La séptima edición de MasterChef Junior celebra este viernes 24 de enero su gran final tras en TVE.
Se pone fin así a una edición que se ha alargado más allá de las Navidades, como solía suceder con las versiones infantiles, y que se ha extendido seis semanas en la programación de la cadena pública. Lo que no varía es la mecánica ya conocida: de la primera prueba de la noche saldrá el primer duelista; y, en la prueba exterior, el jurado escogerá al segundo.
Leo, María, Lu y el fenómeno Albert serán quienes se jueguen el trofeo, un premio de 12.000 euros para seguir formándose y un curso de cocina de cuatro días en la Facultad de Ciencias Gastronómicas Basque Culinary Center.
Tamara Falcó, invitada de lujo de la final
Tamara Falcó, ganadora de la última versión emitida de MasterChef Celebrity, será una de las visitas que recibirán los cuatro aspirantes antes de las pruebas. Primero, tendrán que identificar a qué autonomía se corresponden los distintos ingredientes que encontrarán colocados en un mapa. Quien consiga adivinar más obtendrá una ventaja muy importante en este último reto, consistente en reproducir un plato de Pepe Rodríguez Rey, siguiendo las indicaciones que marque, sin interrupciones ni esperas.
El mejor conseguirá la primera chaquetilla para el duelo final y disfrutará con toda su familia de un fin de semana en Port Aventura World, que celebra su 25 aniversario.
Martín Berasategui, en la prueba definitiva
Los otros tres aspirantes estarán luego en uno de los restaurantes más selectos de Madrid, donde competirán por la última plaza en el duelo final. Diego Guerrero abrirá las puertas de su restaurante DSTAgE (dos estrellas Michelin), para contagiar a los aspirantes de su ilusión y su creatividad. Cada uno preparará dos platos de la carta del restaurante de un menú diseñado por el chef. Navajas con dashi de apio y leche de almendras, chawanmushi de foie escabechado y percebe o el postre cebolla, fresas y vinagre, serán algunos de los platos que degustarán 15 comensales: los familiares de los jueces de MasterChef.
A las cocinas solo regresarán dos aspirantes dispuestos a hacerse con el triunfo. Cada duelista contará con 120 minutos para cocinar un menú compuesto de un entrante, un primero y un postre. El jurado exigirá elaboraciones que demuestren evolución, sabores que les conquisten y emplatados estéticos, sin olvidarse de la técnica. El chef Martín Berasategui, de doce estrellas Michelin, seguirá de cerca esta prueba y catará los platos para ayudar al jurado a encontrar al mejor de esta edición