El PP de Granada escenifica su ruptura en otro municipio más del área metropolitana. Cuatro de los seis concejales de la formación en el pleno de Atarfe abandonarán el partido pero conservarán sus actas tras ser expedientados por la dirección provincial por “falta de lealtad”. Los populares ‘granadinos’ eligen así bando en la guerra de su grupo municipal, en este caso, el de una de las ediles que permanecerán en el partido y es la esposa de Gonzalo Aivar, el empresario imputado por facturas falsas en el ‘caso Mercamed’ y que acusó al PP de financiar ilegalmente actos de campaña de 2011 en los que participó la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría.
La decisión de los cuatro ediles llega tras conocerse que el pasado jueves 27 de marzo la dirección provincial decidió abrirles expediente por “saltarse las órdenes del partido” al remitir una carta al nuevo presidente regional, Juan Manuel Moreno Bonilla, en el que pedían la expulsión de las otras dos concejales. En concreto, aludían a la relación con Aivar y al apoyo que estás dos ediles dan con sus votos al actual gobierno municipal, coalición de PSOE e IU. El actual alcalde de Atarfe, el socialista Tomás Ruiz, está imputado por varias causas urbanísticas, al igual que su antecesor, el polémico Víctor Sánchez.
“Por honestidad y por coherencia”
De hecho, el PP de Atarfe llevaba desde diciembre en manos de una gestora cuando la dirección local, precisamente compuesta por estos cuatro ediles que ahora abandonan el partido y varios afiliados afines, decidía dimitir en masa ante la ausencia de reacción del provincial y el regional en su reclamación de expulsión de sus dos rivales políticas. Aseguraban que “por honestidad y coherencia” dichas ediles debían ser cesadas, ya que su apoyo al gobierno atarfeño y la vinculación con Aivar, imputado por facturar de forma fraudulenta a la Diputación provincial cuando gobernaban PSOE e IU, las ponía bajo sospecha.
El ya ex presidente del PP de Atarfe y hasta el momento portavoz municipal, José Manuel Aranda, que fue candidato a la alcaldía en 2007 y 2011 consiguiendo pasar de dos concejales a seis en ese periodo, era el principal acusado por Aivar en su denuncia pública de financiación ilegal. Este empresario aseguró que tanto él como otros financiaron de manera irregular la campaña de las municipales de 2011 a cambio de futuros favores si los populares acababan gobernando. Entre los actos que ponían en duda, se encontraba uno que protagonizó la vicepresidenta Saenz de Santamaría.
La Fiscalía abrió una investigación de oficio sobre esta denuncia, que Aivar realizó en los medios de comunicación, acabando por archivarla por falta de pruebas. Aranda había anunciado que preparaba una denuncia por denuncia falsa contra este, y seguía pidiendo que el partido expedientase y expulsase a sus dos compañeras de grupo municipal, a las que acusaba de saltarse la disciplina de voto.
Se desconoce por el momento si Aranda y sus compañeros fundarán otro partido, aunque sí han asegurado que no abandonarán sus actas hasta el final de la legislatura. El Ayuntamiento de Atarfe queda ahora con 7 concejales del PSOE, dos de IU y otros dos del PP, frente a seis concejales no adscritos, dos salientes de la coalición de izquierdas por negarse a pactar con los socialistas y los actuales cuatro dimisionarios populares.