'Ni que fuéramos' arrancó con la esencia de 'Sálvame', pullas a Telecinco y dudas con visitar Mediaset: “Es provocación”
327 días después del final de Sálvame, sus creadores han recuperado al fin su espíritu en el arranque de Ni que fuéramos, un nuevo programa emitido principalmente en Internet a través de Canal Quickie, canal que la productora Fabricantes Studio SL (de los que fuesen responsables de La Fábrica de la Tele) han creado en Twitch y Youtube. El formato empezó abriendo una posible guerra con las Campos, con dardos de Kiko Hernández a Ana Rosa Quintana y un reto que despertó dudas entre los colaboradores: arrancar hoy la emisión desde la puerta de Mediaset.
Ni que fuéramos ha aterrizado apenas dos días después de que el programa se viese obligado a cambiar su nombre, ya que fue anunciado como Ni que fuéramos Sálvame. Sin embargo, una reclamación por parte de Mediaset les hizo omitir el título del extinto formato de corazón. Esta circunstancia provocó algunas pullas en plató, con los tertulianos haciendo malabares para evitar decir la palabra Sálvame. Belén Esteban, sin ir más lejos, se refirió a él como “Save me” [Sálvame en inglés].
A Belén la acompañaron en la primera entrega Kiko Matamoros, Lydia Lozano y Víctor Sandoval como colaboradores y María Patiño, que ejercerá siempre de presentadora. En los primeros minutos de emisión, en los que se prometió irrumpir “con travesura y salseo” en el contexto de “una televisión aburrida, sin color ni diversidad”, todos ellos empezaron a recopilar los mensajes de buenos deseos que han recibido por parte de excompañeros y amigos.
Fue entonces cuando desvelaron el 'feo' gesto que les han hecho Terelu Campos y Carmen Borrego, al no desearle suerte en su nueva andadura. Esto, sumado a los palos de Kiko Matamoros hacia Alejandra Rubio, hace presagiar que las Campos -a las que intentaron llamar en directo- van a ser el principal objetivo de sus primeros programas en antena.
De la misma manera, Matamoros y Sandoval compartieron con los espectadores la llamada que recibieron por parte de Cristina Tárrega, tanteándoles para ficharlos como colaboradores de la nueva etapa de La vida sin filtros en Telecinco, de la que hablaron refiriéndose a ella como “la cadena de enfrente”, pues sus instalaciones se encuentran muy cerca de la nueva sede de Canal Quickie. Esta intentona fue percibida por algunos colaboradores como una estrategia para intentar torpedear el arranque de Ni que fuéramos 'robándoles' a dos de sus tertulianos.
Dudas con el reto de visitar Mediaset
A mitad de programa, Escaleto -responsable de leer las reacciones y mensajes en redes sociales- entró en el estudio para proponer un reto a los colaboradores. El joven explicó que los espectadores pueden suscribirse a Canal Quickie en Twitch, lo que les ayudaría a financiar el programa en esta nueva etapa. Así pues, propuso a la audiencia que si se alcanzaban las 200 suscripciones en lo que quedaba de tarde, los colaboradores iniciarían la entrega de este jueves desde la puerta de Mediaset.
El reto despertó dudas entre los tertulianos, con Lydia Lozano recordando el encontronazo que vivió con un miembro de seguridad del grupo durante las grabaciones de la promo inicial de Ni que fuéramos. “Yo no quiero volver a verle”, dijo la periodista, mientras Belén Esteban se mostraba más tajante. “Para mí es una provocación. Yo no quiero ir, no por nada... Pero si nos han quitado la palabra, que más queréis, ¿que mañana nos detenga la policía?”, dijo alertada la colaboradora frente al entusiasmo de Matamoros y Sandoval con la idea.
Finalmente, se alcanzaron esas 200 suscripciones, por lo que habrá que esperar a esta tarde para ver si cumplen con su palabra.
La pulla de Kiko Hernández a Ana Rosa
Una de las grandes incógnitas de este esperado regreso era la ausencia de Kiko Hernández, quien no figuraba de entrada como rostro habitual del nuevo programa. Sin embargo, apareció en el estreno por sorpresa a través de una videollamada en la que dejó entrever que terminará formando parte del plantel de colaboradores. “Os deseo toda la suerte del mundo y en nada, en nada, estoy ahí”, prometió para alegría de sus compañeros.
De la misma manera, Kiko Hernández se mostró más mordaz con su antigua empresa, lanzando dardos a Telecinco y Ana Rosa: “Si estuviera yo ahí, no solo iría a la puerta de Mediaset, sino que entraba. Con la seguridad, con la policía y con todo. Y les diría: '¡14 años que os hemos llenado los bolsillos! ¡Catorce! Que nos hemos dejado la vida ahí, que entrábamos los viernes a la una de la tarde y salíamos a las tres de la mañana, para hincharos los bolsillos, ¿y ahora no nos dejáis pasar? ¡Hay que tenerla muy dura!'”, soltó Hernández.
Kiko acabó su intervención celebrando la buena acogida en audiencia que estaba teniendo Ni que fuéramos en su debut: “Al ritmo que vais de seguidores, os queda muy poquito para ganar a la otra”, dijo en referencia a Ana Rosa y su programa TardeAR, despertando las risas cómplices del resto de compañeros.