Óscar Mijallo y Sol Macaluso repasan desde plató los momentos “más difíciles” de su trabajo en Ucrania
Óscar Mijallo, en TVE, y Sol Macaluso, en Telecinco, han sido durante las últimas semanas dos de las voces principales que nos han hecho llegar de la información que ha llegado desde Ucrania a nuestra televisión. Ambos están de vuelta en España tras haber cubierto la invasión rusa, y han cambiados los exteriores por los platós de sus respectivas cadenas para hacer balance de la experiencia.
En el caso del periodista de RTVE, ha estado presente en La Hora de La 1, donde ha conversado con Silvia Intxaurrondo sobre este trance. “Cuando llegas a casa ya puedes levantarte cuando quieras y ya no estoy preocupado de tener que cubrir un bombardeo. Es una situación extraña no levantarte con las sirenas”, reconocía sobre la dureza de lo vivido durante estas últimas semanas de conflicto, en la que se ha enfrentado con situaciones difíciles. Una de ellas era “ver la sala de niños enfermos terminales” de un hospital: “Necesitaban el oxígeno para poder vivir y esto provocaba que no pudieran bajar al búnker”.
Mijallo: “No se puede ser un 'olvidador' de historias”
Para aguantar los envites, “el apoyo del equipo siempre es fundamental”, recalca el profesional, que ha puesto el valor el equipo formado con el cámara Miguel de la Fuente y con Hugo Úbeda. “Miguel y yo lo hemos vivido con muchas discusiones, pero ya hemos trabajado en muchas guerras juntos y no nos queda más remedio que soportarnos”, bromeaba Mijallo, que ha comentado que la madre del cámara falleció cuando volvían a España.
El periodista ha insistido en mantener una postura crítica y “poner en cuestión las versiones oficiales de los gobiernos”: “Ahora hay una 'rusofobia': ni los rusos son tan malos, ni en ocasiones los ucranianos tan buenos. Hay que monitorizar los abusos de una parte y de otra”. También ha pedido ayudas para los refugiados que llegan a España.
Mijallo no descarta la posibilidad de volver a viajar a Ucrania: “Seguro que esto se va a extender”, concluía el periodista, que destaca la importancia de los corresponsales de guerra, una labor que comenzó a interesarle de joven. “Desde muy pequeño siempre me gustó mucho leer y me sentí muy atraído por la información internacional. Siempre me ha gustado y son experiencias muy vitales”, dice el periodista, que ha publicado dos novelas y tiene una tercera en galeradas para contar “esas historias que no caben en el telediario”. “No se puede ser un 'olvidador' de historias porque realmente tienen que ser contadas”.
Sol Macaluso recibió un mensaje de su 'fixer'
En paralelo, Sol Macaluso también aparecía por primera vez en plató de El programa de AR después de semanas desplazada en Kiev. La periodista argentina se ha hecho popular por su destajismo (ha colaborado con otras cadenas internacionales durante el último mes) y sobre todo por difundir la historia de su fixer. Este se marchó al frente a combatir al ejército ruso y le pidió a la periodista hacerse cargo de su hija. Esta llegó a España ya, con otra compañera de la periodista, que aún se mantuvo en Ucrania un tiempo adicional.
“El viaje se hizo largo y había muchos sentimientos encontrados”, comentaba la joven profesional, acordándose de sus compañeros ucranianos: “Fueron momentos complicados hasta el últimos segundo, cuando estábamos dejando Leópolis se produjeron el segundo y el tercer ataque a la ciudad”.
Macaluso también ha hablado de los comentarios recibidos durante su tiempo como enviada: “Me han expresado mucho cariño, pero también entiendo las críticas. Quiero aclarar que esto no estaba en los planes de nadie, mucho menos en los míos. No sé si hay secreto o éxito, pero siempre intenté comunicar desde el corazón, es la razón por la que soy comunicadora”, reflexionó con Patricia Pardo. “Si mis sentimientos se vieron a través de la pantalla y a raíz de eso mucha gente logró entender y empatizar con la historia, bienvenidas sean las críticas”.
“Nosotros no somos la noticia, pero yo involuntariamente pasé a ser noticia, es lo que me pasó. Somos humanos, tenemos familia y en momentos de tanta tensión los sentimientos evidentemente afloran”, agregó, recalcando que no se considera una reportera de guerra. Esta, explica, había sido su primera experiencia de este tipo. De cara al futuro, aprovechaba para esperar seguir “cerca” de Telecinco.
La presencia en el plató de Macaluso se producía después de su reciente cumpleaños, que no llegó a celebrar, por el que el magacín le tenía preparada una sorpresa: tanto Stephan, el cámara con el que ha trabajado en Ucrania, como Max, su fixer, le han grabado mensajes de felicitación. “Ha sido un placer haberte conocido. Durante estos días nos hemos convertido en una familia de verdad. Quiero darte las gracias por todo lo que has hecho por nosotros, por nuestra familia, por Ucrania. Te deseamos lo mejor, que la paz te rodee”. También recibió un mensaje grabado de su padre, con el que se emocionó especialmente.
