Desde mediados de noviembre, Netflix ofrece una ventana actualizada semanalmente al rendimiento de sus contenidos. Su nuevo "Netflix Top-10" es una página web de acceso público en la que todo el mundo puede consultar cuáles son las ofertas más vistas, según la propia plataforma.
A estos datos no se les puede denominar “audiencias”, porque como ya analizamos siguen siendo cifras internas y no auditadas por ninguna empresa o estamento, y por lo tanto creerlas sigue siendo una cuestión de fe. Además, tampoco se dan cifras totales de espectadores, sino que el nuevo parámetro de Netflix son las “horas vistas” que ha tenido una determinada oferta, lo que como también analizamos beneficiará a las series, películas y programas con más horas de contenido. Al menos es preferible a la ridícula medición basada en contabilizar que si una cuenta veía dos minutos de un contenido, contaba como haberlo visto entero.
Así que, si valoramos esa nueva unidad de medida propia de Netflix, y si realizamos ese ejercicio de confianza para creernos los datos que la plataforma aporta, su nuevo “Netflix Top-10” al menos puede suponer un mínimo ejercicio de transparencia que incluso podemos llegar a agradecer. Siempre sin olvidar todo ese contexto ya expuesto.
Información global, márketing general
Si aceptamos esa nueva medición, y nos creemos los datos de Netflix, podemos avanzar a la siguiente aclaración: ¿Qué es el “Netflix Top-10”, y qué información da?
Es algo que ya contamos cuando se presentó el servicio, pero que podemos resumir ya que es fácilmente comprensible: el “Netflix Top-10” recoge y ordena lo más visto en la plataforma. Sin embargo, no da la misma información a nivel Global o a nivel Local. Estas son las categorías de una y otra:
A nivel Global:
- Películas (de habla inglesa) - Semanas en el Top-10 y Horas vistas.
- Películas (de habla no inglesa) - Semanas en el Top-10 y Horas vistas.
- TV (de habla inglesa) - Semanas en el Top-10 y Horas vistas.
- TV (de habla no inglesa) - Semanas en el Top-10 y Horas vistas.
A nivel Local:
- Películas - Semanas en el Top-10.
- TV - Semanas en el Top-10.
Es decir, el dato principal -por ser el único que permite medir y cuantificar el éxito o no de un formato-, el de las “horas vistas”, sólo se facilita en los contenidos de más éxito a nivel Global, obviamente de los que más puede presumir la plataforma. Pero si una oferta no logra entrar en ese selecto Top-10 de todas las visualizaciones de Netflix en el mundo, sigue sin haber forma de cuantificar cómo le ha ido a una nueva apuesta, y si puede considerarse un triunfo más allá de la percepción de éxito que Netflix haya logrado generar.
Ese nivel de exigencia provoca que siga siendo imposible conocer cómo ha funcionado un formato si no llega al Top-10 Global. Por poner un ejemplo claro y reciente con el que hemos realizado otro análisis, sí que podemos cuantificar el éxito del reality Amor con fianza (ya que entró en la novena posición del Top-10 Global con 8.370.000 horas vistas), pero no de otro reality como Insiders (que no entró en ese Top-10 Global).
¿Y qué información nos queda entonces de toda la inmensidad de ofertas que no entran en el Top-10 Global? Pues básicamente, lo que los usuarios de Netflix ya tenían y podían ver en esta famosa barra horizontal en la plataforma:
La única diferencia es que en esa barra de “Los 10 más populares en España hoy” se muestran los datos supuestamente actualizados de cada día, mientras que en el apartado Local de la web “Netflix Top-10” lo que se presenta es un repaso de toda la semana anterior, y además facilita saber si una oferta lleva ya más semanas seguidas en ese ránking. Es decir, que ahora podemos saber también, además de las tendencias diarias, las semanales y el aguante de los contenidos. Pero ninguna cifra cuantitativa si no se entra en el Top-10 Global.
Por lo tanto, el nuevo “Netflix Top-10” es un pequeño paso de transparencia que se agradece para poder al menos “situar” cómo han funcionado sus estrenos según la misma compañía, pero al mismo tiempo es una inteligente maniobra de márketing para que sus mal denominadas “audiencias” sean en realidad una forma de presumir sólo de sus formatos más vistos, los únicos que se cuantifican y contabilizan.