Miki pone rumbo a Tel Aviv: “He soñado muchísimas veces escuchar 'Spain 12 points'”
A escasas horas de que la delegación de RTVE embarque en un avión rumbo a Tel Aviv, Miki Núñez, el representante español en el festival de Eurovisión, se ha despedido de los medios de comunicación con expectación e ilusión por firmar un buen papel con La Venda.
“Estoy la mitad de nervioso de lo que podría estar”, ha confesado el artista, que ha estado acompañado en todo momento por las voces del certamen en La 1, Tony Aguilar y Julia Varela. El locutor radiofónico, que repite por segundo año consecutivo desde la cabina de comentaristas, ha querido poner en valor la actitud e implicación del representante con todo lo relacionado con Eurovisión: “Es admirable, tienes la música en las venas”, ha destacado.
“Enfrentarte a Eurovisión cada año es algo nuevo. Este tenemos una energía muy nueva y muy joven con Miki”, ha apuntado por su parte Varela, que afronta su quinta experiencia eurovisiva.
El concursante de OT 2018 ha relatado lo “intensos” que han sido los meses previos al festival. “Hemos ensayado muchísimo, hemos hecho promoción, hemos viajado... Lo que nos gusta es cantar y vivir de la música, y por muy cansado que sea es muy bonito”.
“Todo lo que ocurre en el escenario es muy 'yo'”
Mañana pondrá por fin rumbo al Israel, con la puesta en escena ya preparada. Sobre el director artístico de la misma, Fokas Evangelinos, ha explicado que el griego es “muy perfeccionista. Estudió mucho mis movimientos en la Academia de OT para que todo fuese orgánico. Todo lo que ocurre en el escenario es muy 'yo'. Es una puesta en escena novedosa, grande, colorida y un non-stop”.
Precisamente durante su estancia en Operación Triunfo conoció a la directora musical, Mamen Márquez, que está siendo también “muy exigente con el tema vocal, es lo que toca”.
Miki ha confesado ante los presentes en la rueda de prensa que, aunque no quiere ser “gafe”, ha soñado “muchísimas veces con escuchar 'Spain 12 points'”, y ha hecho una promesa por si se lleva la victoria en Tel Aviv: “Me tatuaré una venda”.
El de Terrasa ha asegurado que antes de salir a cantar, su ritual consistirá en darse ánimos: “Es lo que necesito y lo que haré (...) No llevo amuletos, de eso se encarga mi abuela, que pone muchas velas”.
Por su parte, como estrategia para asimilar la experiencia en la que está inmerso, está siguiendo el consejo de su madre. “Me dice que tenga 10 minutos al día para reflexionar sobre lo que me pasa, para ver dónde estoy y por qué. Para que no se me suba”, ha compartido.
“Tenemos un grupo de WhatsApp con todos los representantes”
La celebración del certamen no será la primera vez que se encuentre con sus rivales, ya que ha coincidido con varios de ellos en las Pre-Parties europeas a la que ha asistido. La acogida local en Amsterdam fue muy buena, antes de que, entre otros destinos, la comunidad eurofan española disfrutara de la gran fiesta con Miki como triunfador el pasado mes de abril.
Parece que el tour ha dado sus frutos. “Tenemos un grupo de Whatsapp con todos los representantes, donde nos vamos contando cosas y hablando sobre los ensayos”, ha narrado el catalán. El compañerismo generado hace que, según ha comentado, no se vean “como rivales y eso es muy guay”, aunque sí tiene sus favoritos: “Veo súper potentes a Suecia e Italia. Son las que más me gustan y las que veo más arriba”.
La recepción a La Venda ha sido muy positiva en todos los rincones por los que ha pasado el tour, “mejor de lo que esperaba. Hemos actuado los últimos siempre para cerrar la fiesta”, ha apuntado Miki. A ese respecto, Varela ha querido poner en valor a nuestro representante: “Eurovisión te va a dar mucho, pero tú también vas a aportar mucho al festival, un soplo de aire fresco que va a gustar mucho en Europa”.
