La revista Cuore podría haber llegado a pagar más de 40.000 euros -siete millones de las antiguas pesetas- por la adquisición en exclusiva de las fotos del ansiado desenlace de “Yo soy Bea” que publicó el miércoles pasado.
Según fuentes del sector consultadas por Vertele.com, ésa es la cifra que una de las principales agencias del corazón fijó por las instantáneas que fueron “robadas” durante el rodaje del último episodio, previsiblemente con la colaboración de algún trabajador de la productora (Grundy) o de Telecinco.
De esta forma, se trata de una de las cantidades más elevadas que han llegado a pagarse nunca por fotos de un rodaje de cine o televisión en exclusiva.
Para que nos hagamos una idea, el precio de las fotos filtradas de “Bea” no se aleja mucho de lo que pueden llegar a desembolsar las revistas de corazón por grandes exclusivas de portada, no relacionadas con la televisión, de las que luego se habla en todos los programas.
Éste es el caso, por ejemplo, de la luna de miel de Fernando Alonso y Raquel del Rosario en Hawai, por la que la agencia pudo llegarse a embolsar unos 60.000 euros.
Cantidad similar a la que suelen pagar los programas de corazón
Los más de 40.000 euros que han costado a Cuore las imágenes “robadas” del final de “Bea” también es una cantidad similar, o incluso superior, a la que suelen pagar los programas de corazón de las grandes cadenas.
Es el caso de “La Noria” (Telecinco) o “¿Dónde estás, corazón?” (Antena 3), por una entrevista al personaje más buscado del momento en la noche del viernes o sábado, que últimamente se mueven entre los 15.000 y 36.000 euros, dependiendo del interés y caché del famoso en cuestión.
Si la exclusiva del final de “Bea” a un precio tan elevado le saldrá rentable o no a la revista Cuore es difícil de determinar, como también es discutible el perjuicio o beneficio que esta filtración haya podido ocasionar a Telecinco.
En este sentido, los “spoilers” fotográficos, más que “echar a perder” o “reventar” la emisión de un programa, como indica su término anglosajón, en ocasiones contribuye a generar más expectación y reforzar la campaña de publicidad.