Este domingo, Secret Story se enfrentaba a las críticas de una buena parte de sus espectadores por permitir las trampas de Luca Onestini y Cristina Porta en las dos pruebas de la gala La noche de los secretos. Una situación que no es nueva en esta primera edición del reality en Telecinco, que ya ha tenido que dar explicaciones a lo largo de estos meses por acusaciones de tongo, y que es casi una norma no escrita del género de telerrealidad.
Con cierta frecuencia, los realities de la TV se ven salpicados por denuncias de “tongo” o “trampas” tras la celebración de alguna de sus pruebas de recompensa o inmunidad. Ocurre en Supervivientes y también en los programas de encierro, donde los millones de ojos de la audiencia acaban viendo más que los de los propios miembros de la organización con la vorágine del directo y la presión de las escaletas. En un formato nuevo, cuyas dinámicas están todavía por pulir, también surgen dudas a menudo con las decisiones del programa, pues no siempre llueve a gusto de todos. E incluso con algún error humano que acaba corrigiéndose tras ser señalado por la misma audiencia en redes sociales.
Esto último es lo que pasó el pasado 22 de octubre, cuando Secret Story paralizó las votaciones semanales después de detectarse un fallo en el recuento de los nominados. Y es lo que habitúa a suceder siempre que las acusaciones y denuncias tengan una fundamentación real, y puedan ser solventadas por la organización.
A continuación, recopilamos algunas de las polémicas más sonadas que están salpicando a la primera edición de La casa de los secretos de Zeppelin TV y Mediaset España, así como las explicaciones que desde el programa se han ofrecido, dado el caso.
Las trampas de Luca y Cristina en dos pruebas
Las críticas más recientes al reality de Telecinco ocurrieron este 14 de noviembre en la gala dominical que presenta Jordi González, e implicaron directamente a Luca y Cristina, la “carpeta” de la casa. La primera de las “trampas” se produjo durante una prueba organizada por la organización para repartir las esferas dejadas por Cynthia, la última expulsada.
Los famosos, separados en grupos de cuatro, tenían que jugar a una versión de los bolos y derribar el mayor número posible sirviéndose únicamente de una pelota unida a la cabeza por una media. Quedaba terminantemente prohibido hacer uso de las manos o de otra parte del cuerpo, y ganarían los dos primeros concursantes en conseguirlo -uno por grupo-. El primero en lograrlo, y por tanto el que se quedó con una de las esferas de su compañera, fue Luca Onestini.
El italiano derribó sus seis bolos en apenas segundos, pero se ayudó de la frente para tumbar dos de ellos. Una acción no permitida en la que en directo nadie reparó, pero que le sirvió indudablemente para ganar la prueba y heredar la esfera de Cynthia. Ni se repitió la prueba ni se han dado explicaciones al respecto, y recordemos que esas esferas serán clave en la final, ya que esconden un premio “extra” e independiente al galardón oficial del reality.
En el segundo reto de la noche, llamado Misión ImPódiumSible, Secret Story propuso a los concursantes subirse a un pequeño pódium. El que más tiempo aguantase se beneficiaría de la recompensa: obtener más pistas para averiguar los secretos de los compañeros y conseguir así sus esferas. Como en la prueba anterior, también hubo trampas. Pero a diferencia de aquella, en estas sí reparó Jordi González en directo. “Cristina les ha empujado a todos para, la muy tramposa, quedarse” [encima del pódium], comentó el presentador sobre la ganadora del reto.
“No se la vamos a dar por válida esta prueba, ¿no?”, se preguntó, y aseguró que la organización iba a revisar los vídeos y comunicaría a los concursantes la resolución en las próximas horas. Sin embargo, solo unos segundos después dieron a Porta como vencedora mientras sus compañeros le reprochaban haberles empujado. También se situó en el centro de las críticas Luca, ya que en el vídeo se ve al italiano usar la fuerza para deshacerse de los demás. En este momento, y más allá del comentario de Jordi González en directo, no se han ofrecido másexplicaciones sobre lo ocurrido.
Cristina, ¿perjudicada en la prueba de inmunidad?
Apenas tres días antes de que el programa se enfrentara a críticas por las citadas trampas en una prueba, otro juego, en este caso el de la inmunidad disputado en la noche del jueves 11, también generó malestar entre los fans. Curiosamente, Cristina Porta volvía a ser la protagonista pero en este caso por haber salido perjudicada. Al menos así lo consideró la audiencia.
