Eduardo Casanova hace “caer un mito” de 'MasterChef Celebrity': “Los jueces son de lo mejor que hay en el programa”
La 1 de TVE emite la noche de este jueves la tercera gala de MasterChef Celebrity 8, en la que Eduardo Casanova volverá a ser uno de los famosos aspirantes que más dé que hablar.
Con el director y actor, igual que con su compañero Jesulín de Ubrique, pudimos hablar aprovechando la presentación del formato en el reciente FesTVal de Vitoria. Y ante un grupo de periodistas entre los que estaba verTele, Casanova quiso romper una lanza por el jurado: “No sé si se le va a caer un mito a la gente, pero al menos conmigo y en esta edición, los jueces son de lo mejor que hay en este programa”.
Un “capote” después de que los jueces frivolizasen con el caso Rubiales durante la presentación, por lo que fueron corregidos luego por la productora, pero que no empaña el agradecimiento sincero del concursante: “A mí me han motivado y me han hecho vencer muchos miedos y muchas inseguridades”. “Hay que tener muy claro qué es MasterChef Celebrity”, zanja Eduardo Casanova en esta charla.
Si 'MasterChef' te dice 'ven', ¿lo dejas todo?
Esto no es un spoiler. Cuando entré me preguntaron si tenía miedo a separarme de mi entorno y tal, y dije... 'pero si voy a ir a dormir a mi casa'. Y verdaderamente es muy fuerte porque cuando entras a MasterChef desaparece el mundo, ¡yo me metía en la cama pensando en nabos! Y puedo asegurar que César Cadaval también se iba a la cama pensando en nabos [ríe]. Y hay una cosa más fuerte de MasterChef. Y es que además de darte cuenta al entrar de que no sabes nada de cocina, también te das cuenta de que no sabes todo sobre ti mismo. Y creo que eso es lo que hace que este programa sea un éxito.
¿Qué has descubierto de tu carácter que no conocías?
Para mí ha sido muy fuerte tener que enfrentarme a mi inseguridad. Soy un chico superinseguro, aunque a veces parezco muy seguro de mí mismo y eso no juega a mi favor. Pero enfrentarme a mi inseguridad... a mí la cocina me calmaba. Soy muy nervioso y tenía tres trucos para relajarme: leer, meditar y cocinar. Eso antes de MasterChef, porque ahora cocinar es todo lo contrario a relajarme, lo cual creo que va a dar muy buenos momentos televisivos.
Aquí no hay trampa, aquí se ve quién eres de verdad y es la prueba definitiva para conocernos
¿Qué has hecho más: reír, llorar, enfadarte...?
En MasterChef hay de todo. Sobre todo el Celebrity, que aparte de la cocina es un programa que trata sobre el ser humano. En la vida, por suerte o por desgracia, hay de todo y todo eso está en MasterChef. Por eso es un programa con una grandísima audiencia y con un espectro de público tan amplio en todos los sentidos. Lo puede ver la más moderna o la más antigua, que le va a gustar. Y a mí eso me apetecía mucho hacerlo. Y no puedo contar si me río o si me enfado porque eso sería hacer un spoiler y no hay nada peor en la vida que un spoiler.
Al programa puedes ir con la intención de quedar bien como persona. Como fan del pop, de la televisión y de los realities siempre he escuchado eso de 'hay un momento que te olvidas de las cámaras' y yo pensaba: 'a ver, llevo 20 años trabajando, no me voy a olvidar de las cámaras'. Y sí, te olvidas. Y eso de ir para quedar bien tú... aquí no hay trampa, aquí se ve quién eres de verdad y es la prueba definitiva para conocernos.
¿Te has sentido muy vulnerable?
Cuando te muestras personalmente como eres, siempre te muestras vulnerable. Incluso ahora, en la entrevista, yo me siento vulnerable. Todo momento en que uno se abre se siente vulnerable.
¿Cómo has encajado las valoraciones del jurado?
No sé si se le va a caer un mito a la gente, pero al menos conmigo y en esta edición, los jueces son de lo mejor que hay en este programa. Sólo he escuchado de ellos críticas constructivas y me he reído mucho con los tres. Atacan, pero es que saben. Voy a decir la verdad: son encantadores.
¿Tú eres duro como director?
Yo como director sé lo que quiero hacer, y eso lo que les sucede al jurado. Ellos como chefs saben lo que quieren comer y lo que están pidiendo, pero hay muchas formas de dirigir y creo que la mejor forma de hacerlo es ser constructivo, ser amable y motivar al personal. Cuando el personal está motivado trabaja mejor, y esa es la experiencia que tengo yo con los tres jueces. A mí me han motivado y me han hecho vencer muchos miedos y muchas inseguridades, tanto ellos como el programa desde dentro. Tengo que decir que funciona tan bien no sólo porque es un programa que se reinventa en cada temporada, sino porque lo compone un equipo humano que es muy consciente de la presión a la que se ven sometidos los concursantes y te cuidan mucho. Yo eso lo he sentido, me he sentido supercuidado en todo momento por todos mis compañeros tanto del equipo artístico como del equipo técnico.
Hay que tener muy claro qué es MasterChef Celebrity
¿Ha habido algún momento en el que te hayas sentido absolutamente desbordado?
Cada cinco minutos, todos los días y todo el rato.
¿Cuánto te has preparado para 'MasterChef'?
Estuve dos meses dando clases porque tenía pánico a hacer el ridículo. Di las clases con Luis Centenera, un cocinero maravilloso. Pensé que ya que iba a hacer el ridículo como persona, mejor no hacerlo también como intento de cocinero.
¿Hablaste con algún exconcursante antes de entrar?
Hablé con Carmina [Barrios], que es mi tía. Y me dijo lo mismo que a Los Morancos sobre los jueces: 'a ellos lo que les gusta es que esté muy salado, con mucha pimienta y pon poquito en el plato. Con eso ya ganas'. Sólo quiero decir una cosa para acabar: hay que tener muy claro qué es MasterChef Celebrity. Es un talent show de cocina donde vamos a intentar cocinar pero sobre todo, a intentar hacer reír, a entretener y a generar show, que es de lo que se trata la televisión. Eso, aparte de cocinar, es en lo que nos hemos esmerado todos. Ese es el objetivo y el deseo: que la gente se mee de la risa. Y me atrevería a decir que lo hemos conseguido.
