Fue la expulsada de Gran Hermano con mayor porcentaje de la historia (un 95%) en 2009, años después triunfó en Acorralados, se ganó un puesto fijo como la colaboradora más ácida de los realities de Mediaset y ahora, tras debutar como presentadora en Mujeres y Hombres y Viceversa, conduce el 'after show' más gamberro de Supervivientes en Mitele Plus. Se puede decir que lo de Nagore Robles (Basauri, 1983) es pura evolución y que no tardaremos en verla con un formato propio en Telecinco, pero ella va paso a paso.
En una charla con verTele con motivo de la emisión de Sobreviviré todos los martes y miércoles a las 2:00 AM en la plataforma de pago, la televisiva agradece la confianza que desde la cadena han depositado en ella y celebra un cambio de faceta que pedía a gritos: “Estaba aburrida de mí misma, de estar siempre en el mismo papel de ácida, de puñetera. Hay veces que te cansas un poco de hacer siempre lo mismo, así que estoy muy contenta de esta nueva faceta y de esta oportunidad nueva”.
Preguntada por si se siente preparada para dar el salto a la cadena principal con un programa suyo, asegura que “preparada para algo así nunca se está” y que su objetivo es seguir aprendiendo cada día: “Evidentemente, si me dieran una oportunidad así, ¡ni me lo pienso! (...) Me siento muy orgullosa de cualquier oportunidad que me dé la cadena y la voy a aprovechar al máximo”.
Además, también hablamos de Supervivientes, del papel de Rocío Flores como colaboradora y del regreso a Telecinco de Gran Hermano, el formato que le abrió las puertas de la televisión y “el buque insignia de la cadena”: “Estoy segura de que volverá más fuerte y mejor que nunca”.
Tras años siendo colaboradora en las galas, has estrenado ahora Sobreviviré, el after show de Supervivientes en Mitele Plus. De primeras fue un proyecto que sorprendió tanto por su horario como por su ventana de emisión. ¿Cómo recibiste esta propuesta? ¿Y cómo la valoras ahora que llevas ya unas cuantas emisiones?
Cuando una persona del equipo de Mitele Plus me propuso crear algo, yo le puse mis ideas sobre la mesa, ella también, fusionamos nuestra locura y se lo trasladó a la cadena. Cuando me llamó un mes después y me dijo que había luz verde, grité, salté y me puse como loca de contenta. No me lo podía creer. No pensaba que un proyecto tan atrevido y tan loco pudiera tener cabida en una plataforma, pero me pareció una apuesta maravillosa. Y que confiaran en mí para algo así me puso muy feliz. Me sentí muy querida, muy valorada y súper orgullosa.
Al emitirse en una plataforma de pago, no está abierto a toda la audiencia potencial de Supervivientes. ¿Qué tipo de feedback recibes del público?
La gente lo ha entendido perfectamente a la primera, porque una cosa es lo que quieras ofrecer y otra cosa es como lo reciban en casa. Las primeras críticas en Twitter hablaban de diversión, de frescura, de cuánta falta hacía algo así. Es todo gente nueva y es un programa muy entretenido, muy gamberro, con mucho cachondeo, muchísimo humor, ganas de pasarlo bien, de entretener y de dar algo diferente a lo que ya hemos hecho. Es una apuesta súper atrevida y muy distinta.
Entre esas caras nuevas, contáis con colaboradores muy ligados al mundo de las redes. ¿Les ves preparados para dar el salto a la TV en abierto? ¿Quién crees que tiene más potencial en el medio?
Son súper rápidos, a veces alucino porque además no tienen ningún prejuicio. Hay muchos de ellos que no conocen a los famosos, de hecho el otro día Marina Yers me preguntaba quién es Rocío Flores, si cantaba, y a mí me gusta muchísimo esa inocencia. Son personas súper ácidas y como no están viciados en la televisión, opinan desde un lado tan libre que te atrae, te quedas ahí pegado.
Iban García es un chico que va haciendo sus reportajes y creo que tiene un talento tremendo para hacer lo que quiera, para comunicar y para divertir. También tenemos a Alexia Rivas, que ha sido compañera de la cadena, y a Marina Yers, que la veo totalmente en un reality. No me gustaría que se fueran al otro lado del plató [ríe], pero todos son súper válidos para hacer cualquier otra cosa en televisión.
A quien ve con potencial la audiencia es a ti, e incluso se ha pedido el salto del programa al late night de Telecinco. ¿Cómo valoras este tipo de elogios? ¿Te ves preparada para presentar un gran formato en la cadena principal?
Preparada para algo así yo creo que nunca se está. Al final tienes que aprender de tus errores, de los del equipo e ir haciendo caso al público. Nadie nace sabiendo. Tenemos a Jorge Javier Vázquez que es un crack ahora mismo en la cadena, presenta prácticamente el 80% de la parrilla, y mira cómo empezó: era colaborador de Ana Rosa y ahora se come las pantallas y controla absolutamente todo.
