Opinión

La oportunidad que ha dejado escapar 'Mujeres y Hombres y Viceversa' para sumar una “nueva generación” real

Mujeres y Hombres y Viceversa es uno de los formatos más longevos de Mediaset que está viviendo sus peores días en esta “nueva generación” que arrancó el pasado mes de septiembre, con Jesús Vázquez al frente y una dinámica distinta para cumplir con las medidas sanitarias.

Tronistas y pretendientes ya no se encuentran en plató y tienen citas de pocos minutos por Madrid, sino que ahora conviven juntos en una casa en la que intentan seguir las mismas normas que hasta ahora sin darse cuenta de que todo ha cambiado (o debería).

Y esa es una de las claves por las que el dating no ha dejado de perder espectadores desde que se estrenara el pasado 14 de septiembre con 4.9% y 309.000 y llegando a anotar el mínimo de 2.7% y 176.000 pocos días después (el 21 de septiembre).

A continuación analizamos las dificultades con las que se encuentra un formato que tiene ingredientes de serial y señalamos la oportunidad que ha dejado escapar para sumar espectadores. Aunque aún está a tiempo de recular.

Un declive sin freno (que solo salva el diferido)

De entre las muchas novedades que presentaba la nueva temporada de Mujeres y Hombres y Viceversa (y que ya explicamos en esta noticia) a nivel de audiencias destacaba una referente a su horario. Y es que el dating ahora empieza y acaba más tarde que antes, y dura un poco menos. Su emisión se alarga unos 60 minutos, entre las 13:10 y las 14:10 horas.

Se trata de una franja complicada al enfrentarse a la parte final de El Programa de Ana Rosa y el comienzo de Ya es mediodía, en Telecinco. Así como al final de Espejo Público y Karlos Arguiñando en Antena 3, Al Rojo Vivo en laSexta y Cocina al punto con Peña y Tamara en La 1.

De esta forma, en la primera semana de estreno de Vázquez y los tronos, el programa anotó los siguientes datos:

• Lunes 14 de septiembre: 4.9% y 309.000

• Martes 15 de septiembre: 3.6% y 238.000

• Miércoles 16 de septiembre: 4% y 270.000

• Jueves 17 de septiembre: 3.1% y 209.000

• Viernes 18 de septiembre: 3.9% y 274.000

MEDIA DE LA SEMANA: 3.9% y 260.000

En menos de un mes, las cifras han bajado hasta llegar a anotar mínimos:

• Lunes 5 octubre: 3.2% y 197.000

• Martes 6 octubre 'Mujeres y hombres y viceversa': 2.9% y 178.000

• Miércoles 7 octubre 'Mujeres y hombres y viceversa': 3% y 177.000

• Jueves 8 octubre 'Mujeres y hombres y viceversa': 2.9% y 173.000

• Viernes 9 octubre 'Mujeres y Hombres y Viceversa: Nueva Generación': 3.2% y 192.000

MEDIA DE LA SEMANA 3,04 y 183.000

Cabe recordar que si bien las cifras de la audiencia tradicional son bajas, las más potentes del dating son las del diferido, donde su público más fiel suele ver las entregas cuándo y desde donde quiere, manteniendo un segmento de población atractivo para los anunciantes.

La soga de un dating con ingredientes de telenovela

Pero la realidad es que ninguno de los espacios a los que se enfrenta el dating de Cuatro se dirige al público adolescente-juvenil al que pretenden “enamorar” los viceversos, por lo que la complicada franja no es su mayor problema, sino que su peor enemigo lo tiene en casa. En concreto, en la casa de los tronistas.

Y es que lo que hace complicado que se sumen espectadores nuevos al programa es su narrativa más de serie de televisión que de programa capitular. Desde que se estrenara en 2008, han ido pasando tronistas y pretendientes por el plató que se han ido enamorando unos de otros, engañando unos con otros, con historias entrelazadas que han convertido a algunos de ellos en protagonistas de la trama principal, con subtramas y secundarios recurrentes, nuevos fichajes y hasta cameos de famosos. Vamos, un Al salir de clase aún más complicado.

Por eso mismo hasta es difícil encontrar un presentador que entienda los reproches entre ellos, las rencillas, los romances pasados que reaparecen y hasta que sea capaz de seguirlos en otros programas como La isla de las tentaciones o Supervivientes. Es necesario un máster impartido por Nagore para estar al día.

Lo que juega en su contra es que a un presentador le pagan por hacer ese master pero a un espectador no. Y como alguno de ellos se descuelgue varios días, semanas o meses, después es difícil que se reenganche cuando lo sintoniza y no sabe quién es nadie. Por eso, ha ido perdiendo público fiel, año tras año.

Una mecánica que es una losa y el último intento real

Por todo ello, Mujeres y Hombres y viceversa tenía una oportunidad de oro al arrancar esta nueva temporada, con nuevo presentador, nuevos tronistas y nuevos pretendientes con los que la audiencia pudiera empezar de cero. Sí, una nueva generación pero no regeneración, por desgracia.

Después de un mes viendo cómo en una casa hay tronistas y pretendientes que solo pueden fijarse en sus tronistas o se van a su casa, está claro que es aún más antinatural que pretender que no se saltaran las reglas anteriores. Durante estos días muchos de los inquilinos se han fijado en los otros, sin pensar si eran sus tronistas o no. Es decir, por fin surgía el amor de verdad (que es lo que busca el programa y su público espera ver) pero como no respondía a la mecánica tronista-pretendiente les echaban y nos perdíamos esa historia. Quizá mucho más atractiva que la de los protagonistas.

Y es que, si las reglas del juego han cambiado, cambiémoslas al completo. Vivamos un “campamento” de Mujeres y Hombres y Viceversa y que surjan las historias sin barreras de guion. Esas que suelen ser siempre las más sorprendentes y adictivas.

Todo ello volvería a permitir al público de siempre y al nuevo que se enganchara a estas tramas frescas. Entre las que, además, podría surgir el elemento que se lleva pidiendo desde hace años al dating: una romance homosexual. Ha ocurrido en el formato italiano y, sin embargo, en España nunca lo han probado.

Teniendo el ejemplo de la exitosa Luimelia que ha levantado las audiencias de Amar es para siempre, esta sería la fórmula de apostar por una Nueva generación real de Mujeres, Hombres y Viceversa.