El rector de la Universidad Pablo de Olavide (UPO), Francisco Oliva, ha sido el protagonista este viernes del programa ‘La Rinconada 20/30: LR30 Ideas para un mundo en transformación’, donde ha analizado la actualidad de una institución académica que tiene tan solo 25 años de vida, pero que puede presumir de ser, actualmente, la que atesora un menor número de abandono de los estudiantes.
Entrevistado por el periodista Juan Carlos Blanco, en un acto organizado junto a elDiario.es/andalucia, e introducido por la delegada local de Hacienda, Raquel Vega, Oliva ha protagonizado el ciclo de charlas que se desarrolla en el municipio desde 2020, que pretende abrir un foro local de discusión con los principales agentes políticos, económicos y sociales sobre cómo se posiciona la sociedad después de la pandemia.
En este encuentro se han analizado los retos a los que se enfrenta una institución universitaria que cumple ya 25 años desde su fundación y que reúne cada año en sus aulas a más de 11.000 estudiantes.
“Somos la Universidad más joven de Andalucía y la segunda de España. Los resultados ponen de manifiesto que lo estamos haciendo bien”, ha dicho el rector nada más comenzar su intervención, en la que ha dicho que son varios los ejes que se manejan para el día a día en su sede, pero “trabajar y ser pacientes son las dos claves del trabajo en la Olavide”.
Tres ejes fundamentales
El rector ha indicando que su universidad trabaja en tres ejes “que tenemos muy claros”, como son la docencia de calidad,
investigación e internacionalización“, ya que ”una universidad tiene que ser local e internacional a la vez, y tiene que mirar al entorno“, y ha puesto sobre la mesa cómo se ha trabajado en la reducción del ratio por aulas, lo que ha tenido evidentes resultados: ”Tenemos la menor tasa de abandono de las universidades andaluzas porque trabajamos de forma más personalizada con los alumnos, ya que si tienes 250 alumnos en un aula, solo conoces a la gente de las dos primeras filas. Del resto no sabes nada“.
La importancia de la tasa femenina
Para Francisco Oliva, la universidad, en su globalidad, tiene una serie de defectos, “como la tardía incorporación de la mujer, que no tiene una representación importante en áreas superiores, como las cátedras, ahí tenemos un decalaje”, lamenta, y recuerda que el 56 % del estudiantado son mujeres, “y hay una enorme concentración en las humanidades, en carreras relacionadas con la atención a los demás, como trabajo social, educación social…, pero escasísima representación en ciencias, tecnologías o matemáticas”.
Por eso, a las estudiantes de Secundaria presentes en la charla las ha animado “a que no tengáis miedo a tecnología o matemáticas, donde ahora mismo el 84 % son varones, y eso implica un problema: que la sociedad de los algoritmos y le tecnología la están construyendo los hombres, y si no entran las mujeres, mal vamos, porque será una sociedad en la que la brecha digital se va a ir agrandando cada vez más”.
Sí recuerda que hay “una ausencia de referentes femeninos, que han sido ocultados”, y lamenta que “si ocultas estos referentes a las niñas de hoy día, piensan que no tienen importancia esas carreras, pero desde los colegios tenemos que decirle a las niñas que pueden hacer las mismas carreras que un niño”.
Tecnología sin catastrofismos
El rector de la Pablo de Olavide ha analizado también la influencia de la inteligencia artificial y la tecnología en la sociedad actual, y concretamente en la educativa, y entiende que “tiene sus límites, y el límite está en que no se pierda la creatividad de las personas”, y recuerda que “hoy día la vida gira en torno a un teléfono móvil, pero veo en las aulas que los alumnos se distraen en contadas ocasiones”.
“No soy de mensajes catastrofistas, y de que el pasado fue mejor que el presente”, apostilla.
Su presencia ha sido una más de un foro que ha contado ya con anterioridad con la presencia de personalidades como la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, el economista José Carlos Díez, el director de eldiario.es, Ignacio Escolar, las secretarias regionales de UGT, Carmen Castilla, y de CCOO, Nuria López, y el presidente de la Confederación de empresarios de Sevilla, Miguel Rus, entre otros.
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