Se trata de ir aprendiendo y desde la humildad se pueden aprender muchas cosas. Evidentemente, si me dieran una oportunidad así, ¡ni me lo pienso! Como dice mi padre estoy ahí desde las 8 de la mañana metiendo horas para aprender todo. Me encantaría, pero me siento muy orgullosa de cualquier oportunidad que me dé la cadena y la voy a aprovechar al máximo. Soy una tía muy currante, me gusta aprender y soy una esponja. Yo no he estudiado y me voy haciendo cada día a ello aprendiendo de todos los profesionales que me rodean, desde mi trabajo hasta mi casa.
En una entrevista reciente en el podcast Estirando el chicle comentaste que estás un poco cansada de llevar diez años haciendo el mismo papel en la tele. ¿Con este formato rubricas ese cambio que necesitabas?
Para mí sí. Lo que yo hago es entretener, hacer show y en un programa tan divertido como Sobreviviré lo que saco es mi parte más divertida, más gamberra, más cachonda y más libre, pero no solo soy eso. Al final es una careta que te pones, un traje, pero tengo otras más. Creo que las oportunidades hay que aprovecharlas, hay que ofrecer lo que la gente quiere en cada momento y allá donde fueres haz lo que vieres. Si es un programa de entretenimiento lo que hago es entretener, si es de opinión opino, pero soy mucho más de lo que ofrezco.
Es verdad que estaba aburrida de mí misma, de estar siempre en el mismo papel de ácida, de puñetera, de generar debate y de calentar el plató y la opinión pública. Hay veces que te cansas un poco de hacer siempre lo mismo, pero más de ti de hacer el mismo papel. Así que sí, estoy muy contenta de esta nueva faceta y de esta oportunidad nueva que me han dado.
¿Qué tipo de proyecto pedirías para reinventarte en TV, que te permitiera mostrar esas otras facetas?
Aparento ser una tía muy terca y muy bruta, que lo soy como buena vasca, pero luego tengo otra parte muy sensible, muy emocional. Me gusta mucho hablar de sentimientos. No sé. Con cualquier oportunidad que me dé la cadena voy a estar encantada. Y como son tan creativos, siempre están dando una vuelta de tuerca y hay productoras con un talento de la pera, al final van a crear contenidos fabulosos.
Cualquier espacio que me den va a ser fantástico. Date cuenta que no he hecho nada como presentadora aparte de esa baja que cubrí por la maternidad de Toñi Moreno en Mujeres y Hombres y Viceversa, que no lo olvidaré jamás porque es mi programa predilecto.
En Supervivientes 2021, una trama que está está teniendo mucho peso es la de Olga Moreno tanto por lo que sucede en la isla como por lo que ocurre en el plató con la figura de Rocío Flores. ¿Cómo estás viendo la edición en general, y la participación de ambas en particular?
Creo que Supervivientes es una maravilla de reality, como lleva demostrando muchísimos años. Ha llevado a personajes muy fuertes y con mucho peso a nivel nacional e internacional. Además hacen pruebas con una exigencia tremenda, y es maravilloso porque la gente desde casa ve cómo sufren estos personajes. Evidentemente se crean unas tramas fuera que desde dentro no se es consciente. Es como un reality aparte.
Rocío Flores es una mujer con mucho talante, muy sensible, que se lo toma todo desde una perspectiva personal y no le puedes pedir que sea objetiva en todo esto. Se siente atacada y con su carácter responde a veces estupendamente y otras equivocada, como todos. Yo no sé si ha sido un acierto que ella esté defendiendo a Olga. Muchas veces se justifica diciendo que es colaboradora, pero no lo es porque es familiar de una concursante. Y desde esa postura, defender es mucho más complicado. Un colaborador no tiene familia ahí dentro y las opiniones son mucho más libres. No sé si ha hecho lo mejor. Evidentemente lo habrá hecho para ella porque para eso lo ha decidido, pero entonces tendrá que asumir todo tipo opiniones.
Ya se ha anunciado el regreso a lo grande de Gran Hermano con una nueva edición VIP. Después de estar fuera de la parrilla durante un año, en el que caso Carlota ha vuelto a salir a la conversación, ¿crees que esta edición es un 'todo o nada' para Telecinco a la hora de recuperar la marca GH?
Mezclas tantos temas, que la verdad... del caso de Carlota prefiero no hablar. Y no porque no me moje, porque yo me mojo en todo, sino porque hay muchísimas cosas que se desconocen y evidentemente hablar sobre algo que no sabes creo que es un poco atrevido y poco profesional.
En cuanto a Gran Hermano, creo que ha sido durante muchísimos años el buque insignia de la cadena, hay muchísimo trabajo detrás, hay muchísimas ganas por parte de los fans de que vuelva, y estoy segura de que volverá más fuerte y mejor que nunca. Como fan del formato estoy deseando que se estrene. Es uno de los mejores realities que existen en este país junto con Supervivientes. Por eso somos líderes en realities.
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