Los sindicatos UGT-A y CCOO-A, y el conjunto de organizaciones que integran la plataforma Compromiso Social para el Progreso de Andalucía, celebran este jueves manifestaciones en todas las capitales andaluzas contra las políticas de austeridad y recortes en la Unión Europea. Las movilizaciones se enmarcan en la manifestación sindical europea convocada en Bruselas por la Confederación Europea de Sindicatos (CES) para este viernes 4 de abril y exigir 'Un nuevo rumbo para Europa', lema de las marchas, y exigir políticas que estabilicen la situación económica, entre otras cuestiones.
La secretaria general de UGT Andalucía, Carmen Castilla y el secretario general de CCOO Andalucía, Francisco Carbonero, están presentando estos días las movilizaciones contra las políticas de austeridad en Europa y a favor de un plan de inversiones para crear empleo estable y de calidad. “El objetivo es luchar contra un sistema que pone a los trabajadores a competir sobre la base de la reducción de los salarios, de condiciones de trabajo mediocres, de protección social insuficiente y de una fiscalidad injusta. La política de empleo europea no puede basarse en el trabajo precario y en desigualdad”.
“No se puede competir con salarios bajos porque no se fomenta el consumo y eso es un grave problema. Por tanto creo que están más que justificadas estas movilizaciones”, ha señalado Carmen Castilla, quien ha añadido que “el informe de la OIT dice que la reforma laboral se ha hecho de espaldas a los principios de libertad sindical, dejando de lado la negociación colectiva y el papel de los trabajadores y sus representantes”.
“Pedimos un plan de empleo de inversiones para crear empleo estable y de calidad. Exigimos un nuevo rumbo de Europa para el marco de las próximas elecciones al parlamento europeo. Además, proponemos una inversión durante 10 años del 2% del PIB que pueden generar nada más y nada menos que once millones de empleos. De calidad, porque vamos a pedir que se siga respetando el papel que tienen las organizaciones sindicales así como la voz propia de los trabajadores. Y el objetivo de ese 2% pueden ser 250.000 millones de euros”, ha manifestado Castilla. Según la líder regional de UGT, “la inversión que han hecho los estados para rescatar las entidades financieras es de un billón de euros. Una sola cuarta parte de ese billón, sería lo que impactaría en esos 11 millones de empleos de calidad”.
A juicio de Francisco Carbonero, “la pérdida de prestaciones sociales junto con el deterioro y privatización de los servicios públicos ha motivado que se presten menos servicios a los ciudadanos, haya menos derechos y se esté llevando al país a una situación de ruina de la que será muy difícil salir”. Carbonero ha destacado la apuesta del sindicato por combatir la economía sumergida “que favorecen normas como la contratación a tiempo parcial o la llamada tarifa plana” y por conseguir la recuperación salarial a través de la negociación colectiva.
Sobre las elecciones europeas del próximo 25 de mayo, el dirigente de CCOO-A ha afirmado que “no deben ser vistas por la ciudadanía como algo lejano o como un trámite sino como la oportunidad de rechazar las políticas de la TROIKA y pedir un cambio de rumbo a las políticas europeas”. “Nos jugamos mucho en esas elecciones y no vale de nada que nos quejemos de las políticas que hacen en Europa si cuando llegan los momentos electorales no nos movilizamos para exigir que los partidos políticos incluyan políticas sociales en sus programas y ejerzamos nuestro derecho al voto en las urnas”, ha indicado.
Por su parte, el conjunto de organizaciones sociales que integran la plataforma Compromiso Social para el Progreso de Andalucía han manifiestado su respaldo y apoyo a las movilizaciones convocadas con las que “se quiere seguir demostrando el rechazo a las políticas de austeridad y recortes que se vienen imponiendo en la Unión Europea, y se ceban con los países del sur, como es en el caso de nuestro país, donde su aplicación extrema desde mayo de 2010 y bajo la premisa de la reducción drástica del déficit solo esta sirviendo como excusa para que el Gobierno de España imponga negativos cambios estructurales en el mercado de trabajo, en el sistema de pensiones y prestaciones y en el sistema de seguridad social”.
“Estas políticas regresivas solo están provocando situaciones extremas de paro, de empobrecimiento y pérdidas de derechos en el conjunto de la ciudadanía española, y solo persiguen imponer un modelo de sociedad basado en la desigualdad de oportunidades”, apuntan desde la plataforma.