“Si Casado se ha presentado al congreso es porque tiene absolutamente claro que no le van a imputar por el caso máster”

María Esperanza Oña (Sevilla, 1957) pertenece a la generación de Javier Arenas, que primero la aupó a la cúpula del PP andaluz y luego, al percibir en ella un criterio independiente, la defenestró. Oña, como casi todos los populares andaluces, proviene de la escuela arenista, pero su estilo de hacer política –“nítido, desacomplejado, contundente”- se parece mucho más al de Pablo Casado, que la ha incluido en el Comité Ejecutivo Nacional del PP, como nueva Defensora del afiliado.

Oña es diputada en el Parlamento andaluz desde 2008, actualmente ocupa una vicepresidencia de la Cámara y fue alcaldesa de Fuengirola (Málaga) durante 24 años (llegó a ostentar la mayoría absoluta más rotunda de Andalucía, con el 70%de los votos). Ahora es la andaluza con más peso específico en la nueva dirección del partido. La entrevista con eldiario.es/andalucia se produjo horas antes de que Casado anunciase la Ejecutiva, mientras en Madrid, su equipo y el de Soraya Sáenz de Santamaría negociaban una integración que recomponga la unidad rota del PP.

Ha estado cerca que una mujer dirija por primera vez el PP y opte a la presidencia del Gobierno de España. ¿No era el momento de romper ese techo de cristal?

A mí me parecería estupendo que una mujer pudiera ser presidenta del Gobierno de España, y que lo hubiera sido ya. Eso es una cosa y otra que en este momento, ni mujer ni hombre: Casado representaba el cambio de etapa sin ningún tipo de dudas. Y Soraya representaba el continuismo, y eso es lo que ha valorado mucho el electorado, no el género de los candidatos. El PP nunca en la vida ha tenido en cuenta si se es mujer u hombre. Yo en el PP jamás he tenido problemas por ser mujer, siempre he estado bien valorada y respetada, y jamás he notado discriminación en ese sentido.

¿En qué sentido es Pablo Casado una ruptura con la etapa de Mariano Rajoy?

Pablo Casado representa una etapa nueva, pero no rupturista. Precisamente se está caracterizando por todo lo contrario, ha tenido contacto con los tres ex presidentes del PP, quiere que se sientan cómodos y busca significar la unidad del partido. Yo no veo ruptura, pero desde luego es una etapa completamente nueva. Es verdad que la candidatura de Soraya representaba continuidad, eso es totalmente cierto.

El congreso ha revelado una división 58-42%. ¿El PP está partido en dos?

A mí no me da la sensación de que el partido en sí esté dividido. Esto es una sensación de los más allegados a los líderes políticos, seguro, porque cada uno ha querido posicionar su fuerza, como es normal. Casado ha ganado y Santamaría piensa que su resultado le permite reclamar una mayor integración en la nueva ejecutiva. Pero el partido no se siente roto ni dividido. Durante un tiempo, que no debería ser muy largo, los que no han ganado este congreso tendrán que hacer un esfuerzo para asumir que no ganaron el congreso. Casado ya está reconocido como un gran acierto para todos nuestros afiliados.

¿La victoria de Pablo Casado tapona la fuga de votos del PP a Ciudadanos?

Totalmente convencida de que así va a suceder. Teníamos 11 millones de votos cuando se ganaron las elecciones con mayoría absoluta y esos votos hay que intentar recuperarlos. Muchos se han ido del PP decepcionados, a nadie se le escapa que muchísimos están en Ciudadanos, por tanto habrá que recordarles que ahora el PP vuelve a ser su casa. Seguro que Casado va a taponar la fuga de votos a Cs y no solo eso, también empezará a recuperar a nuestros votantes.

Usted misma expresó cierta decepción con su partido y la gestión que hizo Rajoy del problema secesionista catalán. ¿Alguna vez se ha sentido tentada de irse a Ciudadanos?

¿Yo con Ciudadanos? ¡Para nada, nunca se me ha pasado por la cabeza! Yo sí creo que muchísimos afiliados habrían preferido una postura más contundente del Gobierno del PP, pero también comprendo que el presidente Rajoy lo que quería en su momento era tener una postura consensuada con los tres partidos constitucionalistas. Evidentemente no se podía hacer lo que nosotros habríamos hecho solos, teníamos que hacer lo que se podía para mantener el consenso de los tres partidos que defienden la Constitución sin paliativos. Una cosa es lo que nos habría gustado hacer en Cataluña al PP y otra cosa es lo que se puede hacer con el consenso de los tres grandes partidos.

