Ayuntamiento de Jaén: unas cuentas de susto o muerte
Créditos, préstamos, refinanciación de deuda… Este es el pan de cada día de la gestión del Ayuntamiento de Jaén que ahora, en unos días, tiene que ultimar un plan de ajuste económico-financiero y plantear a contrarreloj medidas para hacer frente a una deuda de alrededor de 700 millones de euros. Se trata de una exigencia del Ministerio de Hacienda después de que el Ayuntamiento no haya cumplido la Ley de Estabilidad Presupuestaria.
El alcalde de la ciudad, Francisco Javier Vázquez (PP), ha dicho en algunas ocasiones que no duerme por las noches pensando en cómo poder pagar cada mes a los 1.420 trabajadores municipales. Sólo su nómina se lleva dos terceras partes del gasto municipal: 56 millones de euros anuales, 153.400 euros diarios.
Precisamente, para eso, para poder hacer frente a las nóminas hasta final de año y pagar algunas facturas de servicios, se aprobaba la semana pasada en el pleno ordinario del 28 de octubre un crédito de 14,5 millones de euros con una nota de reparo del interventor que llamaba la atención sobre lo difícil que sería pagarlo.
El préstamo y los intereses deberán devolverse entre el 20 de marzo y el 31 de julio de 2017, con pagos quincenales que pueden llegar a ser de hasta seis millones de euros. Como aval se ha utilizado la recaudación del primer semestre del año de dos impuestos: el IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) y el de Vehículos de Transmisión Mecánica.
“¿Tienen una solución mejor?”
Ante las críticas de la oposición, el concejal de Hacienda y Contratación, Manuel Bonilla, les espetaba “si tienen ustedes una solución mejor para poder pagar las nóminas el 1 de noviembre y prestar servicios básicos sociales, pónganla encima de la mesa”.
Finalmente el crédito se aprobó con los votos a favor del PP, los tres concejales independientes (antes grupo de Ciudadanos) y el voto en contra de PSOE y Jaén en Común, que piensan que pedir más créditos es ahondar en el problema. Un agujero más grande para la tumba económica del Ayuntamiento. Que según el concejal de Hacienda, son sólo “los desajustes de unas cuentas desequilibradas que generan 30 o 40 millones de euros de déficit anual”.
Plan económico
En la víspera de Todos los Santos, los grupos municipales se han reunido en una comisión extraordinaria de Hacienda para vivir su propio Halloween, un susto más. En esa reunión se les ha dado una copia de la actualización que el equipo de Gobierno municipal ha realizado del plan económico que ya presentaron en junio y se les pide que aporten las medidas que ellos crean oportunas. Eso sí, “a la mayor brevedad posible”, porque se vuelven a reunir en dos o tres días, para consensuar ese plan económico que tienen que mandar a Madrid al Gobierno y también a Sevilla a la Junta para que les den el visto bueno antes del 10 de noviembre.
El PSOE tacha esta situación de “grave irresponsabilidad” por parte del alcalde popular, Javier Márquez, por silenciar desde junio un plan económico, que en su opinión no solo no resuelve el problema de la deuda sino que la traslada a la siguiente generación. Por silenciar durante cinco meses la obligación de presentar un plan de ajuste y ahora plantear a contrarreloj medidas que tendrán que aprobar en un pleno extraordinario la próxima semana.
De crédito en crédito
En el documento marco que les ha presentado el Gobierno municipal a la oposición se habla de nuevos préstamos para pagar los que ya se contrajeron para pagar a proveedores por 254 millones de euros, en el mandato del exalcalde José Enrique Fernández de Moya, ahora diputado nacional.
El PP propone pagar esos 254 millones, con otro préstamo de 130 millones de euros para devolverlo dentro de 40 años. También a cuatro décadas se propone la refinanciación de la deuda a largo plazo del Ayuntamiento, unos 370 millones. Además, se pide convertir la deuda de corto a largo plazo, para lo cual necesitan saldar esta cuenta con los bancos con otro préstamo a 40 años de 30 millones de euros con el ICO (Instituto de Crédito Oficial).
El PSOE critica además que, de entre esta maraña de créditos, préstamos y refinanciación de deuda, el plan sólo recoge una medida propia para reducir el gasto, y es una propuesta de recortar en 2 millones de euros, un 3 %, el capítulo de Personal, un capítulo que en estos momentos aumentaría con la incorporación de 54 personas procedentes de la extinción de Somucisa, Onda Jaén.
Debate del Estado de la Ciudad
En el último pleno ordinario, el del día 28 de octubre, uno de los puntos del día, el 19, situado entre una propuesta de ratificación de decretos y la dación de cuentas, se ha tratado el Debate del Estado de la Ciudad. Una decisión controvertida, según la oposición, que considera que el PP le da escaso interés al análisis de la grave situación de la gestión local.
El alcalde comenzó el debate recordando que en el anterior mandato, unas Navidades, se llegaron a plantear que no hubiera luces porque no había dinero. Frente a esta situación que calificó de “triste”, ahora considera que la situación está mejor, y que aunque se han vivido momentos malos también los ha habido buenos.
Los concejales independientes manifestaron su intención de ser aporte en la situación, y reconocer que no les gustaría estar sentados en el sillón del concejal de Hacienda, pero no dejaron pasar la oportunidad para asegurar que “cuando sale el dinero por la puerta el amor sale por la ventana”.
Para el PSOE la imagen de las ratas y las telarañas, es la metáfora perfecta “de la situación del desgobierno del PP, que no ofrece dignidad ni futuro a Jaén y la sigue hipotecando gravemente y sin soluciones a largo plazo”. También criticaron que el alcalde “no hiciese ni una sola propuesta de Gobierno para la ciudad y plantease el pleno en clave de autobombo barato”.
Los concejales de Jaén en Común (JeC) se han mostrado decepcionados ante un Debate sobre el Estado de la Ciudad “desvirtuado” al “convertirse en un listado de reivindicaciones partidistas”. Por eso decidieron salirse del guión y ofrecer al alcalde la posibilidad de aprobar cinco medidas concretas para empezar a hablar sobre el presupuesto municipal de 2017.
La revisión del PGOU de manera participada, la remunicipalización del servicio de basura, que el Ayuntamiento establezca programas de trabajo garantizado y desarrollo local con empresas pequeñas y cooperativas y un mínimo vital garantizado para que nadie sufra por falta de vivienda, transporte, luz, agua y gas. Condiciones que consideran fundamentales para empezar a discutir con la ciudad un presupuesto que cambie el rumbo de Jaén.