Tras las abundantes lluvias registradas durante las fiestas de Navidad, el fin de año de 2021 llega a Andalucía, igual que al resto de la Península Ibérica, con tiempo muy seco y unas temperaturas anormalmente altas. La entrada de una imponente y anómala masa de aire de procedencia norteafricana está dejando y dejará en el cambio de año unas temperaturas más de 10 grados por encima de lo normal. En Andalucía será la costa mediterránea y áreas ubicadas en cotas medias de toda la región las que más noten los efectos de un episodio que puede dejar registros históricos de temperaturas cálidas para los meses de diciembre y enero.
Un episodio extremadamente anómalo según el Centro Europeo de Predicción
El cambio de dinámica atmosférica se debe a la presencia de una profunda borrasca situada sobre el archipiélago de las Azores, que ha impulsado sobre buena parte de la mitad occidental del continente europeo una potente dorsal anticiclónica. A las altas presiones que estos días dominan la Península Ibérica le acompañada además una masa de aire anormalmente cálida en altura. Para hacerse una idea de la rareza del episodio, el Centro Europeo de Predicción a Medio Plazo (ECMWF por sus siglas en inglés) al que está acogida la AEMET, sitúa a la mayor parte de la Península con el valor 1 en el índice EFI, el más alto en una escala del -1 al 1 y que sirve para medir la rareza de los eventos meteorológicos extremos.
Lo extraordinario del evento no se da tanto por los valores absolutos alcanzados o que se esperan alcanzar si no por las fechas. Muy pocas veces la temperatura de la masa de aire sobre la Península supera los 15 grados de media a unos 1500 metros de altitud. Lo normal al cierre del año es que dicha masa se sitúe entre los 2 a 4 grados. Los más de 10 grados de anomalía explican los valores que ya durante la jornada del miércoles 29 de diciembre se alcanzaron por multitud de localidades andaluzas. Destaca Abla, en el interior de la provincia de Almería, que llegó a rozar los 28 grados en una de las tardes más calurosas que jamás haya vivido el litoral andaluz en una última semana de diciembre. Otras muchas localidades de la costa mediterránea, como Coín o la capital malagueña, rondaron los 25 grados en una jornada de ambiente plenamente primaveral.
Las cotas medias andaluzas las principales afectadas
Debido al potencial de la masa de aire en altura, buena parte de los registros más elevados se están dando en cotas medias y altas del interior de la región. Especialmente en localidades situadas a sotavento de la entrada del viento cálido, en las vertientes septentrionales de los sistemas montañosos, los procesos de recalentamiento están provocando que algunas localidades ubicadas en cotas medias del interior hayan vivido unas noches propias de los meses veraniegos. Es el caso de Doña Mencía, en Córdoba, que durante la madrugada del jueves 30 viese ascender el termómetro hasta superar los 21 grados según datos de la propia Agencia Estatal de Meteorología.
Y así seguirá en el cambio de año. Aunque la masa de aire vaya a perder algo de intensidad en altura con el paso de las horas, la potencia de las altas presiones mantendrá el aire cálido en altura durante los primeros días del 2022. No será hasta la tarde del martes 4 de enero cuando las temperaturas comiencen a normalizarse. Hasta entonces los valores de máximas y mínimas se mantendrán entre 7 a 9 grados por encima de lo habitual. Las máximas alcanzarán o superarán la barrera de los 20 grados en la mayor parte del territorio andaluz, pudiendo alcanzarse de manera local los 24 o 25 grados en algunos puntos del interior oriental.
Las mínimas, que hasta ahora se habían mantenido relativamente bajas en zonas de valles y altiplanos, subirán por encima de los 6 o 7 grados en toda la región. La nochevieja de 2021 se vivirá con ambiente templado en la mayor parte de Andalucía, destacando la costa mediterránea donde no se bajará de los 15 grados durante el primer amanecer del nuevo año.
Sin cambios hasta mediados de la próxima semana
El ambiente suave y estable empezará a cambiar durante la tarde del martes 4. Para entonces el paso de una vaguada por el norte peninsular barrerá el aire cálido en altura, devolviendo las temperaturas en superficie a valores más normales para la época del año. El descenso, próximo a los 10 grados en muchas zonas, irá además acompañado de un aumento de nubosidad que podría llegar a dejar algunas precipitaciones débiles y dispersas a mediados de la próxima semana.