'Salvados' emitió este domingo uno de sus programas más estremecedores. James Rhodes, pianista británico de éxito internacional, narró a Jordi Évole sin tapujos su dramática historia de abusos sexuales.
En un entorno musical, aunque ahora vacío, el concertista relató al detalle su suceso más traumático: “Cuando un adulto empuja contra el suelo a un niño y lo folla hasta romperle la espalda como me pasó a mí, la palabra 'abuso' se queda corta”, afirmó recordando la primera vez que le violó su profesor de gimnasia del colegio. “No trató de hacer que pareciera algo bonito o normal. Fue un monstruo muy agresivo”, añadió.
Rhodes afirmó que antes de que comenzaran los episodios de abuso sexual era un chico introvertido que al recibir regalos de su profesor se sentía invencible y especial, pero que un día todo cambió.
“Una profesora me vio con sangre entre las piernas, se lo dijo al director y él contestó que tenía que ser más fuerte”
Durante la entrevista, el pianista explicó a Jordi Évole que mientras sufría las violaciones su entorno “sospechó” e incluso una profesora se lo contó al director, pero este dijo “que no iba a hacer nada al respecto”: “Una profesora me vio con sangre en mi cara y entre mis piernas. Se lo dijo al director y este le contestó que tenía que ser más fuerte”, contó.
“Lo peor es después de la violación, cuando tienes que hacer como si no hubiera pasado nada. Te convierte en su cómplice”, dijo Rhodes, que prefirió guardar silencio cuando era un niño. “Me sentí responsable de lo que pasó a partir de entonces. Estaba tan aterrado que resultaba mucho más sencillo no reconocerlo jamás y seguir hacia delante como si nada hubiera pasado”.
No obstante, esos episodios le marcaron de por vida: “Muchos creen que cuando acaba el abuso físico puedes dejarlo en el pasado y seguir adelante. Es mentira, el tiempo no cura las heridas. Cuando no paras de repetirle a un niño de seis años que si habla morirá, se lo acaba creyendo”, dijo.
Rhodes: “Los medios tienen un problema a la hora de usar las palabras”
James Rhodes aseguró que su motivación para contar su historia es intentar evitar que otros niños sufran lo que sufrió él:“En el mundo hay millones de niños que sufren violaciones. Hay que hablar más de esto o seguirá pasando”.
“Siempre me prometí que si conseguía un micrófono no sólo hablaría de las cosas que me gustan, sino también de las complicadas sobre las que es necesario hablar más”, añadió.“Los medios tienen un problema a la hora de usar las palabras”.
La música, su salvación
Jordi Évole preguntó a James Rhodes sobre los dos factores que siempre dice que le ayudaron tras sufrir las violaciones: la disociación y la música. “La disociación es buena cuando intentas escapar”, explicó.“Escuchando la 'Chacona' de Bach descubrí que la música era mi propio mundo especial donde nada podía afectarme”.