Mediaset ha confirmado oficialmente su nuevo concurso 'Adivina qué hago esta noche', un proyecto que adelantó Vertele y que como más tarde recogimos será presentado por Santi Millán.
A través de su página web, además, el grupo confirma que el formato se emitirá en Cuatro, y no en Telecinco, como también se había dicho.
En la misma nota, la cadena desvela algunos de los invitados famosos que ayudarán a los concursantes a adivinar el talento oculto de once invitados con una habilidad. Serán Pablo Chiapella, Dani Martínez y Edurne.
Adivina qué hago esta noche supone una nueva colaboración entre Mediaset y la productora Fremantle, que se suma a las anteriores Factor X, Me lo dices o me lo cantas y Got Talent. Precisamente el talent de Telecinco, también presentado por Santi Millán con el que hemos hablado, celebra este lunes su segunda semifinal en directo tras haber sido renovado por una quinta edición.
Al actor y presentador se le acumulan los proyectos, ya que la serie de los hermanos Caballero en la que también participa, El Pueblo, ha sido renovada por una segunda temporada sin que Telecinco siquiera haya estrenado la primera.
Así será 'Adivina qué hago esta noche'
Esta nueva apuesta es un concurso de prime time en el que un participante acudirá al plató para someterse a un juego de astucia e instinto de la mano del presentador, Santi Millán, con el objetivo de conseguir un gran premio en metálico.
Para ello tendrá que adivinar, basándose en su intuición y en las pistas que le facilite el programa, la habilidad secreta de once invitados que revelarán su talento en plató una vez que el concursante realice su apuesta.
Cada participante jugará junto a un VIP que competirá junto a él para asesorarle en los momentos de zozobra e incertidumbre… O complicar aún más su decisión. Para lograr la mayor cantidad de dinero posible, el concursante y su aliado VIP deberán superar con éxito esta primera fase hasta alcanzar la gran final.
En esa etapa decisiva, el participante podrá doblar el dinero conseguido, reducir el riesgo sacrificando parte del bote acumulado o, en el peor de los escenarios, perderlo todo.