Vamos a llevarnos bien se estrenó en La 1 de TVE este martes cumpliendo el principal objetivo que se había marcado su presentadora Ana Morgade: “Pelearemos por hacer reír, que es la mejor excusa”.
El programa llegó a la cadena pública como una competición entre cómicos por llevarse a casa la copa al mejor humorista de la noche. Así, en la primera entrega, Miguel Maldonado, María Gómez,Miki Nadal y La Terremoto de Alcorcón “pelearon” dando tu toque cómico a las noticias más comentadas de actualidad.
Con un original plató convertido en ring de boxeo, un ritmo digno de dicho deporte y un público entregado, la primera entrega se alzó como un show de entretenimiento puro, sin más pretensiones que apostarlo todo a la risa. “Una noche reída es una noche bien vivida” acadó diciendo Morgade y posiblemente hubo espectadores que se marcharon (a las 00:40 horas) a dormir pensándolo tras ver el estreno... y otros que no tanto.
Unas pruebas y secciones mejorables
De los 9 asaltos (pruebas) por las que pasaron los cómicos, hubo algunas más acertadas que otras. La simpleza del laberinto de cajas lograba el interés del espectador, así como el “monólogo” de cada uno para defender su candidatura. Pero el adivinar personajes sin mascarilla sabía a pasado poco elaborado.
Pero si hubo algo que podía despistar en el programa eso eran las entrevistas de Bibiana Fernández y Manuel Burque. Secciones totalmente descontextualizadas que si alguien hacía zapping y se topaba con ellas, hacían casi imposible el reconocimiento del programa. Un despiste importante para un formato que quiere hacerse un hueco en la cadena.
...and the winner is: Ana Morgade
Cada semana se celebrará un combate de humor en Vamos a llevarnos bien. Este primero lo venció Miki Nadal que se llevó la primera copa. Un premio que la presentadora confesó que soñaba “con que dentro del gremio, tenga importancia” y que, de alguna manera la va a tener.
Porque si van desfilando cómicos, con la oportunidad de alzarse con tal reconocimiento, con mayor o menor relevancia, la única que no podrá lograrlo es Ana Morgade. Y, sin embargo, es la clara ganadora del programa al confirmar que el papel de presentadora está hecho a su medida: dándole ritmo a cualquier guion, siendo rápida en las entrevistas y hasta lanzando indirectas en todos los temas tratados.
“Una noche reída es una noche bien vivida” dijo para despedir el programa, y es que ella es garantía de esas risas que pueden alegrar las noches de la pública.