Análisis

Adiós a 'Typical Spanish', el último intento fallido de TVE por reunir a las familias ante el televisor

Typical Spanish llegó el pasado 19 de junio a La 1 de TVE dispuesto a recuperar el espíritu de programas tan emblemáticos de la cadena pública como ¿Qué apostamos? y El Grand Prix. Tan ambicioso objetivo encontraba su justificación en las similitudes que había entre el programa de Frank Blanco y el de los dos iconos de la televisión de los 90, con los que compartía un tono festivo y abiertamente familiar construido a partir de una serie de alocadas pruebas a las que debían enfrentarse los dos equipos de famosos capitaneados por Florentino Fernández y Vicky Martín Berrocal.

Emitidas las 10 entregas firmadas con la productora Shine Iberia (MasterChef), la principal conclusión que se puede extraer de la última apuesta de TVE es que se ha quedado muy lejos de lo que pretendía: reunir a las familias ante el televisor como hicieron sus dos referentes de los noventa.

Un objetivo que TVE lleva años tratando de conseguir y que no logra por mucho que lo intente. Con un promedio del 8.3% de cuota y 988.000 espectadores, Typical Spanish se suma a la larga lista de tropiezos de La 1 al firmar una trayectoria por debajo de la ya de por sí maltrecha media de la cadena pública. Y aunque desde TVE promocionaron la entrega de este lunes como “final de temporada”, cuesta creer que el concurso vaya a volver con una segunda tanda con estos datos en la mano.

Datos de audiencia de 'Typical Spanish':

Programa 1 (viernes 19 de junio): 7.2% y 987.000

Programa 2 (viernes 26 de junio): 7.1% y 856.000

Programa 3 (viernes 2 de julio): 7.8% y 864.000

Programa 4 (lunes 13 de julio): 7.7% y 1.002.000

Programa 5 (lunes 20 de julio): 10.5% y 1.242.000

Programa 6 (lunes 27 de julio): 9.1% y 1.005.000

Programa 7 (lunes 3 de agosto): 8.3% y 951.000

Programa 8 (lunes 10 de agosto): 8.8% y 1.000.000

Programa 9 (lunes 17 de agosto): 8.6% y 1.006.000

Programa 10 (lunes 24 de agosto): 8.3% y 969.000

MEDIA TOTAL: 8.3% y 988.000 espectadores

Cambio de día y el truco de dividir la emisión en dos partes

Estas cifras se presenta, pues, insuficientes, pero más diversas conclusiones en torno al rendimiento del programa y de TVE. Al contrario que otros formatos con baja audiencia, que suelen firmar su mejor dato coincidiendo con el estreno y luego van perdiendo fuelle con el paso de las semanas, Typical Spanish anotó sus dos peores cuotas en sus dos primeras semanas de emisión, siendo a partir de la tercera cuando empezó a mejorar. De hecho, en cinco de las últimas entregas alcanzó el millón de espectadores, algo que no consiguió en ninguno de sus tres primeras entregas.

A esta mejora ayudó el cambio de día que experimentó a partir del cuarto programa, cuando dejó atrás la noche del viernes -donde competía con La última cena de Telecinco- para instalarse en el prime time del lunes, donde se enfrentó al cine de Antena 3 y Telecinco. Al menos hasta el 3 de agosto, cuando la serie turca Mujer aterrizó en el primer día de la semana para acaparar el liderazgo.

Coincidiendo con ese salto al lunes, La 1 también probó a dividir la emisión de Typical Spanish que numerosos formatos aprovechan para dejar fuera del dato global el tramo que peor les funciona y así elevar las cuotas del grueso de la emisión. Ambas estrategias -cambio de día y división de la emisión- contribuyeron a elevar los promedios del concurso, llegando incluso a rozar el liderazgo con su quinto programa, emitido el 20 de julio, cuando se fue hasta el 10.5% y 1.242.000 espectadores y se quedó a solo nueve décimas de la película La intérprete (Telecinco), a la que sí superó en número de televidentes.

'Typical Spanish' tampoco eleva la maltrecha audiencia de La 1

Así las cosas, el problema de Typical Spanish no ha sido de fidelidad, pues ya hemos visto que los cambios introducidos en su emisión permitieron al programa de Frank Blanco terminar mejor de lo que empezó. Lo que ha lastrado al programa han sido otras cuestiones. Para empezar, el verse eclipsado en su arranque por La última cena, que durante las tres semanas que coincidieron en parrilla demostró por qué ha sido uno de los formatos revelación del verano.

Sin olvidar que Typical Spanish ha sido la última víctima de uno de los grandes defectos de TVE en los últimos tiempos: su incapacidad para atraer espectadores más allá de MasterChef y Cuéntame. Salvo estos dos títulos y alguno más, como OT y La caza. Monteperdido, las apuestas estelares de La 1 rara vez superan el 10% en su estreno, lo que hace que sea muy difícil que remonten el vuelo hasta establecerse en el mínimo exigible del doble dígito. Y aunque la razón principal pueda estar en el poco interés que generan dichas apuestas, también hay que tener en cuenta que los problemas de audiencia de TVE afectan por igual al resto de franjas de la parrilla, lo que dificulta la promoción de esas mismas apuestas y que los potenciales espectadores se enteren de su día de estreno.

Al fin y al cabo, los televidentes más fieles a la televisión lineal solo se preocupan por saber la fecha de estreno de aquellas series y programas que llevan años siguiendo. De las nuevas apuestas se enteran principalmente por las promos, pero si la cadena que emite esas promos no tiene un público que las vea, tampoco lo tendrá cuando se emita el programa que promociona.

Esta carencia inicial de audiencia se podría solventar con un buen boca-oreja, pues recordemos que MasterChef, por ejemplo, se estrenó en 2013 con un 11% de cuota y hoy, siete años después, está cómodamente situado en el 20% porque las buenas críticas que cosechó en su estreno se fueron traduciendo en puntos de share con el paso de las entregas. Typical Spanish, sin embargo, empezó mal en una temporada tan complicada como el verano y no consiguió ampliar lo suficiente su base de seguidores en las nueve entregas siguientes, conformándose con el promedio anteriormente expuesto y con haber sacado una sonrisa a los espectadores que consiguió fidelizar. Que en los tiempos que corren, no es poco.