25 años de 'Saber y ganar' en La 2 con Jordi Hurtado: el merecido homenaje de TVE a un concurso que marca su historia
Saber y Ganar conmemora este jueves un nuevo aniversario en TVE. Decimos uno nuevo, porque nos hemos acostumbrado a los festejos periódicos en torno al veterano título, buque insignia de La 2 y el decano del género de los concursos en España. Esta vez son 25 las velas que sopla el equipo comandado por el realizador Sergi Schaaff y encabezado por Jordi Hurtado, con un especial inédito en el prime time, con famosos y fuera de plató.
No hace tanto, en mayo de 2018, el formato alcanzaba las 5.000 ediciones; en octubre de 2020, se hacía un especial por el afortunado número 5.555 de programas emitidos; en julio de 2021, por su lado, se entregaba el premio más alto de su historia, 179.000 euros, al “magnífico” David Díaz. Llevamos tantos años notificando especiales por cada efemérides que Saber y ganar pareciera existir en un estado continuo de celebración, algo por otro lado comprensible para un espacio como este, tan inalterable en el tiempo como su propio presentador.
Las cifras de un programa inamovible en parrilla
El calificativo de “histórico” hace tiempo que se amolda bien para hablar de él, aunque ahora que cumple un cuarto de centuria en emisión ininterrumpida podemos corroborar esta naturaleza crucial en el relato de la televisión española. Algo, si cabe, más meritorio teniendo en cuenta su ubicación en una cadena, la segunda pública, destinada por norma a un público más minoritario; y en una franja, la sobremesa, colapsada por informativos, magacines y seriales en feroz lucha diaria. Y más aún si pensamos en que cuando nació lo hizo solo con un margen de apenas tres meses por delante, a modo de test.
Las mayores dificultades las superaron en sus inicios, cuando antes de nacer Teledeporte como canal, el programa tenía que interrumpir su emisiones por acontecimientos deportivos de alcance como el Tour de Francia. Cuesta pensarlo ahora, cuando desde hace diez años Saber y ganar se extiende a los siete días de la semana, manteniéndose así inamovible de la parrilla.
Así se explican esos números con los que se adorna la cita: 3.000 concursantes, 5.880 programas diarios emitidos, y otros 942 en el fin de semana (no queda tanto para llegar a los 1.000 y tener, por tanto, otra celebración por delante), lo que se traduce en más de 6.820 entregas en total, 4.000 horas de emisión y 450.000 preguntas formuladas. Así se resume el pasado glorioso de un programa que, como vaticinaba el director de RTVE Catalunya Oriol Nolis, “tiene presente y mucho futuro” en tanto que ha sido capaz de adaptarse a las épocas y a las evoluciones del consumo televisivo sin perder por ello su identidad.
La marca que “ordena” el contenido de La 2
Antes de afrontar ese futuro, conviene aprovechar el presente para poner en valor lo conseguido hasta la fecha. Ya es costumbre, desde hace largos años, que Saber y ganar se mantenga como el programa de mayor cuota de La 2 a diario, con unas cifras estables que duplican o incluso triplican las globales de la cadena.
En los últimos años, La 2 ha encontrado marcas de solvencia y con públicos fieles en el horario nocturno. Es el caso de Cachitos de hierro y cromo, que acumula 10 temporadas en su haber y que acaba de saltar al access prime time de La 1 con una versión reciclada de sus anteriores tandas de episodios: sus medias oscilan entre el 4% y el 5% de cuota de pantalla, aunque son sus versiones de Nochevieja las que han cimentado la popularidad del formato. El contenedor cinematográfico Días de Cine Clásico también goza de una buena salud, y más allá de los altibajos según el título en cuestión ofrecido, supera por costumbre las medias de su jornada y mensuales de la cadena. Otros espacios como Órbita Laika o El condensador de fluzo están también asentados, aunque no destaquen tanto.
