Samanta Villar puso a Cesc Fàbregas frente al espejo: de su trauma personal a la idea de retirada
Tras abrir temporada con Ruth Lorenzo, Samanta Villar cambió este martes los escenarios por los estadios para viajar a los orígenes de Cesc Fàbregas en la segunda entrega de 'Samanta y la vida de...'.
Las cámaras de Cuatro se desplazaron hasta Arenys de Mar, en Barcelona, para descubrir los detalles desconocidos de la carrera del futbolista, campeón del mundo y de Europa con la Selección Española y actual jugador del AS Mónaco.
El deportista catalán se mostró como nunca antes se le había visto en televisión, sincerándose con Samanta Villar hasta el punto de recordar el peor momento de su vida. “Cuando mis padres separaron lo pasé bastante mal. Tenía 14 años. A día de hoy todavía me sienta mal. Es una cosa que llevo dentro más de la mitad de mi vida. Siempre la tengo aquí, no creo que sea curable”, confesó a la periodista.
“Siempre me voy a acordar que era un domingo por la tarde. Nos llamó mi padre diciendo que había una reunión familiar. Yo pensaba que iban a contarnos que mi madre estaba embarazada, porque todo hasta entonces había sido muy normal en nuestra vida. Pero a mi padre se le veía afectado y mi madre tomó la palabra. Fue un shock”, relató Fàbregas sobre un anuncio que “distorsionó” su realidad. “Era un chico con las ideas muy claras, tenía una vida muy estable y eso rompió mi cabeza. Mi hermana era diferente porque ella se adapta. Pero para mí fue un problema muy grande”, explicó.
Su fichaje por el Arsenal con 16 años y otras decisiones importantes
El futbolista reveló que su pasión por el deporte le ayudó a desconectar y también a cambiar el rumbo de su vida cuando, con 16 años, se mudó a Londres para fichar por el Arsenal. “Yo el día que peor lo pasé fue cuando se fue. En el aeropuerto me eché a llorar. Aunque fuimos culpables de impulsarlo a irse, dolió mucho. La gente me decía que cómo le iba a dejar que se fuera tan joven. Pero iba a estar bien cuidado”, contó por su parte Nùria Soler, madre de Cesc, con un relato que emocionó a la propia Samanta Villar.
Madre e hijo se desplazaron después a la peluquería de su infancia, donde el actual jugador del AS Mónaco habló sobre las decisiones importantes que ha tenido que tomar a lo largo de su carrera. Una de ellas fue irse del FC Barcelona, el club de su vida, al Chelsea: “Hablé con José Mourinho y me gustó mucho lo que me dijo”.
A sus 33 años, Fàbregas reflexionó en voz alta sobre la idea de colgar las botas: “No pienso en la retirada pero sé que va a pasar pronto, desgraciadamente. Aunque no siento esa presión de retirarme ya, empiezo a ver o pensar en cosas que dos o tres años atrás no pensaba”. Cuando esto ocurra, dice, sentirá mucha “libertad mental”. “Llevo viviendo toda mi vida preparándome para el próximo partido. Cuando me retire, el tiempo que yo quiera lo voy a dedicar a mi familia y a mí mismo”.
Samanta Villar puso al futbolista frente al espejo para hacer balance de su vida: “No ha habido nada fácil. Ha habido decisiones difíciles y momentos muy difíciles. Habría cambiado muy pocas cosas”. A su 'yo' actual, le diría lo siguiente: “Estás llegando a un final de etapa. Disfruta, trabaja como siempre en este gran sueño que has alcanzado, y sigue demostrando que esto aún no se ha acabado”.
Su actual vida en Mónaco
Más allá de sus orígenes, Cuatro también se desplazó hasta Mónaco para conocer a Daniella Semaan, la mujer con la que lleva más de diez años y tiene tres hijos.
La pareja ha encontrado en Mónaco un lugar tranquilo donde pueden pasar más desapercibidos que en España o Inglaterra y le enseñaron a Samanta Villar cómo es su rutina familiar. Al contrario de lo que muchos puedan pensar, Cesc aseguró que llevan una vida poco ostentosa. Su infancia fue “de una familia humilde” y procura que la familia que ha formado ahora siga con esos valores.
“Es verdad que, no nos vamos a engañar, tenemos dinero y podemos hacer casi todo. Pero hay ciertas cosas que nunca me han motivado. Por ejemplo, no tengo relojes, joyas o coche propio”, reveló.