Municipios y AMPAS montan mercadillos de libros de texto de Bachillerato para paliar el efecto crisis
Las becas para los alumnos de enseñanza no obligatoria cada vez son menores y esto ha convertido las aulas de algunos institutos en mercadillos improvisados. Según los últimos datos aportados por la Consejería de Educación, en los últimos años, los recortes del Gobierno de Mariano Rajoy han supuesto un 10% menos de ayudas en Bachillerato, Formación Profesional y Universidad. “Más gastos para los padres, que han decidido copiar las iniciativas de otras comunidades autónomas con más experiencia en el intercambio de libros”, explica Silvia Alcalde, presidenta de FAPA Alhambra.
Lo que hasta ahora quedaba relegado a algo anecdótico entre familias o compañeros, asegura la representante de las madres y padres granadinos, “se ha convertido en algo habitual que va tomando forma con tenderetes instalados en los vestíbulos de los institutos”. Éste es el caso del IES Arabuleila de Cúllar Vega (Granada), donde los padres se han unido al Consistorio (PSOE) para poner en marcha un banco de libros de segunda mano. “Consiste”, explica Olivo De la Rosa, concejal de Bienestar del municipio, “en reutilizar los libros de textos que puedan ser útiles para otros alumnos”. De este modo, “por un lado, unas familias recuperan parte de lo invertido en su compra y otras se pueden beneficiar de un precio más barato”.
La idea es que los 300 euros de media que se desembolsan por hijo en la compra de libros en Bachillerato se reduzcan exactamente a la mitad, ya que los volúmenes se venden al 50% del precio original. “No hay límite para la venta, pero sí para la compra. No se pueden adquirir dos libros de la misma asignatura y del mismo curso para evitar especulaciones”, puntualiza. Esta semana es la recogida de material y la que viene tendrán lugar las transacciones gracias al trabajo voluntario de los padres que están seleccionando los libros y realizando una lista de propietarios a los que entregar después el dinero.
La iniciativa, dicen, se repetirá en septiembre siempre que haya familias interesadas. “Que probablemente”, anuncia la concejala, “habrá”, aunque Andalucía y Navarra son las únicas comunidades autónomas que mantienen un programa de gratuidad de libros en primaria y enseñanza secundaria obligatoria (ESO). En la enseñanza no obligatoria, cuando el Bachillerato o la Formación Profesional llega, toca pagar, “sin que a veces se tenga ni para poner un plato de comida en la mesa”, argumenta Mercedes Juárez, secretaria de la confederación de asociaciones de padres y madres de Andalucía (Confedampa).
Cada vez más organizados
Las familias de Cúllar Vega han sido unas de las primeras en buscar alternativas a la difícil situación que les ha provocado la crisis, pero no las únicas. En Montequinto (Sevilla) las AMPA de los cuatro institutos de este barrio de Dos Hermanas, con más de 2.700 estudiantes, se han unido para organizar un mercado en una de las plazas principales, “la situada tras el centro educativo Mariana Pineda”, relata María José Martínez, coordinadora. La intención “es facilitar las cosas porque hemos visto que hace falta, que la gente lo está pidiendo y que es algo que se hace ya en las aulas a nivel particular”. Por eso estos padres se preguntaron “¿por qué no organizarlo bien y dar la oportunidad a la gente de vender lo que otros necesitan a un precio razonable?”. En este caso, el mercado se abrirá también a libros de lectura obligatoria y se realizará la primera semana de septiembre.
Los programas municipales en solitario de intercambio de libros de segunda mano también están empezando a aparecer en algunos municipios andaluces como es el caso de Armilla (Granada), donde por primera vez se ha puesto en marcha un banco de libros de texto para que las familias de aquellos que no utilicen y los servicios sociales puedan entregarlos al inicio del curso a quienes sí los necesitan.
Andalucía este año ya está copiando formalmente fórmulas existentes en otras regiones para hacer frente al pago de libros en enseñanza no obligatoria, donde no se incluye la entrega de libros en ninguna de los ciclos formativos. El más veterano es el Ayuntamiento de Gijón con 15 años de experiencia. Torrejón de Ardoz (Madrid) o Langreo (Asturias) son otros dos ejemplos del lado solidario que la crisis ha despertado en los padres. Las plataformas de AMPA en internet para este fin como Bookint.eu y Bolsadelibros son también buen ejemplo de ello.