Pleno duro, tenso e irrespirable en el Ayuntamiento de Granada. El primero en el que el alcalde, Luis Salvador (Ciudadanos), ha comparecido en minoría absoluta tras quedarse con el apoyo de un solo concejal ha servido para evidenciar que está completamente solo. PSOE y PP se han marchado cuando apenas llevaban hora y media de sesión. Antes, los concejales han aprovechado para exigirle la dimisión al regidor y este, en un perfil bajo y sin entrar al cuerpo a cuerpo, se ha limitado que habrá una salida a la crisis “muy pronto”.
Claramente superado por las circunstancias y con un tono de voz más pausado de lo habitual, Luis Salvador ha recordado que él no ha pedido que se produjera esta situación: “Había un equipo de gobierno funcionando y de pronto una parte de ese equipo decidió apearse de su responsabilidad”. Unas palabras que ha pronunciado como respuesta a todas las peticiones que ha recibido para que se marche y que se han producido antes de que el pleno saltase por los aires y el PSOE lo abandonara primero, con el PP y los concejales no adscritos, a excepción de Sebastián Pérez, haciendo lo propio instantes después. Solo Podemos-IU y Vox han tratado de seguir.
Sin embargo, como faltaban 16 concejales, la sesión no ha podido continuar por falta de quorum. El portavoz de los socialistas, José María Corpas, ha anunciado la decisión de su grupo pidiendo respetar a la ciudadanía y no participar del “espectáculo” en el que se había convertido la sesión plenaria. Además, ha tendido la mano al PP y ha pedido que se reúnan “esta misma tarde” para encontrar una solución a la crisis institucional que vive el Ayuntamiento de Granada tras la dimisión en bloque del equipo de Gobierno el pasado 8 de junio.
Los populares, que se han ido sin decir nada, habían intervenido previamente para afear la actitud de los demás concejales al aprovechar el pleno para hacer política partidista. “Algunos han aprovechado la oportunidad para hacer un posicionamiento de cuestiones que no se están tratando”, ha llegado a decir César Díaz, portavoz del PP en el Consistorio. Además, como PSOE y Podemos-IU han insistido en que el Partido Popular es el culpable de lo que ocurre por el pacto de investidura de 2019 y por dejar caer ahora al bipartito, Díaz ha asegurado que su partido ha actuado “con responsabilidad”. “No les pido a ustedes que comprendan ese posicionamiento”.
Asumiendo que el escenario actual obliga a llegar a acuerdos anómalos, el portavoz popular sostiene que están trabajando “por la gobernabilidad” y que, por eso, van a hacer un “esfuerzo especial” para llegar a acuerdos “con todos los grupos políticos”. Algo que obliga al PP a pactar una moción de censura con el PSOE o a reeditar el bipartito, pero cambiando a Luis Salvador por un alcalde de su formación. “La situación es tan insostenible que obliga a tomar cambios en el Gobierno de la ciudad”.
Antes, todos los partidos han pedido a Luis Salvador que se marchara. Empezando por Podemos-IU cuyo portavoz, Antonio Cambril, se ha adelantado a lo que acabaría ocurriendo advirtiendo que había que respetar la sesión plenaria: “Hemos venido a trabajar para los ciudadanos y no para hacer teatro”. Por otra parte, ha anunciado que el próximo lunes iniciarán conversaciones “serias” para desalojar a un alcalde al que ha apelado directamente: “Luis, dimite. Da un paso a un lado y no prolongues la agonía de Granada ni la tuya. No busques más culpables. El culpable eres tú y todos los concejales que te votaron”.
Salvo los concejales no adscritos, que no han hablado, el resto de formaciones representadas sí han tomado la palabra para insistir una y otra vez en que Luis Salvador debe dimitir. El líder de Vox en el Ayuntamiento, Onofre Miralles, ha sido especialmente duro con el alcalde con continuas alusiones a su “enrocamiento” en el puesto y haciendo bromas ácidas sobre alguno de los proyectos que ha abanderado como el de “Granada Human Tech”.
Por su parte, el alcalde y principal aludido, ha tratado de mantener un pleno lo más normal posible. Teniendo en cuenta que era atípico porque solo había tres puntos del día dedicados a la gestión municipal y el resto eran mociones o preguntas políticas, el propio Luis Salvador ha admitido lo extravagante de lo ocurrido. La dimisión del equipo de Gobierno, ha dicho, “ha generado una situación anómala”. “Aun no siendo deseada, había que evitar caer en el caos”.
“Tiene que haber una salida temprana. Pronto. Muy pronto”, ha anunciado. Rebajando el tono utilizado en las últimas semanas y pasando de considerarse un “espartano” capaz de aguantar el desafío de gobernar sin apoyos, Luis Salvador ha sido mucho más cauto en este pleno. “Este alcalde no va a ser impedimento para que esta ciudad recupere la tranquilidad. Nunca ha habido vocación de que perdure esta situación”.
El regidor granadino ha avisado de que la semana que viene habrá “noticias importantes”. Aunque se ha dado un plazo de entre siete y diez días para desbloquear la crisis consistorial, ha insistido en que “los pasos que se tengan que dar se tendrán que dar conscientemente”. Lo que no se sabe a ciencia cierta es a qué pasos se refiere y con quién los dará. No obstante, ha habido espacio para la especulación porque cuando el PSOE se ha marchado del pleno, a Luis Salvador se le ha escuchado pedirle a los socialistas que no lo hagan porque con esa actitud están “beneficiando al PP”.
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