Luis Larrodera regresa a Cuatro como narrador de Ven a cenar conmigo
Ven a cenar conmigo ha arrancado su intensa campaña de promoción en Cuatro. A falta de conocer la fecha de estreno de esta nueva apuesta de la cadena, esta desvela un detalle clave de su mecánica: la identidad del anfitrión.
Luis Larrodera será el narrador de este concurso diario producido por Warner Bros España ITVP, tal y como informa en una nota. El polifacético artista, ya imprescindible maestro de ceremonias del FesTVal de Vitoria, retoma así una labor ya desempeñada en otros dos formatos de la cadena, Supernanny y SupernannyEl método Osmin Cabe recordar que también presentó en el canal otro recordado concurso, Alta tensión.
Un narrador “irónico y divertido”
Larrodera se ocupará de presentar a los concursantes y analizar los principales acontecimientos que se vayan sucediendo en las diferentes cenas organizadas por cada anfitrión. “Lo hará desde un punto de vista irónico y divertido, improvisando conversaciones ficticias con los propios participantes e integrándose de manera orgánica y fluida dentro del engranaje de postproducción y montaje que es ya marca de Cuatro”.
“Me hace especial ilusión formar parte de un proyecto como ‘Ven a cenar conmigo’ por muchos factores”, explica Luis Larrodera. “Por un lado supone una vuelta a Cuatro, donde siempre me he sentido muy cómodo; por otro, se trata de un formato que es todo un referente en la televisión mundial; y por último, porque mi papel como narrador se va a salir de los cánones habituales de una clásica voz en off’, ya que voy a poder aportarle una personalidad propia y divertida que espero que se convierta en un sello de identidad del programa”.
La búsqueda del perfecto anfitrión comienza en Cuatro
Cada semana cinco concursantes disfrutarán de una cena completa en casa de cada uno de ellos. En estas veladas, un participante ejercerá como anfitrión y los cuatro restantes serán sus invitados.
En estas cenas no sólo será importante el menú o las técnicas gastronómicas utilizadas, sino también la atención a los comensales, el don de gentes, la capacidad de sorprender y la habilidad para ofrecer un ambiente acogedor y un lugar en el que disfrutar de una larga sobremesa. Tras la cena, los invitados se convertirán en jueces y rivales y comenzarán una ardua votación de la que saldrá un ganador que será proclamado el mejor anfitrión de la semana y recibirá 3.000 euros de premio.