Mía es la venganza no ha tenido el impacto que esperaba Telecinco. Ante sus bajos datos de audiencia, la cadena de Mediaset ha decidido no grabar más capítulos y trasladarla a Divinity, donde se emitirá a partir del lunes 17 de julio. Pero se le quiere dar un “final digno” a la serie que protagoniza Lydia Bosch.
Lo ha confirmado el actor José Sospedra. En un mensaje publicado a través de las redes sociales, el intérprete de Mario Costa ha querido tranquilizar a los espectadores con este anuncio sobre el desenlace de la telenovela.
“Hemos hecho todo con mucho amor y aunque hayan cancelado las grabaciones de la serie, hemos grabado un final digno para todos vosotros que seguís viéndonos día a día”, ha comentado en Twitter.
Mía es la venganza se estrenó el 12 de junio en la sobremesa de Telecinco, franja que compartió con las últimas entregas de Sálvame. Actualmente acompaña a Así es la vida en la primera mitad de la tarde.
Protagonizada por Lydia Bosch, Natalia Rodríguez y José Sospedra, la serie ha promediado un 8.1% de cuota de pantalla (828.000 espectadores) en sus primeros 23 capítulos. Son cifras inferiores a las que manejaba Sálvame y no ayudan a Telecinco (11% de share en junio) en su necesaria remontada.
Sus últimas emisiones se habían descolgado por debajo del 7%, haciendo muy poca competencia a La Promesa (La 1) y Amar es para siempre (Antena 3).
Cuando apenas se habían emitido 17 episodios, y a la vista de que el resultado no estaba siendo el esperado, Telecinco ordenó que se paralizara el rodaje. Para entonces se había grabado ya un centenar de episodios, así que Mía es la venganza todavía tiene mucho que contar. Lo hará, eso sí, en Divinity. Y con un final “digno” que buscará compensar al público por estos volantazos de última hora.