El nivel de secretismo en Juego de Tronos para evitar revelaciones indeseadas afectará de forma crucial a los actores de cara a la última temporada. El reparto de la serie no recibirá los guiones de los capítulos que compongan la tanda definitiva de la ficción de HBO.
Así lo ha comentado Nikolaj Coster-Waldau en un programa de la televisión Skavlan (que emite para la televisión sueca y noruega) y recoge AP. “Ni siquiera vamos a tener los guiones”, declaraba. El actor explicó que, al no tener copias físicas o digitales de los tratamientos, tendrán que llevar pinganillos donde les dictarán las líneas de diálogo durante el rodaje.
Un regreso a la figura del apuntador
Una medida extrema, y en muchos aspectos contraria al proceso de internalización que los actores realizan para componer los personajes, aunque tampoco novedosa.
Por diversos motivos, Johnny Depp (un hábito que lleva empleando desde hace largos años), Marlon Brando o Mickey Rourke (quien ha manifestado en ocasiones los problemas de memoria ocasionados por el boxeo) o hasta Al Pacino recurrieron al pinganillo, según compañeros de reparto y equipo técnico.
Por otro lado, no podemos olvidar la figura del apuntador en teatro, encargado de estar pendiente del texto y de lanzárselo al intérprete si este se le olvidaba. Era, sobre todo, una medida de seguridad para aportar confianza a los artistas al subirse al escenario.
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