'Maestros de las costura' vuelve calentito: Helen, primera expulsada y rebelión contra los jueces
Las puertas del taller de Maestros de la costura se volvieron a abrir en TVE para dar la bienvenida a su tercera promoción de aprendices.
Doce fueron los escogidos: Borja, Arantxa, Laura, Begoña, Fran, Margarita, Xiaona, La Brava, David, Joshua, Marc y Helen, de los que ésta última dijo adiós en la primera entrega. Pero no sin antes rebelarse contra la decisión de los jueces.
Lorenzo Caprile, María Escoté y Paomo Spain volvieron más acomodados en sus papeles televisivos y con sus broncas habituales a los concursantes.
Los mejores y peores del primer reto
La primera prueba del estreno arrancó con un homenaje al modista español Elio Berhanyer. Los aspirantes tuvieron que hacer una prenda inspirada en su universo y con plumas.
Durante los 90 minutos de elaboración, tuvieron que descontar el dibujo del boceto, la etiqueta con su nombre, el planchado y la puesta de la prenda en el maniquí.
Al ser la primera vez de todos unos se dejaron el hilo, los otros el patrón... lo más imprescindible por falta de experiencia.
Acabado el tiempo, los jueces señalaron las prendas de Arantxa y David como las peores. Mientras que Margarita, Xiaona y Joshua recibieron el tercer, segundo y primer puesto.
Marc, el único que destacó del “horror”
Para la segunda prueba los nuevos aspirantes viajaron a Ourense, donde rindieron tributo a la industria textil de nuestro país, la moda gallega.
Allí tuvieron que hacer una réplica de un Adolfo Domínguez repartidos en dos equipos capitaneados por los dos mejores de la prueba anterior.
Joshua se ocupó del equipo naranja formado por David, Brava, Margarita, Marc y Fran. Y Xiaona hizo lo propio con Borja, Arantxa, Laura, Helen y Begoña.
Aunque ambos equipos empezaron con buen pie al escoger el mejor tejido que había, todo se fue descontrolando tanto que Caprile no dudó en echarles bronca: “Para celebrar el orgullo gay tenemos las fiestas de Madrid”, les dijo a algunos de ellos que parecían estar más en una fiesta que en el exigente talent de Shine.
Se acabó el tiempo y al equipo naranja no le dio tiempo ni de montar el maniquí. Algo que nunca había ocurrido anteriormente pero que los jueces decidieron pasar por alto. Aún así, no se salvaron: “Costuras rizadas, sin centros, pantalón el gran fiasco, sin cinturillas ni bolsillos laterales, piernas sin coser. Tenía gran pontencial, bien cortado, con buena caída, pero no lo habéis sabido hacer”, sentenció Escoté.
Mientras que los verdes también recibieron críticas: “La cremallera está destrozada, bolsillos cero, asimetría, piernas con caídas diferentes, corte patético”, concluyó Palomo.
De esta forma, los jueces dieron un “suspenso general para todos” por lo que decidieron que nadie se salvara de la prueba de expulsión, aunque sí quisieron destacar la “profesionalidad de Marc”.
Adiós a Helen con disparidad de opiniones
Con todos preparados para enfrentarse a la prueba de expulsión, los jueces anunciaron a Marc que tenía el privilegio de salvar a dos compañeros (o a él mismo) pero prefirió que fueran Joshua y Brava.
Para la última prueba conocieron en persona a Teresa Castanedo, dueña de la tienda vintage más grande de Europa, y demostraron de lo que eran capaces con colchas.
Begoña hizo un centro marcado en su prenda que era para sentirse “orgullosa”, Fran “tapó sus fallos con el fajín”, David logró “patronar y coser” demostrando su potencial, Margarita también sorprendió con su “modelaje”, Helen hizo un “saco de patatas” sin utilidad alguna, Xiaona tuvo una “buena idea atrevida” pero con desorganización del tiempo, Borja presentó una prenda “incoherente con los materiales”, Marc lo “trabajó estupendamente”, Arantxa fue “resolutiva” igual que Laura que fue “a lo seguro”.
Por lo que Caprile, Escoté y Palomo acabaron concluyendo que el aprendiz que no continuaba en el taller era Helen. Al escuchar su nombre, la aspirante no pudo contenerse: “Lo veo injusto, este concurso va de coser y rematar y ha habido gente que no lo ha hecho y está junto a mí”, dijo refiriéndose a su compañera Xiaona que intentó contener las lágrimas.
Los jueces, por su parte, argumentaron su decisión: “Xiaona a lo mejor no ha rematado pero ha hecho dos piezas y te las puedes poner, la tuya no. Una prenda si no te la puedes poner está suspendida”, añadió Escoté.
Pero Helen siguió en sus trece: “Lo veo injusto y me voy con una sensación agridulce de no haber podido demostrar mi potencial”.
Fue finalmente Raquel Sánchez Silva la que intermedió: “También tenemos que entender que haber llegado hasta aquí e irse el primer día no debe ser fácil”, y acompañó a la expulsada a la puerta.