Si Casado ha virado el PP a la derecha, ¿quiere decir que ha quedado más espacio libre en el centro político? Se supone que en el centro es donde están en juego las elecciones…

Claro, pero el PP siempre ha sido un partido de centro derecha. Quienes dicen que Casado ha virado el PP a la derecha son sus opositores políticos. Y era previsible que le acusaran de esto porque él es muy nítido en los mensajes, ha hecho una campaña de mucho posicionamiento ideológico y eso facilita al adversario político decir que se está derechizando el partido. No, el PP siempre ha estado donde está: es el centro derecha en España y en Europa. Pablo Casado representa el centro derecha democrático, moderno y europeo, y no veo ningún problema, estamos donde hemos estado siempre pero con un discurso absolutamente nítido, contundente y sin complejos.

La derecha “estigmatizada”

¿El PP tenía complejos?

La política líquida no da resultado. Cuando el PP ha querido hacer eso, que Mariano Rajoy lo ha hecho mucho, no nos ha ido bien. Sin embargo, cuando hemos tenido un discurso claro, nítido, contundente, como lo tiene Casado, nos ha ido siempre estupendamente en las elecciones. Creo que no hay que tener ningún tipo de complejo, somos un partido de centro derecha democrática, y tenemos las mismas posibilidades que una izquierda democrática, ¿por qué no? Son formas de enfocar la política, queremos todos el mismo fin a través de medios diferentes, pero ya está. No sé por qué hay que estigmatizar a la derecha y, sin embargo, ser de izquierdas supone casi una superioridad moral. Pues yo no lo he visto así en mi vida. No es así, todo eso pertenece al márketing, pero qué le vamos a hacer. Mira, si ahora mismo se presentase en la Universidad un joven con una camiseta de Donald Trump, que a mí me gusta lo mismo que a ti: cero… sería noticia por los abucheos y los insultos que recibiría. Sin embargo, si va uno con una camiseta de Stalin, no le pasaría nada, a pesar de que ha sido un asesino de la historia más reciente. Fíjate si hay eslóganes de izquierdas que están interiorizados hasta ese punto.

Puede que porque en España todavía pesa mucho el recuerdo de la dictadura fascista…

No lo sé, pero no es sólo en España. En España más. Hay una serie de eslóganes que han calado en la sociedad. Lo de la camiseta de Stalin pasaría igual en París. En fin, cosas que hay que soportar, qué le vamos a hacer. Por eso cuando ganamos las elecciones, me siento tan orgullosa, porque ellos lo tienen mucho más fácil que nosotros en cuanto a la percepción que la sociedad tiene de la izquierda en general. Y nosotros tenemos que empezar por convencer a la gente de que ser de centro derechas no sólo no es malo, sino que es una opción política tan legítima como cualquier otra.

El aborto y la eutanasia

Usted es médica, ¿está de acuerdo con regresar a la ley del aborto del 85?

Ay, una cosa es mi postura personal y otra como alguien que debe tomar decisiones en política, son dos cosas absolutamente distintas. Lo que yo piense como persona es algo que no tiene ahora ninguna importancia. Yo he hecho debates sobre este tema y todo el mundo conoce mi opinión. No hay más nada que añadir.

¿Pero le sorprendió que Casado hiciera ese viraje al pasado en la campaña?

Bueno, a mí no me sorprende porque el PP lo llevaba en su programa electoral anterior. Distinto es que no se haya hecho. Por tanto, si Pablo Casado plantea esa posibilidad, pues se podrá hacer o no se podrá hacer. Pero tampoco está traicionando a nadie ni está diciendo algo completamente distinto a lo ya dicho, porque figuraba en nuestro programa electoral. El PP no estuvo de acuerdo con la reforma de ley del aborto de Zapatero y eso no es ninguna novedad.

A usted, como profesional de la medicina, le parece bien la ley del aborto actual, ¿no?