Los programas de mayor éxito como Cachitos compensan al resto y establecen una parrilla nocturna fácil de identificar. Por eso lo que hace Saber y ganar es tan importante. Porque lleva sosteniendo la programación diurna desde hace más de dos decenios, siendo capital para dar identidad a La 2, para organizar sus contenidos (ahí está el arrastre que reciben los Grandes documentales de la cadena) y sustentar las bases de lo que ha de pretender la cadena. Cultura, arte, danza, historia, ciencia... Todos esos contenidos que buscan, en resumen, facilitar una comprensión del mundo a su espectador, condensándose en las preguntas y pruebas de un espacio sinónimo ya de la marca de TVE.
Al fin y al cabo, los 25 años de Saber y ganar son ya cerca de la mitad de los 55 que tiene La 2 desde su inicio. Normal que desde RTVE se bromee abreviando como “la de Saber y ganar” a su segunda señal. “A nadie se le escapa que es el programa de más audiencia de La 2, su médula espinal, su ADN. Está hecho por un equipo muy comprometido con RTVE, y en especial con La 2”, sintetizaba Samuel Martín Mateos, director del canal.
El reconocimiento del salto al prime time
Pasar al prime time supone una oportunidad única, un hito como ya lo fue, en su vigésimo aniversario, colarse en el Telediario de La 1 para que Marta Jaumandreu les formulase una pregunta en directo a los participantes. Ahora, esta fiesta televisada recuerda a las que habían tenido en el pasado otros insignes concursos que afrontaban acontecimientos de gran interés.
No hace tanto, por ejemplo, del ansiado triunfo de Pablo Díaz en Pasapalabra, que se llevó los 1,8 millones acumulados en el bote en el horario estelar, con una programación nocturna dedicada por entero a la gesta, que incluso implicó retrasar de forma extraordinaria el inicio de El Hormiguero. La misma Antena 3 había hecho algo parecido dos años antes, en julio de 2019, al entregar el gran premio de ¡Boom! a Los Lobos, convirtiendo al formato de tarde en su gran baza de prime time.
En este caso, no se celebra la gesta de un particular, sino la de la propia existencia del formato, que no ha precisado de marcadas personalidades en su nómina de concursantes para asegurarse el interés del público. Mas al contrario, esta ha sido la cuna de la que han surgido buena parte de los grandes concursantes de la televisión de los últimos tiempos: los mismos Lobos que luego triunfaron en ¡Boom! se conocieron tras su paso por La 2, sin ir más lejos; pero también hicieron aquí sus destacados pinitos Javier Davila, que se lo puso difícil durante 76 entregas a Pablo Díaz en Pasapalabra; o Ruth de Andrés, ahora poniéndoselo difícil a los aspirantes de El Cazador de TVE.
Saber y Ganar es un formato que, aunque evolucionando en su mecánica, ha sido fiel siempre a sus principios, incluso a su plató y a su estética, más allá de puntuales cambios como aquellos obligados por la crisis del coronavirus (recordemos que el concurso tiró de reposiciones durante el grueso de semanas de confinamiento por el estado de alarma). Eso hace aún más especial la decisión de programación y el vestido con el que el espacio se presenta en su 25 aniversario.
Jordi Hurtado, un presentador para la historia
El salto al prime time también es un reconocimiento para el presentador, alcanzado ya el estatus de icono gracias a un programa que en su día significó su vuelta a televisión tras algunos años de ausencia de las pantallas: su anterior crédito data de 1994, cuando afrontó el efímero ¿Cómo lo hacen?. Su carrera ha ido muy ligada a la de Schaaf, su “descubridor” en los años ochenta en otro concurso, Si lo sé no vengo. “Me subí a este barco como si se tratase de un trasatlántico. Sabía que navegaría bien, porque estaba él”, reconoció en hace escasos días en el espacio Memoria de delfín (RNE).
