Semana cinco en Masterchef 9 y Jordi Cruz, Pepe Rodríguez y Samantha Vallejo-Nágera criticaron la “involución” de los aspirantes tras una de las peores pruebas de exteriores de la edición. Un reto que llevó a Alicia a eliminación y acabó dejando las cocinas.
Durante la entrega, Ofelia volvió a ser protagonista tras una “perrería” de Dani que le obligó a cocinar carne de caballo, sabiendo lo que ese animal había significado en su vida.
Todo ello, tras haber enseñado a los concursantes la importancia de no desperdiciar sin sentido los alimentos de la cocina.
Primera prueba por parejas ¿compatibles?
Los aspirantes se emparejaron para conocer los beneficios de la comida macrobiótica, basada en unos principios que buscan la armonía en beneficio del cuerpo, la mente y el planeta. Meri y Amelicious, Pepe y Dani, Arnau y Jiaping, Ofelia y Toni, María y Alicia tuvieron que demostrar que eran capaces de hacer platos sanos y apetecibles. Mientras que Fran pudo trabajar con el tercer clasificado de MasterChef 8, Iván Mariñas.
Los platos fueron catados por Raquel Sánchez Silva, Lorenzo Caprile, María Escoté y Alejandro G. Palomo que, junto a los jueces, criticaron negativamente el plato a Jiaping y Arnau por hacer “muy mal” un “agua sucia con diferentes sabores sin sentido”, a Pepe y Dani por una “pasta mal cocida y sosa” y a Amelicious por hacer una comida “sana pero sin disfrute”.
Mientras que los halagos fueron dirigidos a Fran por un pescado “bien tratado y jugoso”, a María y Ali por un plato “sabroso y buenísimo y a también Toni dejó ”contentos“ a los jueces por una elaboración ”rica“.
Tras la cata, todos señalaron a Ofelia y Toni como los mejores y a Arnau y Jiaping por elaborar unos “platos que eran un despropósito”, un resultado que les acabó vistiendo de delantales negros.
Dani, el mejor de la prueba de exteriores
Para la prueba de exteriores, los aspirantes viajaron a Mijas (Málaga). Allí tuvieron que elaborar un menú de cuatro platos para 80 personas diseñado por Henar y Antony, concursantes de la última edición de MasterChef Junior, que lideraron los dos equipos de aspirantes.
Henar se vistió de azul para capitanear a Dani, Pepe, María, Meri, Amelicious y Toni que cocinaron ajo blanco de coco y chivo de Málaga. Mientras que Antony se puso el delantal rojo para rodearse de Arnau, Ofelia, Fran, Alicia y Jiaping que elaboraron arroz de marisco y postre de chocolate.
Tras un cocinado más divertido que cualquier otra semana por la capitanía de los junior, los jueces sentenciaron que había sido una de las peores pruebas de exteriores de la edición: por la cantidad de alimentos tirados a la basura y por haber “involucionado”. Aún así, el equipo azul se alzó como el ganador por haber “sabido trabajar en equipo”, y en especial Dani por haber llevado el peso de muchas elaboraciones, con buena sintonía con Henar.
Del drama de Ofelia, al adiós a Alicia
Arnau, Ofelia, Fran, Alicia, Jiaping se vistieron con los delantales negros para la prueba de eliminación. Allí descubrieron que el jurado les había preparado una selección de carnes de razas autóctonas, locales y sostenibles. La paletilla de cabrito lechal, el carrillón de cordero, la presa de cerdo, la aguja de caballo, el solomillo de añojo de ternera o los cuartos traseros de gallina fueron algunos de los cortes con los que contaron los delantales negros en cocina.
Tuvieron que acompañarlos con los alimentos que encontraron bajo la caja misteriosa: el resto de ingredientes y elaboraciones que desecharon en las dos primeras pruebas de la noche, para concienciarse de la importancia de no desperdiciar nada.
Dani, el mejor de la prueba anterior, se ocupó de repartir las carnes a cada aspirante y el drama llegó cuando Ofelia vio que tenía que cocinar caballo. “No voy a cocinar esta carne, prefiero irme. El caballo es un animal que me ha aportado muchísimo. Y no me parece justo”, decía entre lágrimas.
La aspirante aseguró que Dani había aprovechado una confesión de ella para quitársela de encima: “Lo hablé siempre que no me pongan nunca caballo, es un respeto hacia algo que me ha aportado tanto en mi vida y él se ha aprovechado de ello”. Mientras que el concursante confirmaba su maldad: “Un poco perro sí he sido”, dijo entre risas. Finalmente, ella decidió superarse y hacer el plato.
Acabado el cocinado, Fran presentó un guiso de cordero “soso, sin personalidad y sin gracia”, Arnau entregó una paletilla de cabrito “bien cocinado”, Jiaping hizo lo propio con una gallina “dura con poco riesgo”, Alicia elaboró una carrillera “quemada y un puré chungo” y Ofelia fue la última en dejar probar su “caballito ganador” del que dijeron que “tenía mérito aunque había chocolate de más”.
Tras la cata, los jueces deliberaron y, como cada semana, Pepe sentenció: “El aspirante que no continúa en las cocinas es Alicia”. Ella acató la decisión con orgullo: “He hecho el cambio de cocinar de casa, a pensar de otra manera. Tengo muchas ganas de seguir cocinando”.
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