¿La reforma de Zapatero? Sí, sí…no, bueno, yo creo que el aborto es…en muchas ocasiones… Vamos, yo creo que éste no es el tema, eh. Prefiero no hablar de eso, de verdad.

¿Está en contra de una ley que regule la eutanasia como ha propuesto Pedro Sánchez?

Vamos a ver lo que propone, pero en principio sobre la eutanasia, quiero poner el ejemplo del bebé de Reino Unido, que los padres querían que viviese y la ley no le permitió que viviera su propio hijo. Por tanto creo que esa ley de la eutanasia debe de tener unos límites éticos importantísimos en caso de que se apruebe algún día. Y en principio estamos aquí todos para defender la vida, para dar más calidad de vida y para proteger a los más débiles, no para eliminarlas. Sobre esa propuesta habría muchísimo que debatir y sobre todo establecer unos condicionamientos éticos.

“No hay debilidad en el PP andaluz”

¿Qué peso debería tener el PP andaluz en el Comité Ejecutivo Nacional? Si resulta infrarrepresentado, se podría pensar que es un castigo por haber apoyado mayoritariamente a Soraya en la primera ronda…

Eso no es posible. Nadie gana nada con que haya un castigo al PP andaluz. ¿Qué ganaría Pablo Casado infrarrepresentando al PP andaluz? Nada en absoluto. Le interesa todo lo contrario, afianzarse en todas las regiones y tener el partido unido al 100%. Andalucía debe tener un peso importante en la nueva ejecutiva del PP, porque ya lo tiene en España. Andalucía es decisiva, puede hacer ganar o perder unas elecciones. De hecho, estoy convencida de que el voto de Andalucía en estas primarias ha tenido mucho que ver con el éxito de Pablo Casado.

En el congreso, el voto de los compromisarios era secreto, pero se sabe que el 65% de los afiliados votaron en primera ronda a Santamaría. ¿La victoria de Casado se debe a un trasvase de votos en Andalucía de Soraya a Casado?

No me cabe duda. Es verdad que los compromisarios de Cospedal han sido importantes, pero por ejemplo en Málaga, mi provincia, Cospedal no tenía ningún compromisario, y le aseguro que el 50% de los delegados de Málaga votaron a Casado. Andalucía ha declinado el voto a favor de Casado, sin duda.

¿Cómo explica entonces que en la primera ronda el 65% de los militantes votase a Santamaría?

Bueno, porque quizá Casado era un candidato que poca gente se esperaba. Al principio, cuando yo misma me posicioné a favor de Pablo, antes de la primera votación de afiliados, me preguntaban por qué haces esto. Como si nadie pensase que tuviese posibilidades y, sin embargo, mira. En Fuengirola, mi pueblo, el voto fue libre. No se hizo ningún tipo de campaña ni declaraciones ni posicionamientos de la dirección para convencer a nadie. Y ganó Casado por más del doble a Soraya. Eso me hace plantearme que si hubiera habido libertad de voto total desde el principio…si las direcciones provinciales y regionales no se hubieran decantado, en toda España, no sólo en Andalucía, por uno u otro candidato, probablemente habríamos ganado con Pablo Casado también en la primera ronda. En cualquier caso, la campaña está también para convencer, y el mensaje de Casado ha sido tremendamente contundente. Él ha sido el mayor artífice de su éxito en este congreso…

¿Cree que los compromisarios no han votado en libertad?

Con voto libre me refiero a sin condicionamiento ninguno. Cuando salen los presidentes regionales y provinciales diciendo que están con tal candidato a muchos afiliados de esas provincias les condiciona claramente, no tengo ninguna duda. La postura de Alberto Núñez Feijoó de no posicionarse para nada ha sido neutral y respetuosa. Creo que eso es lo que tendrían que haber hecho otros líderes regionales, pero en fin, lo que han hecho está permitido y por tanto no tengo nada que criticar en ese sentido.

La influencia de Arenas

Usted conoce bien a Javier Arenas. Éste es el primer congreso que pierde en tres décadas. ¿Empieza el postarenismo?

No estoy del todo segura. Hombre, el propio Arenas ha dicho que tiene dudas de si continúa en política. Yo creo que continuará porque le gusta mucho, pero evidentemente la fuerza que Javier Arenas mantenga en Andalucía, supongo que el nuevo presidente del PP intentará que eso no sea así, porque al final divide. O sea, que todo el mundo tenga sus responsabilidades está muy bien, pero que después se hagan ejercicios de fuerza, creo que eso termina dividiendo al partido y por supuesto a los afiliados.

