“No es una serie para niños”. Así de claro tiene Ana Pastor que El juego del calamar no es una historia recomendada para los más pequeños de la casa. ¿Por qué? Por su violencia explícita: “Tienen tal cantidad de referencias violentas que no hace falta que tengan más”.
Como ella, muchas personas han advertido de que la exitosa serie de Netflix, vista por millones de personas en todo el mundo, contiene escenas de extrema crueldad. Su creador no lo niega, pero insiste en explicar que no es violencia gratuita sino “figurativa y alegórica”.
“Refleja cómo las personas se encuentran en un callejón sin salida después de no poder sobrevivir en una sociedad competitiva”, declaró Hwang Dong-hyk en una entrevista con a Yonhap News Agency. “Si hay adolescentes que han visto esta serie, podemos discutir con ellos temas actuales de nuestra sociedad. Espero que los padres les digan a sus hijos que las escenas violentas tienen su propio mensaje en la serie”, agregó.
El surcoreano ya ha explicado en anteriores ocasiones que con El juego del calamar pretende hacer una crítica al sistema capitalista. “Creo que el capitalismo ha demostrado sus propias limitaciones en el siglo XXI. Todos se enfrentan a situaciones de competencia feroz y se ven arrastrados al fondo de la sociedad si no logran sobrevivir a la competencia”, dijo, según Yonhap News Agency.
“A través de Gi-hun hago preguntas, como quién creó este sistema de competencia en nuestra sociedad y quién nos arrincona. Esta es la pregunta que quiero hacer a todos los que viven en medio de una pandemia en el siglo XXI”, concluyó.
Tras semanas de incertidumbre, Netflix ha confirmado ya la segunda temporada de El juego del calamar. Lee Jung-jae estará de vuelta en los nuevos episodios dando vida a Seong Gi-hun. “Confirmo que de hecho habrá una segunda temporada. Está en mi cabeza ahora mismo. Actualmente estoy en el proceso de planificación. Pero creo que es demasiado pronto para decir cuándo y cómo sucederá”, declaró el creador a The Wrap.