Telecinco ha presentado este lunes En el nombre de Rocío, la docuserie en la que Rocío Carrasco ha relatado la polémica relación que ha mantenido siempre con su familia. La producción iniciará su emisión regular a partir de este martes 6 de septiembre en el prime time de la cadena, tras haber concluido en Mitele Plus, donde ha estado únicamente a disposición de los suscriptores de la plataforma.
La audiencia de Mediaset ha podido ver ya los dos primeros capítulos iniciales -el último el pasado viernes día 3-; por lo que serán el tercero y el cuarto los siguientes en ofrecerse en abierto, a partir de las 21:55h. Cada semana, el canal seguirá programando de manera gradual los siguientes episodios, que se analizarán en un debate paralelo liderado por Sandra Barneda.
“Es un placer tener la responsabilidad de formar parte de este proyecto”, ha afirmado la presentadora en la rueda de prensa a la que ha acudido verTele y en la que también han estado presentes la propia Carrasco y Anaís Peces, directora del formato. El programa supondrá su reencuentro con la protagonista del título siete años después de que coincidieran en Hable con ellas, espacio en el que se hicieron amigas.
“Me reencuentro con una Rocío distinta a la de entonces”, ha reconocido la periodista, que ha avanzado que “mucha gente va a sentirse identificada por muchos motivos”. El primero en apuntar ha sido el “desmembramiento familiar, por cómo cuando muere una madre o un padre el dolor se que queda para siempre”.
El segundo y más importante, “las herencias”, por cómo “rompen familias. Hay que dejar de blanquear el término de la familia en sí, porque pasa de todo”. En la misma línea se ha situado Peces, que ha definido En el nombre de Rocío como “una historia universal”. No obstante, ha indicado que “tiene muchas más implicaciones”, de ahí a la importante labor de investigación que ha realizado su equipo: “Rocío ha sido generosa por confiarnos tanta documentación y hemeroteca”. De hecho, ha compartido que ha habido personas que, pese a no haber querido aparecer en el documental, “se han convertido en fuentes indispensables”. Testimonios por los que, según han asegurado, “nadie ha cobrado”, descartando un posible interés económico.
“'En el nombre de Rocío es la contestación a años de mentiras”
Al cumplirse dos años desde que “entrara en casa” de Rocío, la directora la ha descrito como “una mujer diferente. Gracias a ello ha podido enfrentarse a esta temporada con mucha más entereza, de forma concisa y contundente”. Carrasco ha reaccionado afirmando que se siente “con tranquilidad e impaciencia” y que “solamente puedo dar las gracias”. Tanto a la audiencia que va a “volver a escucharme en una faceta diferente dentro de mi vida”; como a los compañeros de la producción, por haberse “convertido en mi familia. Se han dejado la piel en encontrar, confrontar, contrastar, y bucear en un montón de archivo privado”.
Un trabajo con el que igualmente “poner en valor y en alza a Rocío Jurado y a Rocío Mohedano, que era la menos conocida”. A modo de resumen, ha declarado que “En el nombre de Rocío es simple y llanamente la contestación a muchos años de mentiras”.
La docuserie se grabó durante doce días seguidos, en cuyo proceso Peces ha confesado que “más que sufrimiento ha habido mucha comedura de tarro. Había que explicar todo de forma muy clara sin perder la hondura de lo que estábamos contando”. Para la protagonista esto implicó que “se mezclaran muchas emociones porque hay vídeos de tus padres, tuyos de pequeña... Hay una parte de sensibilidad, amor y nostalgia por los tiempos vividos”. Circunstancia que llevó a que al acabar y “ver que estaba hecho, que lo habíamos parido, no lloré de pena, sino de agradecimiento y emoción”.
En el nombre de Rocío es simple y llanamente la contestación a muchos años de mentiras
Todavía queda camino por delante, ya que Carrasco estará presente en plató para comentar los episodios. “No me arrepiento de nada de lo que he dicho. Puede que lo haga de cosas que no he dicho”, ha adelantado. De hecho, ha manifestado que “legalmente no me ha limitado nada ni nadie. Sé donde están mis límites”. Aquello que ha revelado haberse “guardado” ha sido, “aunque igual mañana cambio de opinión”, “porque si la gente a la que pertenecen no lo han dicho, a lo no debería hacerlo yo”.
“Mi trabajo tendría que ser anecdótico”
Barneda se suma a En el nombre de Rocío tras grabar las nuevas ediciones de La isla de las tentaciones y encarándolo “como cualquier otro formato”. “Sé que cometeré errores, aciertos, que recibiré elogios, críticas constructivas y destructivas. Lo entiendo. A veces me cuesta como ser humano leer según qué comentarios pero no me preocupa de más. Forma parte de nuestro trabajo”, ha explicado. “Lo enfoco con toda la humildad y respeto por el trabajo que hay detrás”, ha añadido, “mi trabajo debería ser anecdótico porque aquí hay cosas más importantes. ¿Me equivocaré moderando? Sí, porque es directo. ¿Habrá cosas que haré bien? También”.
“Como persona cada vez voy más hacia la conciliación, me gusta más que el conflicto”, ha declarado por cómo la propia temática de la docuserie le ha llevado a reflexionar sobre lo que las herencias generan. La periodista ha confesado no ser “una apasionada de la música de Rocío Jurado”, pero cómo igualmente admiraba su figura y cómo “quería mantener a toda su familia en unidad. Por desgracia ocurre que cuando muere un miembro puntual, el ecosistema emocional se mueve emocionalmente. Y si hay una herencia, más”.
