'Masterchef 8' expulsó a Rosa, la comandante del Ejército del Aire, en otra entrega con rebelión de aspirantes
La tercera entrega de 'Masterchef 8' volvió a demostrar que el casting, aunque acertado, sigue siendo de los más “contestones” que se han visto. Como ya comprobaron los jueces la semana anterior.
Algunos de los aspirantes volvieron a rebelarse frente a los jueces en la primera prueba por sus duras valoradiones.
Aún así, eso no impidió que Jordi Cruz, Pepe Rodríguez y Samantha Vallejo-Nágera expulsaran a Rosa.
Primera prueba con rebelión en los fogones
El jurado quiso rendir homenaje a la sostenibilidad en los alimentos y al producto orgánico de proximidad pidiendo un plato vegetariano y proponiendo a los aspirantes que cocinaran con verduras de temporada, ecológicas.
Aunque no hubo variedad en las recetas, los platos mejor valorados fueron los de Juana “por estar rico y no tener ni una pega”, Teresa por conseguir un “buen sabor”, Ana por “sorprender con toques cítricos y creatividad” y sobre todo el de Luna “por estar bien hecho, original, condimentado y rico”, tanto que hasta repitieron de su sartén.
Mientras que los resultados que menos convencieron fueron los de Fidel porque era un “plato imposible de servir y difícil comprensión”, Sara Lúa por “una crema sin sabor”, Iván porque sabía “muy malo” como el de Jose Mari, el de Andy por “aprovechar mal los ingredientes”, Saray “por presentar un plato a medio hacer” como el de Sonsoles, tampoco fue bueno el de Michael por “no tener una mala idea pero falta de resolución”, Rosa por un pisto a medias y aún gustó menos el de Alberto que casi hizo vomitar a los jueces con su crema de calabacín.
Al escuchar las malas valoraciones que tuvieron la mayoría de ellos, Jose Mari pidió que fueran otros los que probaran su gazpacho porque no creía que estuviera tan malo como ellos decían. Iván se añadió a la rebelión asegurando que los jueces no querían que dijeran lo que pensaban.
Algo que negó Jordi Cruz: “Este plato es una porquería y no quiero que me discutáis. Sois los más contestones en 8 años. Sí podéis decir lo que pensáis pero con argumento”.
Finalmente y como era de esperar, las mejores de la prueba fueron Luna y Ana.
Prueba de exteriores con el brillo de Iván
Luna, por ser la mejor de la prueba anterior, fue la encargada de componer los tres equipos que debían preparar un menú degustación de nueve tapas con productos de Murcia, en 160 minutos.
El equipo blanco estuvo formado por Andy, Teresa, Chema y Sonsoles, y se encargaron de cocinar anguila ahumada, mini menestra y paparajotes
El Equipo rojo que contó con Juana, Ana, Saray, Sara Lúa e Iván, encargados de la tempura de gamba, el arroz caldoso y la compota.
Y un equipo azul con Rosa, Alberto, Michael, Fidel y Luna que cocinarían crema de berenjenas, carrillera, mousse.
En general, los jueces aplaudieron a los tres equipos por haber cumplido con el servicio. Pero el equipo azul no controló bien los procesos con Alberto, un capitán que no “estuvo a la altura”. El equipo blanco fascinó con su punto de cocción y el emplatado. Mientras que el equipo rojo funcionó pero no por su capitana, Ana, al haber trabajado como una “aspirante, no como una líder”. En cambio, Iván sí que supo tener iniciativa y sacar adelante los platos.
Tras la valoración, el equipo ganador fue el equipo rojo.
Prueba de eliminación con una amarga despedida
Fidel, Rosa, Andy, Sonsoles, Jose Mari, Luna, Alberto, Teresa, Michael entraron por la puerta de las cocinas para defender su continuidad en el programa.
La prueba de eliminación puso a prueba el conocimiento de los delantales negros sobre el pollo. Primero, tuvieron que despiezarlo y sacar pechugas, muslos, contramuslos y alitas en solo 2 minutos. Teresa y José Mari acabaron los primeros, por lo que se salvaron de la prueba.
MasterChef 8 - Jordi Cruz despieza un pollo a ciegas
Después, en 60 minutos, Fidel, Rosa, Andy, Sonsoles, Luna, Alberto y Michael cocinaron cuatro platos distintos usando las cuatro piezas despiezadas y una cocción diferente en cada receta.
Al acabar el tiempo, todos presentaron sus elaboraciones. Las únicas que gustaron fueron las de Luna por estar “bastante bien hechas y ricas de sabor” y las de Michael “bien ejecutadas pero faltas de creatividad”.
Pero las que les disgustaron fueron las de Sonsoles que estuvieron “justitas por falto de dominio del fuego”, las de Andy “por llevar demasiada grasa y ser pretenciosas”, las de Alberto por ser un cocinado “universitario”, las de Fidel por presentar “pollo crudo y malo” y las de Rosa por “no saber manejar los tiempos”.
Tras finalizar la cata y la deliberación, los jueces decidieron que “el aspirante que no debía seguir en el talent era Rosa”.
