ahí y se está manteniendo. En algún momento aflorará con éxito de audiencia seguro, porque el público termina persiguiendo alegría, juventud, libertad y eso se agradece mucho.