Los patinetes eléctricos desembarcan en las ciudades andaluzas

Entre los años 2010 y 2020, se ha ido produciendo un auge de los patinetes eléctricos como modo de transporte en las grandes ciudades andaluzas y españolas.

Este asunto ha avivado la preocupación de los ayuntamientos para evitar que circulen por las aceras, pudiendo producir accidentes; así como su aparcamiento indiscriminado, ya que se suelen aparcar en cualquier lugar. Este problema se engrandece si consideramos que, en la mayoría de los ayuntamientos, todavía no existe un registro municipal obligatorio de estos medios de transporte. Por tanto, es imposible conocer a quién pertenece el parque móvil de patinetes eléctricos de uso privado de cada municipio.

No obstante, todo esto ha empezado a cambiar con la aprobación de ordenanzas municipales que prohíben su uso en las aceras y limitan su velocidad.

Figura 1. Ordenanzas municipales en ciudades andaluzas sobre patinetes eléctricos.

Otra apuesta de algunos ayuntamientos andaluces ha sido la de promover su uso público en alquiler.

El modelo de la ciudad de Madrid, que funciona desde el año 2018, ha servido de prueba. La ciudad otorgó licencias limitadas a numerosas compañías que podían operar en diferentes distritos y barrios. Al cabo de dos años, el mercado se ha autorregulado. Hoy, hay un número inferior de empresas y licencias, mientras que más de la mitad de las empresas gestoras iniciales han abandonado el proyecto.

Figura 2. Alquiler de patinetes eléctricos. Madrid capital.

Entre los inversores en servicios de alquiler de patinetes eléctricos, hay empresas líderes estadounidenses (como son Superpedestrian y los grupos LINK, LIME y SCOTT), europeas como BOI (de Suecia) o DOTT (de Reino Unido); y la española REBY (de Barcelona). Algunas marcas del sector del automóvil, han apostado por diversificarse hacia este mercado emergente, como es el caso de SEAT o FORD, así como empresas del moderno sector del taxi, como CABIFY; y grandes empresas de servicios, como Acciona.

En la ciudad de Sevilla, la empresa REBY, fundada en Barcelona en el año 2020, y VOI Technology, multinacional sueca y primer operador europeo, han desplegado más de 2000 patinetes alquilables. Estos patinetes presentan la novedad de que las empresas detectan gracias a la Inteligencia Artificial (Machine Learning), si su aparcamiento ha sido correcto, en los puntos habilitados por el Consistorio, o no.

Durante 2020 y 2021, se han creado -en una primera fase- una red de 249 puntos de estacionamiento autorizado. Estos puntos han tenido un coste unitario muy bajo, ya que se limitan a trazar con pintura blanca el perímetro donde se pueden aparcar los patinetes. Esta red alcanza todo el casco antiguo y los barrios del ensanche de la ciudad (Triana, Los Remedios y Nervión) y puntualmente a otras zonas periféricas (como son PCT Cartuja, Santa Justa, Bermejales, Sur y Macarena), con preferencia por grandes centros comerciales, principales hoteles y todos los centros hospitalarios y áreas universitarias. Han quedado excluidas de aparcamientos para patinetes: el entorno declarado Patrimonio de la Humanidad, como es el eje Catedral-Archivo de Indias-Alcázar, el barrio de Santa Cruz y la Plaza de España; con el fin de evitar su impacto visual y paisajístico. Sin embargo, no se ha valorado dicha protección paisajística en otras plazas y jardines históricos, como pueden ser los Jardines de Murillo y los de Cristina.

En la ciudad de Málaga, tras la aprobación de la Ordenanza Municipal de Movilidad en enero de 2021, se han concedido licencias de alquiler de aproximadamente medio millar de patinetes eléctricos a las empresas Boi, Link y Scott, con un total de 300 patinetes cada una.

¿Cómo va a cambiar el auge de los patinetes eléctricos las pautas de movilidad urbana?

El marco normativo estatal de referencia ha sido aprobado en enero de este 2021, y conforme al mismo, los principales ayuntamientos españoles autorizan el uso de patinetes eléctricos a los grupos de población mayores de 15 años.

Un reciente estudio fija un ratio de uso de los patinetes eléctricos en el 3,6 % de la población mayor de 18 y menor de 64 años. Es decir, se calcula que habrá en la ciudad de Sevilla entre 10.000 y 20.000 usuarios potenciales de patinetes eléctricos para el año 2025. Una cifra que, aun siendo significativa, no hace peligrar la hegemonía de la bicicleta, que cuenta con en torno a 80.000 usuarios diarios.

La implantación del patinete es creciente. Así, en el verano del año 2021, se ha visto a numerosos turistas visitando monumentos y parques montados en sus patinetes de alquiler.

Otra imagen nueva de la movilidad urbana, se puede contemplar cuando desembarcan varias decenas de trabajadores y trabajadoras de sus patinetes eléctricos en calles comerciales del casco antiguo, como Sierpes o Tetuán. Asimismo, recién comenzada la temporada escolar, se impone su uso por los universitarios y estudiantes. Incluso, son frecuentes las personas que recurren al uso de las aceras peatonales o van montados con su pareja en un solo patinete eléctrico, aunque ambas actividades están prohibidas por las ordenanzas municipales.

Una consecuencia de estas conductas incívicas es que están creciendo últimamente los accidentes y atropellos causados por patinetes eléctricos.

 

Los datos parciales estimados por los respectivos ayuntamientos de grandes ciudades, reflejan una media diaria de miles de usuarios, algo que aumenta conforme mayor es el tamaño de la ciudad.

El precio de alquiler del patinete eléctrico es relativamente barato, siendo 1 euro más el coste del tiempo de viaje, lo que hace que cada vez sea un medio de transporte más usado.

Además, los patinetes eléctricos, poseen otras ventajas como tener un nulo poder contaminante del aire y el carácter silencioso de los desplazamientos. Su principal inconveniente es que hacen que nos movamos menos todavía. Si generalmente tenemos una vida cada vez más sedentaria en las ciudades, con el patinete eléctrico, hacemos aún menos ejercicio físico. Esto implica que el cuerpo se va amoldando a un sedentarismo que no es beneficioso para nuestra salud.

En definitiva,  lo ideal es usar el patinete solamente para desplazamientos urgentes, y pasear o ir en bici cuando no se tenga prisa. No olvidemos que caminar, es la mejor forma de mantener el bienestar y la salud. 

Entre los años 2010 y 2020, se ha ido produciendo un auge de los patinetes eléctricos como modo de transporte en las grandes ciudades andaluzas y españolas.

Este asunto ha avivado la preocupación de los ayuntamientos para evitar que circulen por las aceras, pudiendo producir accidentes; así como su aparcamiento indiscriminado, ya que se suelen aparcar en cualquier lugar. Este problema se engrandece si consideramos que, en la mayoría de los ayuntamientos, todavía no existe un registro municipal obligatorio de estos medios de transporte. Por tanto, es imposible conocer a quién pertenece el parque móvil de patinetes eléctricos de uso privado de cada municipio.