La presentadora sustituirá en su labor a Carlota Corredera, sobre lo que ha declarado que “en mi corazón no existen los enfrentamientos. Hablé con ella y me dijo 'qué guay que lo hagas tú'. Y ya está, nuestra profesión es así, hay que quitarle esa trascendencia”.
Preguntada por su vínculo personal con Carrasco, ha asegurado que “el cariño personal que nos une es obvio, pero mi implicación y profesionalidad están sobradamente demostradas. Hasta he coincidido en plató con la que era mi pareja, por lo que con alguien con quien me une una relación de amistad, seré igual. Como en otros programas, cometeré errores porque soy humana”. “No me importa implicarme”, ha afirmado, “a veces en directo me enfado y me emociono con cosas, pero no será por estar protegiendo a Rocío”.
La hija de Rocío Jurado ha aprovechado la tesitura para revelar que, cuando le informaron de que sería Barneda quien liderara los debates, sintió “alegría y pena, porque no estaban ni Carlota ni Jorge [Javier Vázquez]”. A la vez que “una felicidad muy grande y muchísima ilusión porque Sandra ha sido una persona muy importante para mí al sacarme una sonrisa y preocuparse por cómo estaba. Trabajar con alguien así es maravilloso”.
“El formato no es responsable de cómo la gente actúe”
La emisión de Rocío, contar la verdad para seguir viva marcó un antes y un después a la hora de abordar a nivel televisivo la violencia machista. Desde entonces, su protagonista recibió incontables mensajes de apoyo, y también de descrédito. Carrasco ha sostenido que quienes le han acusado de haber realizado la docuserie “desde el odio o por dinero”, han usado “el argumento fácil para el que no tiene otro al que agarrarse. El odio no es un sentimiento que experimente o haya experimentado. Y por cuestión de dinero lo mismo”. “Es lo que se usa cuando te vienen de frente, te dan un hostiazo y no tienes forma de rebatirlo. Es la única argumentación de los mediocres que no tienen una forma de contrarrestarlo”, ha zanjado.
Del mismo modo se ha postulado en cuanto a los bulos que se han lanzado sobre ella y los programas que se han hecho eco de estos: “A la Rocío de antes le hubiesen seguido haciendo muchísimo daño. La de hoy está aquí, esperando sin ningún tipo de problema al que quiera venir a confrontar”.
Otra de las reflexiones de Carrasco ha girado en torno a cómo “el formato no es responsable de cómo la gente actúe y las mentalidades arcaicas, progres o modernas que tenga cada uno”. “¿Me parece normal que haya habido una división social? No me extraña porque en este país sigue habiendo mentalidades retrógradas, machistas y que no miran los por los derechos que tendrían que mirar. Ojalá no hubiera habido esa división, pero no por mí, por los derechos humanos”, ha concluido.
Pedro Carrasco, protagonista de los próximos episodios
Los capítulos 3 y 4 de la docuserie, que serán los que se emitan este martes, rendirán homenaje a la figura de Pedro Carrasco. Según avanza Mediaset en un comunicado, relatará cómo la aparición de Raquel Mosquera, con la que acabaría contrayendo matrimonio, cambiaría su vida; y narrará las primeras diferencias por la herencia del campeón del mundo de boxeo en el seno de la familia y, en especial, con su viuda. Barneda, que ya ha visto ambas entregas, ha lamentado lo “ingratos que somos con la gente que consigue logros en este país, en este caso un deportista de élite”.
Además, ha alabado que “alguien con un éxito tan brumador decidiera dar un paso atrás, cuidar de su hija y que ella lo fuera todo. Era muy moderno en este momento, fue pionero en términos de igualdad. Me hace ilusión que empecemos hablando de él porque es uno de los grandes desconocidos. También porque está bien hablar de la figura de los padres, que se hace poco”.
Pedro Carrasco fue pionero en términos de igualdad
Recordamos que Mediaset ha cambiado en varias ocasiones su estrategia de emisión de En el nombre de Rocío, ya que en un principio se planteó que se lanzaría de manera exclusiva en Mitele Plus. Sin embargo, ofreció en abierto sus dos primeros episodios el pasado mes de junio para contrarrestar a La Voz Kids y, no sería hasta tres meses después, cuando el segundo ha regresado a la parrilla. Sobre el rendimiento que la docuserie ha tenido en la plataforma, como posible motivo por la decisión de llevarla a Telecinco, la compañía ha respondido que “sus datos no son públicos”.
“Podríamos hacer un reencuentro de 'Hable con ellas' cañero”
Más allá de En el nombre de Rocío, Barneda y Carrasco han planteado hacer “un reencuentro, pero cañero, de Hable con ellas. Estamos en momentos muy distintos y sería muy divertido volver a ver al quinteto”. Un grupo que, recordamos, completaron Yolanda Ramos, Marta Torné y Alyson Eckmann. “Fue una locura pero nos hemos quedado con muchísimas cosas. Tenemos grandes anécdotas”, ha añadido la periodista, a la que le gustaría que fuera similar al de Friends.
“Llegamos a fantasear con ello imaginando que nos volverían a llamar para hacerlo”, ha sumado Carrasco. Ambas han valorado que verían con buenos ojos el regreso del formato, incluso si fuera sin su colaboración.