Siempre se ha hablado de la tutela de Arenas sobre el PP andaluz desde Madrid. ¿Cómo afectará en el PP-A la pérdida de influencia de Arenas tras el congreso?

Bueno, vamos a ver si Arenas pierde influencia en el PP andaluz. Yo confío en que simplemente se dé cuenta de que las cosas han cambiado, que es una nueva etapa y que tenemos que estar todos a una. Porque si no el PP seguirá sin ganar las elecciones en Andalucía, así de sencillo. Y no creo que ni a Javier Arenas ni a nadie le interese que el PP no gane elecciones.

¿Cree que el congreso ha debilitado el liderazgo de Juanma Moreno a las puertas de unas elecciones autonómicas?

Creo que no. Votar a quien querías que fuese presidente del PP ni te debe reforzar ni te debe debilitar. Si ahora Juanma colabora con Casado –que no tengo ninguna duda porque son amigos- pues no le va a debilitar en absoluto. Y el apoyo que le va a dar el presidente del partido viniendo el sábado a Córdoba lo hará evidente. Por mi parte no tengo percepción de que esté debilitado. Vamos a intentar que nuestro partido pueda gobernar en estas próximas elecciones, aunque sea sumando con Cs.

¿Cómo debe ser la integración en el PP andaluz tras este congreso?

En el PP andaluz hay poco que integrar ya, yo lo veo bastante integrado. De hecho, en el propio grupo parlamentario hay personas que han defendido a Cospedal, a Casado y a Soraya, y estamos juntos. Nos llevamos estupendamente y eso no va a cambiar. La integración va a quedar para muy pocas personas que quizá aún no aceptan los resultados del congreso, pero eso siempre va a ser anecdótico. Las primarias han sido impecables y vamos a cerrar las últimas desavenencias también de forma impecable.

Elecciones andaluzas: gobernar “con Cs”

¿Se cree las encuestas que vaticinan un sorpasso de Cs al PP andaluz?

Yo no me las creo. Pero en cualquier caso las encuestas son situaciones momentáneas. Para el PP andaluz, la llegada de Pablo Casado va a ser un estímulo y servirá de revulsivo para votar de nuevo al PP.

¿El PP andaluz está en disposición de ganar las próximas elecciones autonómicas o, al menos, recuperar los 50 diputados que logró Arenas en 2011?

El PP tiene que trabajar más, son momentos difíciles y la política ha cambiado. El PSOE andaluz es una maquinaria de poder muy instalada hace tantos años que parece inamovible, monolítico, pero bueno, algún día tiene que desaparecer esa situación. El PP puede terminar con más de tres décadas de socialismo en Andalucía en las elecciones, aunque necesitaremos a Ciudadanos.

¿Al PP andaluz le beneficiaría un adelanto electoral?

No lo sé. En cualquier caso el PP estaría preparado para afrontar unas elecciones cuando a la presidenta Susana Díaz le parezca mejor.

¿Por qué lleva el PP perdiendo elecciones en Andalucía tres décadas?

Bueno, prefiero pensar en positivo, tenemos que pensar que las vamos a ganar en el futuro, y entonces es posible que cambien muchas conductas. El PSOE siempre ha considerado que Andalucía es suya, como si le perteneciera por derecho, y eso se tiene que acabar. Está claro que no hemos acertado en Andalucía, pero no lo quiero decir mucho que si no me convierto en pepito grillo del PP y no quiero.

Pablo Casado está siendo investigado por un juzgado por el caso de su máster y hay una posibilidad real de que acabe imputado. Si se demuestra un trato de favor, ¿debería asumir responsabilidades y dimitir?

Yo no tengo ninguna duda de que eso no va a pasar. Y no tengo duda porque, evidentemente, si Pablo Casado se ha presentado en este congreso es porque tiene que tener absolutamente claro que no ha hecho nada irregular y, por tanto, no será imputado. No tengo ningún motivo para dudar de él. No creo que le vayan a imputar, él dice que está todo correctamente y yo no tengo duda de que dice la verdad.