'El juego del calamar' tendrá su propio reality show en Netflix y abre el casting por sorpresa
El juego del calamar traspasa no solo las fronteras globales, sino también las de su misma condición de ficción. Netflix ha dado luz verde a un reality show basado en el fenómeno televisivo del último año, informa Variety.
El anuncio lo ha realizado Bela Bajaria, Vicepresidenta de Global TV en la compañía, durante su aparición en el festival de Banff World Media Festival. La ejecutiva ha asegurado que “será el concurso de telerrealidad más grande de todos los tiempos”, y pondrá en juego la mayor cifra de un formato reality, con 4,56 millones de dólares, al que tratarán de aspirar 456 participantes. Todo ello en 10 episodios rodados en Reino Unido próximamente, con Stephen Lambert, creado de Undercover Boss o Faking It, entre sus productores.
Junto al comunicado, una primera promo por parte de la plataforma de streaming que resume todas estas claves y que de forma particularmente llamativa abre la veda para el casting, con una página web ya en funcionamiento, SquidGameCasting.com. Por el momento, el casting está abierto a personas que hablen inglés de cualquier parte del mundo.
La regurgitación total de la sátira
No deja de resultar irónico que la violenta sátira sobre la competitividad inherente al sistema capitalista dé pie a un concurso que explota precisamente ese planteamiento de la ficción, en torno a un torneo con juegos infantiles y desafíos cuando menos letales para quienes participen, todos ellos necesitados del dinero del premio para resolver sus problemas económicos.
Desde Netflix, por de pronto, agradecen a Hwang Dong-hyuk, creador de la ficción, “su apoyo ahora que convertimos su mundo de ficción en una realidad con esta competición y experimento social a escala masiva”. Así se expresaba Brandon Riegg, vicepresidente de contenidos documentales y no guionizados de la plataforma.
Entre tanto, cabe recordar que la temporada 2 ha sido recientemente oficializada, durante la Geeked Week de Netflix. Para seguir con las carambolas metacinematográficas, el propio director y guionista de este producto avisó de que estaba desarrollando una sátira sobre el propio éxito que había tenido, de forma insospechada, El juego del calamar. Se titulará The Best Show on the Planet, que viene a traducirse como El mejor programa del planeta.