“Me da igual quedar último si estamos orgullosos del resultado”
“No sé si soy el tapado, pero sí que espero serlo. Quiero que cuando vean la puesta en escena flipen, creo que a la gente le va a gustar mucho la propuesta”, ha añadido Miki, optimista. Para él, lo “único” que le sentaría “mal” sería “volver sin que estos cuatro meses de trabajo se vean reflejados en esos tres minutos”. “Me da igual quedar último si estamos orgullosos de lo que hagamos en el escenario”, ha aclarado.
Desde que fuera elegido para ser el representante español, ha tenido la oportunidad de hablar con compañeros que ya saben lo que es participar en el certamen, como Alfred, Manel Navarro, Betty Misiego, Massiel o Micky. “Todos me han dado consejos”, ha celebrado, “Salomé me ha dicho que sea 'el rey'”.
El “eclipse” de Madonna y el posible regreso de Eurojunior
El próximo 18 de mayo compartirá escenario con Madonna, artista sobre la que ha indicado que no cree que vaya a hacer que los demás queden “eclipsados”.“Será una actuación más de la que disfrutaremos como niños”. Varela ha opinado que la presencia de la Reina del Pop va a dar “una dimensión al festival que le favorece”.
“Mi primer karaoke fue Eurojunior”, ha recordado Miki. Bordás, por su parte, ha explicado que el programa “se está valorando un año más, pero no se ha tomado ninguna decisión”.
La maleta rumbo a Tel Aviv
¿Qué va a llevar el catalán a Israel de equipaje? El cantante ha respondido que “cada año hay un eurodrama, y este año son las maletas”. Eso sí, lo que asegura que no van a faltar son “la gorra, los in-ears y el desodorante”.
Entre los bultos con los que viaje estará el vestuario, que está ya cerrado. “No se puede desvelar nada, pero es muy cómodo. Me permite desenvolverme en el escenario”, ha adelantado.
Quienes no parece que vayan a unirse a su aventura son sus compañeros de Operación Triunfo. “Hablo con ellos cada día, pero no creo que vengan porque hay poquitas localidades y tengo que llevarme a mis bailarines”, ha confesado riéndose. Entre ellos se encuentra Mikel Hennet, ex de D'nash que ya representó a España en el festival en 2007, quien ha manifestado que le hubiera “encantado llevar en mi año lo que llevamos este. Es una puesta en escena muy novedosa. Ayer lloramos en el último ensayo”.
“En ningún momento se planteó el debate de ir o no ir”
La despedida del representante Español ha estado este miércoles acompañada del boicot a Israel, que ha perseguido la “charanga” eurovisiva por Madrid al grito de “¡mientras cantan están asesinando!”.
Las protestas han tenido lugar en el recorrido organizado por RTVE, en el que los bailarines y comentaristas del próximo festival han paseado por algunas calles de la capital cantando 'La Venda'. Un grupo en el que sin embargo no ha participado el catalán, que se ha quedado en el hotel “atendiendo a medios, porque había demasiados”. Aun así, las críticas no han impedido al equipo llegar a la sede de la rueda de prensa a la que ha acudido Vertele.
A la pregunta sobre si la polémica que acompaña al país anfitrión va a afectar al funcionamiento del Festival, Miki ha desviado el debate señalando que “lo bueno de Eurovisión lo dice, Song Contest. Vamos a ir a hacer música y da igual lo demás”.
La Jefa de la Delegación Ana Bordás se ha sumado al comentario del cantante advirtiendo que “la obligación de los representantes es preservar el carácter no político del festival”. “Hemos participado desde 1961 y en ningún momento se planteó el debate de ir o no ir”, ha explicado la directiva. “Es una fiesta musical que une a los pueblos y tenemos claro que vamos”, ha zanjado.