Los concursantes debían probar suerte en una prueba de tiro a la diana. La mecánica era la esperable en una prueba de este estilo, aunque cambiando los dardos por bolas repletas de pintura que marcarían el tablero: cada cual contaría con varias tiradas, con las que ir sumando puntos, y según la zona en la que impactara la zona, sumarían más o menos (3, 6, 9 y 12 puntos); para darle más morbo a la prueba, Miguel Frigenti y Lucía Pariente ejercerían de centro de la diana.
En su primera tirada, el lanzamiento de la periodista deportiva se quedó en un punto intermedio entre la zona de los 6 y los 9 puntos, y la organización estimó darle la cantidad más baja. Así las cosas, Porta terminó la prueba con 18 puntos, los mismos que Luca Onestini y que Julen. Los tres tuvieron que jugar una nueva ronda de desempate donde el joven salido de Mujeres y Hombres y Viceversa se proclamó vencedor y adquirió la inmunidad.
Para los espectadores, esto no debiera haber sido así: tirando de grabaciones de pantalla ralentizadas, mostraban la prueba de que el tiro de Porta debiera haber valido 9 y no 6 puntos, en cuyo caso hubiera sido la mejor anotadora directamente y no hubiera hecho falta, claro, ir a un desempate. Por más que la audiencia insistió a través de redes sociales con esta reclamación, desde el programa no se valoró la posibilidad de un error.
Trampas en un juego, esta vez con castigo
Unas trampas que sí tuvieron castigo fueron las de Canales Rivera en el juego de la inmunidad del jueves 7 de octubre. En la prueba, cada concursante debía coger una bola al azar que contenía un número. Este determinaba el orden que debían seguir los famosos para coger una tarta y lanzársela a un compañero. Cada 'tartazo' suponía la eliminación, y la única persona “limpia” sería la ganadora de la inmunidad semanal.
El juego pareció haber transcurrido con normalidad: alzó al torero como ganador y por tanto, como el salvado de las nominaciones. Pero la alegría duró poco. Al inicio del juego, Canales había intercambiado su bola con la de Cynthia, alterando el transcurso de la prueba y eliminando el componente “suerte” que debía ser clave. Como consecuencia, la organización les nominó a los dos.
Antes del castigo, los seguidores del programa ya se habían quejado en redes sociales por lo que consideraban un trato de favor a Canales Rivera. Este había sido votado como “planta” de Secret Story y como penalización, le iban a otorgar tres puntos negativos en las nominaciones. Al optar a la inmunidad, esta pena quedaba anulada automáticamente. Finalmente, el acabó saliendo a la palestra igual.
Paralización de las votaciones por un error en el recuento
Un error que sí fue solventado fue el que ocurrió el jueves 21 de octubre en la Gala 7. Secret Story falló en el recuento de los votos que Luca Onestini otorgó a sus compañeros, y se le sumó el máximo a Sandra Pica, sacándola a la palestra como nominada semanal. El italiano, sin embargo, había repartido sus puntos a Julen, que ya estaba entre el grupo de 'señalados'.
Como consecuencia de este desliz, el reality paralizó la votación del público el mismo viernes 22, y mantuvo las líneas cerradas hasta el domingo 24. Entonces, la organización repitió el proceso y permitió al hermano de Gianmarco volver a nominar de forma directa a otro concursante en la gala dominical. Tras ello, abrió las votaciones de cero para que la audiencia eligiese al nuevo expulsado, que terminó siendo Canales Rivera.
Acusaciones de tongo por otro fallo humano
También dieron explicaciones por las acusaciones de “tongo” y “manipulación” que le salpicaron en la edición de La noche de los secretos del 17 de octubre, cuando una suma incorrecta de los porcentajes ciegos ofrecidos a los concursantes levantó suspicacias entre los seguidores.
Como en cada gala, la cita dominical de Secret Story mostró a los nominados que las votaciones semanales iban tal que así: 58,7%, 33,9% y 4,4%. Pero en esta ocasión, muchos se percataron de que sumando los tres, daba un total de 97% y no del 100% como debería.
Solo un día después, en el formato Última hora que conduce Lara Álvarez, la presentadora quiso aclarar la polémica ante la audiencia, descartando cualquier tipo de tongo y asociándolo a “un error humano”: “Los porcentajes eran correctos, pero la transcripción no lo fue”, explicó la asturiana, ofreciendo a su vez los porcentajes correctos: 60.5%, 35.3% y 4.2%.
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