El director general de Memoria Democrática de la Junta de Andalucía, Francis-co Javier Giráldez, ha presentado el libro “Las huellas en la tierra. Anuario 2016-2017. Intervenciones en fosas comunes del franquismo en Andalucía” del periodista Juan Miguel Baquero, una memoria de las actuaciones desarrolladas en suelo andaluz para la localización y recuperación de víctimas de la Guerra Civil y la Posguerra, y coordi-nadas por la Dirección General de Memoria Democrática. El acto, que se celebra en el Museo de la Autonomía, cuenta con la presencia del director general para la Memo-ria Histórica del Gobierno de España, Fernando Martínez, y la directora del Centro de Estudios Andaluces, Mercedes de Pablos.
El libro recoge las intervenciones desarrolladas en estos dos años y cuenta con artículos relacionados con los 22 municipios en los que éstas se han llevado a cabo, y gracias al esfuerzo compartido de familiares, entidades memorialistas, ayuntamientos, diputaciones y Junta de Andalucía.
Así, se incluyen las intervenciones de Benamahoma, Puerto Real y San Fer-nando en Cádiz; en Castro del Río, Guadalcázar, Lucena y Monturque en Córdoba; de Huelva y Nerva en la provincia de Huelva; de Marmolejo en Jaén; en Álora, Cárta-ma, Colmenar y Villanueva de la Concepción en Málaga, y de Camas, El Coronil, Fuentes de Andalucía, Guadalcanal, Guillena, La Puebla de los Infantes, Palomares del Río y Villaverde del Río en Sevilla.
En declaraciones a este periódico, Baquero considera que “ocultar la realidad siempre es una mala decisión y España no ha leído bien las páginas más oscuras de su historia reciente. Se lo debemos a quienes se fueron, es trascendental en nuestro presente, y una obligación con las generaciones futuras”.
El autor señala que “el periodismo debe contribuir a que se respeten los derechos humanos, y su labor debe poner de manifiesto todas sus violaciones”. “Porque los derechos humanos son el marco ético y, como decía Gabriel García Márquez, 'la ética no es una condición ocasional, sino que debe acompañar siempre al periodismo, como el zumbido al moscardón'”, recuerda Baquero, autor también de 'Que fuera mi tierra', galardonado por Heraldo de Madrid con el Premio Chaves Nogales al mejor libro periodístico de 2016.
Cada intervención cuenta con una ficha técnica acompañada de un dibujo de la disposición de los cuerpos arrojados, y se complementa además con los testimonios orales de familiares, de miembros del mundo asociativo y de historiadores e investi-gadores.
El libro contiene también artículos de especialistas en historia, genética, antropología, movimiento memorialista o educación, que dan idea de la transversalidad que arropa a la Memoria, así como de la necesaria colaboración entre todas las partes.
El anuario está prologado por el antropólogo del CSIC Francisco Ferrándiz quien lamenta “la enorme dificultad para cultivar un debate en profundidad sobre la guerra y la dictadura, sobre sus consecuencias y heridas” “ochenta años después de la guerra y cuarenta años desde la muerte del dictador”. Por este motivo, defiende que “el trabajo de memoria y de demanda de justicia en torno a estas fosas comunes es indispensable para profundizar y enriquecer el tejido democrático de nuestro país”.
En el mismo sentido, se expresa el vicepresidente en funciones de la Junta y consejero de la Presidencia, Administración Local y Memoria Democrática, Manuel Jiménez Barrios, en la presentación del libro, quien subraya que “buscar a los desapa-recidos y atender las legítimas peticiones de sus familiares no es más que cumplir con el deber de Estado”.
Asimismo, el vicepresidente valora que el trabajo incorpore un “aspecto funda-mental y necesario: el homenaje y reconocimiento a la mujer”. “La represión franquista fue especialmente encarnizada con las mujeres, por ello la tarea de reparación debe tener una mirada femenina, aspecto en el que también estamos firmemente compro-metidos en nuestra apuesta por una Andalucía justa y reparadora”, concluye.