Masterchef Celebrity 4: así fue el “abrazo histórico”, con puñal incluido, de Antonia Dell'Atte y Ana Obregón
La repesca de Ana Obregón en 'Masterchef Celebrity 4' provocó uno de los reencuentros televisivos más esperados: el de la bióloga con Antonia Dell'Atte.
La finalista de la tercera edición reapareció en el talent para aconsejar a los aspirantes y catar sus elaboraciones.
Allí, las que un día fueron enemigas íntimas enfrentadas por el amor del Conde Lecquio, se abrazaron y hasta se dedicaron palabras agradables.
“Hace tiempo que estamos unidas”
Antonia Dell'Atte entraba a plató y al ver a Ana Obregón la señalaba y gritaba. La bióloga respondía al gesto y se acercaba a ella para abrazarla.
Pero la italiana, conocedora del momento morboso que iba a protagonizar, lo presentó ella misma: “Este es un abrazo histórico”, decía y correspondía a Obregón. A su vez, Boris Izaguirre y otros compañeros se mostraban atónitos ante la situación: “Si me llegan a decir hace 30 años que presencio esto no doy crédito”, confesaba Yolanda Ramos.
El histórico encuentro entre Ana Obregon y Antonia Dell'Atte
Al separarse, la presentadora y actriz aseguraba que era la primera vez que se mostraban así ante las cámaras pero la realidad es que “hace tiempo que estamos unidas”, decía haciendo referencia al apoyo que estaba recibiendo de Antonia con la enfermedad de su hijo.
Sonrisas y puñales de Antonia a Ana
Pero no todo fueron buenas intenciones entre las dos y es que Antonia hizo gala del mote que le pusieron en su edición: “Farisea”.
Le daba una de cal y otra de arena a la Obregón en cuanto se giraba. Cuando los jueces le pidieron que aconsejara a su nueva amiga, la italiana dijo: “Tenemos que olvidarnos de estar guapas aquí. Y hay que equivocarse mucho y pedir aún más consejos a los jueces”, pero segundos después aseguraba que Ana había llegado al concurso “pensando que va a una pasarela pero no sabe ni freír un huevo porque es una niña mimada y no ha compartido con los demás”.
También aseguró que “las grandes personas perdonan y tuve que perdonar a esta persona para tener paz”, a la vez que se alegró cuando le dijeron que la expulsaron la primera semana porque les enloquecía: “Me pone contenta que lo hayáis vivido todos, porque yo la he soportado 25 años, ahora a joderos!”, exclamó.
Cuando llegó la hora de despedirse, Antonia dedicó una última frase a Ana: “Te deseo lo mejor haz la paz contigo misma y así el universo te va a sonreír siempre”.