La clave para el catalán es que “cada programa sea como aquel primer programa”, añadía, más allá de los incesantes cambios que se han producido a su alrededor. “La vida va pasando y cuántas cosas han sucedido en el mundo”, reflexiona: bajo su mando, el programa arrancó dando premios en pesetas, y desde entonces ha visto desde Sant Cugat la entrada del siglo XXI y la implantación del euro, el cambio en la comunicación con los móviles y de Google, que ha transformado la manera en que los concursantes consultan y se informan antes de arrancar las grabaciones; y las nuevas formas de consumo de televisión: “Me he oído diciendo 'La 2' y hora digo 'RTVE Play', porque le estoy diciendo al espectador que nos vea cuando quiera, cuando le vaya bien”.
Tanto ha variado y evolucionado todo, y la gracia es que no solo Saber y ganar no ha variado en lo básico (“hay pruebas que ahora no podríamos hacer”, explicaba en RNE sobre fragmentos musicales en La parte por el todo, fáciles de adivinar ahora gracias a aplicaciones móviles), sino que él parece no hacerlo para su audiencia. A excepción de una baja médica que lo apartó de las pantallas entre abril y mayo de 2016, en las que le sustituyó con honores Luis Larrodera, Jordi Hurtado no se ha apartado de sus labores ni ha variado su entrega y disposición exultante. Eso no solo ha dado pie a continuas chanzas sobre su eterna juventud, sino a que él mismo haya jugado con su condición de personaje atemporal con su cameo en El Ministerio del Tiempo.
Para comprobar si ha envejecido de verdad, La 2 culminará la programación nocturna de este jueves ofreciendo la primera entrega de Saber y ganar, originalmente vista el 17 de febrero de 1997, al concluir la especial. Sin embargo, más allá de la broma, si algo indican esos comentarios, aparte del cariño hacia la persona, es su valor como presencia sin la que no es posible entender la televisión española.
Las claves del especial 25 aniversario
La Paloma, una de las salas con más historia de Barcelona, será el marco para disfrutar del espectáculo, en el que Hurtado estará acompañado por cuatro figuras míticas de la historia del espacio, empezando por Juanjo Cardenal, la voz del programa hasta su jubilación el pasado verano; y su relevo Elisenda Roca; así como Pilar Vázquez. Todos ellos comentarán curiosidades y anécdotas de su labor.
Además, el programa recibirá la visita de seis presentadores con importante experiencia en concursos: Ion Aramendi, que ahora disfruta del buen momento de El cazador y La noche de los cazadores en La 1, Llum Barrera (Agafa'm si pots en IB3), Carolina Ferre (Atrapa'm si pots), Antonio Garrido (Identity, El duelo, Gente de mente), Goyo González (Atrápame si puedes) y el antes comentado Luis Larrodera, que comprobarán en primera persona cómo se sienten los concursantes en el atril. Todos ellos participarán en varias pruebas míticas, como Cada sabio con su tema, una Última llamada especial con temática cinematográfica o una Parte por el todo musical.
También desfilarán por el especial los concursantes más destacados que han pasado por el programa: los “magníficos” David Díaz, Manolo Romero, Óscar Díaz, Ana Pérez, José Manuel Dorado o Víctor Castro. Estos recordarán alguna de las anécdotas que vivieron durante su paso por el concurso y desvelarán cuáles son sus pruebas preferidas, o las más temidas, y recordarán los momentos más divertidos en una selección de vídeos.
A estos invitados hay que añadir a Arkano, ya una presencia habitual en programas de TVE, que improvisará unas rimas con conceptos relativos al concurso. Además, diferentes personalidades de la sociedad, cultura y deportes felicitarán a La 2 y al equipo por estos 25 años de emisiones.
Después de la celebración, La 2 terminará la noche con dos reposiciones significativas: el primer programa, como ya hemos comentado, y el número 5.000, emitido el 1 de junio de 2018. Una hora y media en la que responder a un éxito sin igual.