Una semana después, la boda de Elena Furiase sigue dando contenido a los medios. Y es que, el enlace reunió a muchas caras conocidas y, en concreto, a la mediática familia Flores. Sobre esta puso su foco la entrega de este domingo de Viva la vida, que se fijó en uno de los miembros del clan menos conocidos por el gran público: Lola Orellana.
La hija de Rosario Flores y Carlos Orellana ya tiene 24 años y pocas veces ha aparecido en los medios. De hecho, el programa de Emma García mostró cómo siempre que una cámara se le acerca, ella ha rehuido o se ha escondido tras algún familiar.
De esta manera, la nieta de la faraona - que lleva su nombre- ha conseguido pasar desapercibida durante todos casi un cuarto de siglo. En este tiempo, ha estudiado artes plásticas en Londres, se ha especializado en fotografía y es autora de obras con “influencias de Picasso y de Frida Khalo, tremendamente reivindicativas”, según describía un experto en el programa.
Además, Orellana se ha formado para ser ayudante de dirección y con esos conocimiento ha trabajado hasta en Juego de Tronos, según asegura el espacio de Telecinco.
Carlos Orellana, el exmarido de Rosario que participó en 'GH VIP'
El programa también hizo un recorrido por la historia de amor de sus padres que se conocieron poco después de la muerte de Lola y Antonio Flores. Y a los meses nacía su hija, a la que le pusieron el nombre para homenajear a la cantante.
La relación duró poco más de un año y se separaron. El argentino pasó de pedir a los medios que dejaran tranquila a su mujer y a su hija, para acabar participando en GH VIP y contar intimidades de ambos en Crónicas Marcianas.
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