Álvaro Morte cierra 'El Embarcadero': “La sombra del Profesor es muy alargada y con Óscar he hecho algo más íntimo”
El Embarcadero estrenó este viernes su 2ª y última temporada en Movistar+. Una tanda de capítulos que da por cerrado el misterio de Óscar y sobre la que hablamos con Álvaro Morte y Roberto Enríquez, sus dos protagonistas masculinos.
“En esta temporada hay mucho más tormento. Hay una parte de más oscuridad que vamos viendo en los personajes, que creo que favorece y hace que haya más unión entre ellos. Al final acabas entendiendo por qué han tomado según que decisiones en la vida”, explica el primero, rostro principal del elenco.
El actor interpreta a un adúltero que lleva una doble vida durante más de 8 años hasta que aparece su cuerpo sin vida en un embarcadero. “Creo que es necesario entender al personaje más allá de que compartas o no sus decisiones”, añade al respecto. “Por supuesto hay cosas que no habría hecho si me hubiera tocado vivir lo que le ha tocado a él. A mí no me gusta mentir, condeno mucho la cobardía y creo que Óscar es cobarde”.
Caso diferente al de Roberto Enríquez, a quien empatizar con Conrado le ha resultado fácil. “Los personajes de El Embarcadero buscan ir hacia la luz, y con esa intención muchas veces acabas cometiendo errores. En cuanto a mi personaje, el camino que va siguiendo es maravilloso”, apunta.
Álvaro Morte: “La sombra del Profesor es muy alargada y con Óscar he hecho algo muy distinto”
Ambos coinciden, eso sí, en que haberse sumado al proyecto ha sido algo muy positivo para ellos a nivel profesional y personal. “Me encanta haber hecho El Embarcadero. Me ha permitido dar una cara muy distinta a lo que ha sido El Profesor. Este tiene una sombra muy alargada y con Óscar puedes mostrar una faceta muy distinta. Es una cosa mucho más íntima, sin tanta construcción externa, y estoy muy contento de haberla hecho”, reconoce Morte.
Por su parte, Enríquez explica lo complicado que va a ser encontrar más personajes “tan controvertidos y ricos” como el suyo. “Está lleno de contrastes, tiene tantas contradicciones y es tan bonito que me ha aportado muchísimo”